José Vicente Ramón Moreno.
Antes de mirar la prensa abro mi buzón de correo electrónico y me encuentro con uno de Juanjo Trilles dándonos la mala noticia del fallecimiento de Vicent Pau Serra i Fortuño.
Inmediatamente se agolpan en mi cabeza infinidad de situaciones, bromas, comentarios, ‘chascarrillos’, y un sinfín de buenos momentos vividos al lado de uno de los pilares de nuestra cultura, de la de aquí, de la que se escribe con minúsculas pero se goza con mayúsculas.
Con una capacidad creativa increíble Vicent Pau ha hecho que cada minuto de su vida sea fructífero pues ya sea en llibrets de gaiata, o de fiestas, certámenes como la Flor Natural, el de la Cofradía de Lledó o el de ALCAP, trabajos de investigación sobre aspectos de nuestras fiestas, y un largo etcétera, su rigor y dominio de todo aquello que hacía era merecedor de un tratamiento ‘cum laude’.
Han sido tantos y tan variados los aspectos en los que Vicent Pau se ha involucrado que el mundo de la cultura, y en especial el de las fiestas, siempre estarán endeudados con su figura y todo lo que ha representado.
Cuando veamos pasar ‘els cavallets o els nanos’ recordaremos que Vicent Pau fue impulsor de su recuperación, cuando caigan en nuestras manos algunos ‘goigs’ es muy probable que lleven su firma, cuando escuchemos el ‘Pregó infantil’ nos sonará su voz rota en nuestro corazón, cuando se celebre el Certamen Literario de Lledó le veremos mentalmente recitando por cinco veces sus obras ganadoras o en tres ocasiones la Flor Natural de nuestras (o mejor dicho ‘sus’) Fiestas de la Magdalena.
Con todo el cariño y el apoyo moral a Paquita quiero decirle: ”Vicent, gràcies per viure en el nostre temps”. D.E.P.