Susana Ros. Diputada socialista por Castellón en el Congreso.
Con el PP los trabajadores y las clases medias seguirán soportando el mayor peso de los impuestos. Con la reforma fiscal del PP un ciudadano que gane 12.000 euros anuales se ahorrará 12 euros al mes. Para una renta de 20.000 euros al año, el ahorro será de 22 euros al mes. Pero sin embargo, para quienes ganen 150.000 euros al año, verán una rebaja de 270 euros mensuales en sus impuestos.
La reforma Fiscal del PP y de Rajoy quiere hacer pagar más impuestos a los trabajadores. Ahora el colmo de los colmos: les hará pagar por su indemnización cuando les despidan.
A medida que se va conociendo la letra pequeña de la Reforma Fiscal del Gobierno del PP, aumentan los motivos de preocupación para las clases medias y trabajadoras. Estas son quienes van a volver a soportar una nueva subida de impuestos, mientras Rajoy y el PP hace un auténtico regalo fiscal con su Reforma a las rentas más altas y a las grandes empresas.
Por ejemplo: la Reforma Fiscal que el Gobierno anunció el viernes obligará a que los trabajadores que sean despedidos paguen impuestos por la indemnización que reciban de la empresa que les pone en la calle. Las indemnizaciones por despido no tributan ni han tributado nunca en toda la historia de la democracia española. Con el agravante que ya es doloroso perder un trabajo y quedarte en el paro.
Rajoy va a pasar a la historia como el Presidente del Gobierno español que más daño ha hecho a los trabajadores. No sólo ha llevado a España a la tasa más alta de paro de toda su historia, sino que además: ha quitado derechos históricos reconocidos como la negociación colectiva que deja a manos de los empresarios que pueden modificar sus condiciones de trabajo y hasta bajarles el salario cuando les plazca llegando a provocar la mayor caída de salarios de la democracia; y también ha abaratado el despido y lo ha hecho más fácil.
Lo nunca visto: crear un nuevo impuesto para gravar a los parados.
Porque la verdadera reforma fiscal del PP no es la que nos han anunciado en estos días para aplicarla dentro de un año. Es la que hizo ya el Gobierno de Rajoy nada más llegar a la Moncloa: subir todos los impuestos a las rentas del trabajo y a la clase medía, imponer copagos que no existían, subir tasas y hacer una vergonzosa amnistía fiscal para los grandes defraudadores.
