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El equipo de gobierno ha destacado que gracias a la eficacia en la gestión económica se ha pasado de 30,5 millones en facturas pendientes en 2011 a 177.686 euros en 2015
Castellón se ha situado como la tercera capital de provincia española con menos gasto pendiente de imputar al presupuesto o lo que se conoce como facturas en el cajón. Según un balance publicado por el Ministerio de Hacienda, Castellón cerró el ejercicio de 2015 con 177.686,58 euros en facturas no aprobadas, lo que supone una media de 1,03 euros por habitante, un porcentaje solo mejorado por Córdoba y por Huesca. Hace apenas cinco años, en 2011, las operaciones pendientes de aplicar al presupuesto ascendían a 30,5 millones. “Cerrar el año con un volumen excesivo de facturas pendientes de asignar al presupuesto refleja que se ha hecho mal ese presupuesto, que el gasto está muy por encima de lo previsto o que ha habido una mala gestión económica”, ha explicado el concejal de Gestión Municipal, Antonio Lorenzo. La alcaldesa, Amparo Marco, ha afirmado que “este es un dato más que avala la buena gestión económica que se está realizando desde el Ayuntamiento de Castellón”.
Este tipo de facturas, recogidas a nivel contable en la Cuenta 413, corresponden a gastos que llegan antes del 31 de diciembre que no se han aprobado y que, por tanto, no se han imputado al presupuesto. Estos 177.686,58 euros suponen, además, el mejor resultado registrado en el Ayuntamiento de Castellón desde el año 2009 y bajar por primera vez de la barrera de los 200.000 euros.
Hace apenas cinco años, en 2011, las operaciones pendientes de aplicar al presupuesto ascendían a 30,5 millones. “Cerrar el año con un volumen excesivo de facturas pendientes de asignar al presupuesto refleja que se ha hecho mal ese presupuesto, que el gasto está muy por encima de lo previsto o que ha habido una mala gestión económica”, ha explicado el concejal de Gestión Municipal, Antonio Lorenzo. La tendencia a la baja comenzó a notarse en 2012, después de tres años consecutivos de subidas hasta alcanzar los 30,5 millones de 2011. En 2013 se logró bajar por primera vez del millón de euros en facturas pendientes de aplicar al presupuesto y en 2014 la cifra se situó en 758.079,98 euros. Esta cantidad se redujo un 75% en el ejercicio de 2015, que ya cerró el nuevo Gobierno municipal, al lograr reducir en más de 580.000 euros el estado de la Cuenta 413 y situarse en 177.686,58 euros.
“Si en términos relativos Castellón se ha situado como la tercera capital de provincia con menos facturas en el cajón, en cifras absolutas también se demuestra la eficiencia en la gestión económica municipal ya que además de Castellón solo hay otras cinco capitales de provincia que estén por debajo de los 200.000 euros y cuatro de esas ciudades tienen una población de 50.000 o menos habitantes”, ha subrayado el concejal del área de Hacienda, Antonio Lorenzo.
Así, la alcaldesa ha mostrado su satisfacción por estos datos y ha querido destacar que el Ayuntamiento de Castellón ha cerrado el presupuesto municipal de 2015 con algunos de los mejores datos económicos de las últimas décadas: el consistorio ha cerrado el presupuesto de 2015 con el mayor superávit de su historia, 22,6 millones de euros; la partida de gastos financieros se ha reducido a 1,5 millones de euros frente a los 5 millones de media que gastó el anterior equipo de gobierno entre 2012 y 2014; se ha conseguido destinar 5,3 millones de euros a un “colchón financiero” que reducirá el dinero que se pide a los bancos en cuentas de créditos; se va a amortizar deuda por valor de 5,4 millones, lo que permitirá pagar menos intereses el año que viene, y se ha reducido el plazo medio de pago a proveedores, alcanzando un mínimo histórico en el pasado mes de febrero cuando se consiguió pagar en una media de 2,34 días.
Finalmente, Amparo Marco ha explicado que todo ello “es consecuencia de la apuesta del Gobierno Local por incluir procedimientos y criterios para mejorar la eficiencia en la gestión municipal, los cambios normativos y la gran labor que están realizando los funcionarios de la casa”. “Estamos desarrollando una política económica y presupuestaria lógica, coherente, ordenada y sensata que se traduce en que hemos mejorado la gestión para reducir costes y destinar el dinero a lo que de verdad importa, el bienestar de nuestros vecinos y vecinas” ha concluido la alcaldesa.
