Susana Ros. Diputada socialista por Castellón en el Congreso.
El curso que comienza en estos días va a caracterizarse por seguir incrementando los recortes materiales y humanos que están causando un descenso irreparable en la calidad educativa y, lo que es más grave, una merma sin precedentes en la igualdad de oportunidades.
Esta va a ser la peor de las peores vueltas al cole. Los recortes generalizados en los presupuestos, tanto en España como en la Comunidad Valenciana, han supuesto una disminución sin precedentes en el número de profesores en todas las etapas educativas, el incremento de alumn@s por aula, una drástica reducción de las ayudas a las familias para la compra de libros de texto y otro material escolar, la desaparición de muchas líneas de transporte, la disminución de becas de comedor, el incremento de las tasas universitarias acompañado de un recorte generalizado de las becas.
Estamos hablando de que los colegios e institutos de todos los municipios tienen menos profesores, más alumnos por aula, menos refuerzos, menos desdobles, más bajas de profesorado sin sustituir. Hay alumn@s que no pueden acceder al comedor, transporte o libros. Hay centros que han tenido que cerrar comedores.
Somos la tercera comunidad con el coste más alto de la vuelta al colegio. 990 euros de promedio por alumno, frente a los 605 de La Rioja o los 760 de Andalucía.
Y como colofón a este ataque sin precedentes a la educación en general, y a la pública en particular, nos encontramos ahora con un proyecto de Ley, la LOMCE, que nadie quiere y que tiene a toda la comunidad educativa en contra.
Desde el PSPV-PSOE reclamamos y exigimos que lo primero que hay que garantizar es que ningún alumn@ deje de estudiar por motivos económicos. Todo lo contrario que está ocurriendo desde que gobierna el PP. La educación pública está experimentando un retroceso de dimensiones alarmantes. Un retroceso que está condicionando el presente y el futuro de cientos de miles de estudiantes.
En los últimos tiempos parece que nos estamos acostumbrando a que se dice una cosa y se hace la contraría. Esto es lo que hace el PP.
No podemos estar orgullosos de las cifras de fracaso y abandono escolar prematuro, ni de que haya promociones de alumnado que no han conocido unas instalaciones dignas en toda su escolaridad porque sólo han estado en barracones.
Los problemas no se solucionan negando su existencia, ni atribuyendo las causas de los mismos a las leyes educativas o a la falta de esfuerzo del alumnado. Invertir en educación es invertir en empleo, innovación, formación, futuro. La educación no se vende, se defiende. Y un país que se denomina democrático debe garantizar una educación pública, universal y de calidad. Es garantía de equidad y de justicia social.
En Educación, ni un paso atrás. En educación, siempre adelante.