La escuadra albinegra jugará este sábado contra el Algeciras en Nuevo Mirador (19.00 horas); la final a doble vuelta será el 28-29 en Riazor y el 1-2 de junio en el Estadio Castalia
El Castellón ya se encuentra en Sevilla donde entrenará y velará armas antes de desplazarse hasta Algeciras (Cádiz) donde jugará contra la escuadra del Campo de Gibraltar en el campo Nuevo Mirador, este sábado a partir de las 19.00 horas. Penúltimo encuentro de los castellonenses lejos de casa antes de poner el punto y final a esta exitosa temporada 2023-24. El último será contra el Deportivo en Riazor, en el partido de ida de la final de la Copa de Campeones.
El conjunto castellonense, campeón del grupo II de Primera Federación, visitará el sábado a un rival que tampoco se juega nada. El equipo de Dick Schreuder acudirá a esta cita con varias ausencias. No estarán por sanción Borja Granero, Raúl Sánchez, Mamadou Traoré y Alberto Jiménez. Además, son baja por lesión tanto Salva Ruiz como Josep Calavera, y son duda de última hora y no se forzará a de los tocados Jesús de Miguel e Israel Suero.
Ante la falta de efectivos en técnico del Castellón se ha visto obligado a echar mano de cuatro futbolistas del Castellón B. Es el caso del central Sergio Miñana, el lateral Jose Albert y los centrocampistas Iker Punzano y Rubén Murcia. Los tres primeros ya saben lo que es debutar en el primer equipo.
La Copa de Campeones
El Castellón ya conoce cuándo disputará la final a doble partido correspondiente a la Copa de Campeones, enfrentando a los dos primeros clasificados de cada uno de los grupos de Primera Federación, equipos ascendidos ya a Segunda, pero se disputarán el ver qué equipo ha sido el mejor en esta temporada 2023-24.
La RFEF ha dados el visto bueno para adelantarlo todo en una semana. Es decir, a falta de horario, el partido de ida se disputará en el Estadio Riazor el miércoles día 29 y la vuelta en el Estadio Castalia el domingo 2 de junio. Faltaría por concretarse el horario que sería siempre entre las 20 y las 22 hora de esos días.
Con el adelanto de esta final, el Castellón ganaría una semana de tiempo para las obras que se tienen que llevar a cabo en Castalia para adecuarse a las exigencias del fútbol profesional y que pide LaLiga.
