Federico Arnau. Comerciante jubilado.
Algunos políticos cuando alcanzan cierto poder dentro de la administración su personalidad sufre un trastorno político, convirtiéndose en un ser igual que un miembro de una secta, queda sumiso ante las directrices que marca la dirección de su partido, olvidándose de pensar, actuar como una persona civil, con sus virtudes y sus defectos, y queriendo utilizar a esas personas cuando es el tiempo de pedir el voto y pasar olímpicamente de sus peticiones posteriormente.
El pasado sábado, en una más de las varias intervenciones, que posiblemente tenga comprometidas Mónica Oltra, igual que otros políticos como Miguel Ángel Revilla, Presidente de Cantabria, en una cadena nacional, su intervención fue a mi modo de entender bastante penosa.
Cuando alguien alcanza el poder, y como vicepresidenta de la Generalitat Valenciana, ante la sociedad, por acuerdos internos, puesto que quería la presidencia a la que cedió a Ximo Puig, a un precio, desde luego, gratis nada. No puede hacer sus intervenciones simplemente culpando de todos los males al PP, demostrando su carencia, para olvidar lo de antes y mirar al futuro.
Sobre la financiación debería de tener la sensatez de decir que estamos mal financiados, evidentemente, pero al mismo tiempo que se pide esa reclamación también se debe decir y no omitir, que la financiación que tenemos es gracias a José Luis Rodríguez Zapatero, o es que está prohibido en el Pacte del Botànic.
Como abogada, le puedo admitir que se posicione en contra de la cadena perpetua revisable, pero Mónica Oltra no está ejerciendo de abogada, es vicepresidenta de una Comunidad Autónoma, la Valenciana, y que me diga que se posiciona en contra, porque hay que pensar en la reinserción, lo siento pero eso no corresponde.
Usted es madre, sería capaz de perdonar a un personaje que hubiese violado a sus hijos, matado y desaparecidos como muchos que hay. Yo le digo que no, y no solo revisable, si no sin ningún privilegio, que se pudriese en la misma celda, pues tiene la gran suerte el asesino que tras la ventana, sabe si es de día o de noche, si hace sol o llueve, ya eso es un gran privilegio que los muertos no pueden disfrutar.
María José Salvador, consellera de Infraestructuras de la Comunitat Valenciana, viene a Castellón a decirnos, primero que nada a criticar porque no saben otra cosa al PP, y después para que los castellonense les puedan aplaudir, nos dice que la línea del Tram nº 2 prevista desde el Hospital General hasta Vila-real, Betxí, Onda, Almassora y Borriana, incluso a Benicàssim, que ahora este último años está haciendo un autobús directo de la población benicense a la estación intermodal, por la CV 10 la descarta.
Para Salvador esto es carísimo, sin embargo, la línea 2 del Tranvía de Valencia, así como en Alicante, no hay problema, pero a Castellón,…..
Sin embargo los 150 millones de estos años para una Radio Televisión Valenciana no es caro cuando solo el presupuesto de este año, que aún no está en activo, se podrían comprar 170 unidades del Trolebús.
El trastorno que se les aplica en el cerebro a ciertos políticos, nos lleva a situaciones que son inaceptables para el ciudadano normal, trabajador, honesto e incorruptible.
Carles Mulet se queja en un artículo de un periódico local, de que el AVE ha llegado 15 minutos de retraso a Madrid, menos mal que no ha sido durante el trayecto entre Castellón y Valencia, si no de Valencia a Madrid.
Dice que el billete al estar fuera de promoción le ha costado 129 euros en clase turista, que el tiempo que utiliza desde que se levanta, coger el coche, desplazarse a la estación, embarcar, llegar a Madrid y añadir los 15 minutos de retraso, le es más fácil coger el coche, que le cuesta 40 euros llegar a Madrid con el mismo tiempo pero directo desde su casa al parking del Senado.
Mulet , y perdón por la expresión, tiene ‘huevos de manso’ al decir esto, ya que el ciudadano normal, aunque use su coche, la diferencia del precio reside en que cuando se llega a Madrid, tienes que aparcar en un parking, que no es gratis, no llegas igual de fresco y descansado, y al final el resultado es el que es.
Qué diferencia hay con Carles Mulet, pues que si lo hubiese tenido que pagar de su bolsillo, primero hubiese hecho como han hecho los castellonense anormales según su propio partido a través de un compañero suyo, hacer la reserva antes del día 31 para poder beneficiarse de los 25 euros.
Pero a Carles Mulet le es igual, primero porque su billete lo pagamos todos a través de las dietas que cobra, si se va en coche les sale muy rentable, porque pueden ir dos, tres o cuatro, encima tienen el parking gratis, y con el gasto de uno a repartir salen beneficiados, porque el Senado les paga a cada uno lo que les corresponde por dientas y desplazamiento, y como eso lo pagamos los idiotas del pueblo, porque bien se lo podrían pagar ellos mismos con los 5.000 euros que ganan más seguros privados que sufraga el Senado y pensiones máximas garantizadas.
Y para que este artículo no sea excesivamente largo, porque hay mucho que contar sobre el trastorno de algunos políticos que sufren al tocar poder y que intentare explicar en los siguientes, sí que les invito a que puedan observar la tertulia que este periódico emite todos los días a las 7 de la tarde, excepto el lunes que de 6 a 7 emite la deportiva, pulsando sobre el Facebook del periódico, la que se emitió el miércoles 31 de Enero, en la que intervino María España, del PP, Juanma Segarra, de Compromis, Xavi del Señor, de Castelló en Moviment, y un servidor ex comerciante jubilado, que no está en ningún partido, pero que los populistas me etiquetan como facha y del PP.
Por cierto, si eso es así, desde estas líneas, bien Isabel Bonig o Begoña Carrasco me podrían contratar como asesor, pero ya digo desde estas líneas que yo no aporto nada de mis emolumentos al partido.