Vicente Martínez. Alcalde de Xilxes y presidente de la Comisión de Turismo del Partido Popular de la provincia de Castellón.
Soy chilchero, valenciano, español y me gustan los toros. No soy pues ningún bicho raro. Es más, tal vez soy como la mayoría de los chilcheros, valencianos y españoles.
Mi lengua materna es el valenciano, y es la que utilizo en la mayor parte de mi tiempo. Y la llamo así, valenciano (valencià). Estoy muy orgulloso de mi lengua y la protejo y la difundo tanto como puedo, pero eso no quita que también me emocione cada vez que oigo las notas de la Marcha Real, del Himno de España. Tanto o más que cuando escucho el “Per a ofrenar…”, que canto siempre con orgullo.
Quiero a mi pueblo y a mi país y siento como propias todas y cada una de sus tradiciones y costumbres, me gusten más o menos, porque son nuestras. Especialmente me gustan los toros, ‘els bous al carrer’. Nada original. Tengo gustos muy parecidos a los de mis vecinos.
Por eso me sorprende que sólo haya una opción política que defienda a la vez ese conjunto de cosas: la identidad valenciana, el orgullo de ser español y la defensa de una de las fiestas más arraigadas, los toros. Y me sorprende por cuanto con esas sencillas cosas, que no van ligadas (o no deberían ir) a cuestiones ideológicas, me ha quedado sólo una única opción: el Partido Popular. Puede que me equivoque y haya algún partido minoritario que contenga esos tres elementos, pero ahora no caigo en ninguno que lo haga sin ambages ni medias tintas.
No es bueno. Lo creo firmemente. No es bueno que lo que en todas las encuestas es común a la mayoría de valencianos, no sea recogido por ninguna opción política, ya que provoca que toda la gente que comulga conmigo en esas tres cosas tenga sólo para elegir una opción.
Eso para el Partido Popular supone además una responsabilidad añadida: la de conformar en sus propuestas todos los demás asuntos que preocupan a los ciudadanos de forma que confíen en este partido para gobernar las instituciones. El Partido Popular las viene asumiendo. Con algún error, como es lógico, pero procurando cada día estar cerca de los ciudadanos y siendo sensible a sus preocupaciones reales: el paro, la inestabilidad, la corrupción, etc.
Así pues, lectores, ya saben: exíjannos pero tengan claro que por desgracia, si como yo, se siente valenciano, español, le gustan los toros y está orgulloso de ello sólo le defiende el Partido Popular.