FICHA TÉCNICA:
-1- CASTELLÓN: Álex; Gallego, Josema, Guille, Alberto Ramos; Dani Pujol, Canadell (Víctor Pino, min. 72), Yagüe (Charly Meseguer, min. 72), Gabi; Zárate (Diego Carrillo, min. 57) y Carrascosa.
-1- ORIHUELA: Emilio; Álex, Micro, Urzáiz, Dani Meseguer, Fleky, Nacho (Ginés, min. 61), Rubén (Del Cueto, min. 75, Álvaro (Antonio, min. 46), Kike Mateo e Isaac.
GOLES: 0-1, min. 76: Urzáiz. 1-1, min. 93: Adriá Gallego.
ÁRBITRO: Bueno Miralles (Castellón). Amonestó a los locales Gabi y Carrillo; y a los visitantes Urzáiz, Fleky, Micro, Dani Meseguer, Nacho y Adrián (ps).
INCIDENCIAS: Unos 2.500 aficionados en el estadio Castalia.
F. A.
Como hasta el rabo todo es toro, un gol del lateral diestro Adrià Gallego en el minuto 93,20 le dio un punto al conjunto albinegro, como mal menor ante un Orihuela que nunca mereció ganar, y casi lo hizo. Un gol a balón parado en el minuto 76 del Orihuela puso el 0-1 en el minuto 76 y cuando todo parecía estar perdido un gran centro de Diego Carrillo desde la derecha lo remató Adrià Gallego al fondo de las mallas. In extremis y ante el deliro de la afición albinegra.
Primer tiempo donde el Castellón propuso y el Orihuela ni dispuso ni nada. Fueron los albinegros los que intentaron llevar la voz cantante ante un rival con oficio, tablas, saber estar en el campo, llegando a desesperar con su actitud del colectivo en la recta final del primer acto, que terminó tal y como arrancó. Pocas ocasiones de gol y pelea en la medular del terreno de juego.
El técnico del Castellón, Joan Esteva, apostó por la continuidad. Sacó al mismo once que el sábado pasado logró arrancar los puntos del Mini Estadi frente al Villarreal C. Y lo cierto es que, en líneas generales, los capitalinos estuvieron más atinados. Fueron mejores. Disfrutaron de dos ocasiones buenas para marcar, pero quedaron en nada.
La primera en el minuto 8. Desde la izquierda centró uno de los más activos (Roberto Canadell) y el cabezazo de Iker Zárate que salió alto. Y la segunda en el minuto 28 con un cabezazo del lateral Adriá Gallego, a la salida de un saque de esquina, que incomprensiblemente remató fuera, cuando se cantaba el gol. Poco bagaje ofensivo en los albinegros, y aún menos se pudo anotar del Orihuela, muy conservador. En el minuto 42 Kike Mateo remató a las manos de Álex Ruiz.
Así, con ese 0-0 se llegó al descanso. La segunda mitad arrancó con un cambio en las filas oriolanas. Álvaro dejó su puesto a Antonio. Los minutos iban pasando y el resultado inicial no se alteraba ni a la de tres. Más que nada es porque las áreas se pisaban de uvas a peras. Muy de tarde en tarde. Y buscó más profundidad el Castellón por el carril izquierdo dando entrada a Diego Garrillo, por Zárate.
Pasaban los minutos y el 0-0 imperaba en los video marcadores de Castalia. Y como suele suceder en estos casos, la primera aproximación rival suele ser fatal de necesidad. Y lo fue. Primero con el trallazo de Kike Mateo que golpeó en la espalda de la defensa albinegra (min. 75). Dicho saque de esquina lo ejecutó el propio Kike Mateo y en el primer palo peinó el central Urzáiz al fondo de las mallas. Jarro de agua fría: 0-1 en el minuto 76.
De ahí al final: correr y más correr. Y no llegó el 0-2 de milagro. Y cuando el tiempo estaba más que cumplido, en el 93,20 segundos, y cuando mucha gente ya se marchaba a casa, un centro de Diego Carrillo desde la derecha fue rematado a la red por el lateral Adriá Carrillo. Sí, para poner un 1-1 que fue justo premio para el Castellón, aunque en el cómputo general los capitalinos merecieron más. Mucho más.