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Estefanía Climent ha demostrado esta noche el orgullo de pertenecer a una ciudad que se rindió ya a sus pies desde el mismo momento de su nombramiento. La Galanía a la reina de la Magdalena 2017, celebrada esta noche en el Palau de la Festa, cierra la primera fase de las fiestas de este año. En breve, los preparativos, presentaciones y homenajes darán paso a la semana más importante para la reina y de la ciudad, la de la celebración de las fiestas fundacionales de Castellón, que se desarrollarán entre el 18 y el 26 de marzo.
Puede afirmarse con seguridad que Estefanía ha estado como en un nube, aunque no sola, sino con la inmejorable
compañía de su cortejo de honor compuesto por la Dama dels Cavallers de la Ciutat, y las damas de la ciudad: Marina Redó Fortanet, Carla Bernat Pascual; Tatiana Castillo Roig; Cristina López López; Andrea Pradas Barreda; Noelia Capdevila Durán y Rocío Querol Vilar.
Y con ellas las madrinas de los sectores gaiteros de Castellón.
En esta noche tan especial, también ha podido comprobarse la complicidad de la reina con todos los sectores de una fiesta en la que collas, gaiatas, músicos, actores, organizadores, festeros todos, se dan la mano para vivir la Magdalena de 2017.
La Galanía de la reina estuvo plagada de momentos fundamentales de la tradición castellonense, de su historia y de su cultura. Especialmente importante para Estefanía Climent, fue la 'Galanía', el discurso de Elisabet Breva, que supo expresar el carácter de una Magdalena que conoce y ha vivido las fiestas de Castellón, en todos sus escalafones, y que hoy representa a todas las mujeres de la Capital de la Plana.
Pero no fue la única sorpresa aunque le esperaba a la reina. Momentos felices fueron todos, pero lo que no esperaba es, que cuando ya parecía que había pasado todo, cuando las representantes de sector ya habían abandonado el escenario, cuando sus damas la dejaron sola como punto central del acto... todavía había un homenaje más.
Estefania volvió a revivir los detalles de la tradición Magdalena, con música, con baile, con homenaje... y cuando ya todo se acababa y solo esperaba que la nombraran para bajar de su trono... entonces llegaron los farolillos de la fiesta. Personas queridas con la luz de la Magdalena, con la luz de la Gaiata que precedían a una persona muy especial, a su padre vestido de Setí, que desfiló por el pasillo central del Palau para rendir su especial homenaje a la pequeña que fue, la niña que creció y hoy, a la reina de todo Castellón.
Estefania Climent no pudo contener las lágrimas, ni cuando vio avanzar a los portadores del farol, ni cuando descubrió quien los acompañaba y no se había resistido a quedarse al margen de uno de los momentos que su querida hija recordará toda su vida
A dos semanas de que el pistoletazo de salida, Castellón ya huele a Magdalena.