Castellón tiene un problema estructural de despoblación del interior y de falta de infraestructura
El Comité Económico y Social (CES) ha presentado esta mañana en Castelló la Memoria sobre la situación socieconómica y laboral de la Comunitat Valenciana 2018. En su presentación, el presidente de la entidad, Carlos L. Alfonso, ha concretado que la provincia de Castellón tiene un problema estructural de despoblación del interior y de falta de infraestructuras que se va solucionando, pero en el que hay que intensificar el trabajo
S. Barberá/Castellón Información
El presidente del Comité Económico y Social (CES) de la Comunitat Valenciana, Carlos L. Alfonso, ha manifestado hoy, antes de la presentación de la ‘Memoria sobre la situación socioeconómico y laboral de la Comunitat Valenciana 2018’, que el CES ha detectado dos problemas muy importantes como son “la falta de una financiación más justa para la Comunitat Valenciana, ya que pensamos que el crecimiento sería mejor si tuviéramos una financiación más justa por renta y por actividad económica", y un segundo elemento importante es "el cambio del modelo productivo”. En este sentido, ha señalado que “se está apostando por él, pero hay que intensificar la apuesta por una economía basada en el conocimiento, la investigación, las nuevas tecnologías, en definitiva se trata de modernizar nuestra actividad industrial, pero esto tiene un factor problemático como es la estructura empresarial que tenemos que muchas veces es la pequeña empresa, pero hay que prestarle atención”.
La 'Memoria sobre la situación socioceconómica y laboral de la Comunitat Valenciana 2018 se presentó ayer martes en las Corts Valencianes y al presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, y hoy se ha dado a conocer de forma pública en Castelló, sede del organismo. La presentación ha corrido a cargo del presidente y de los vicepresidentes del organismo, Ricardo Miralles y Elvira Ródenas.
La valoración sobre la situación de la Comunitat se recoge en un manual de mil páginas sobre la situación social, económica, poblacional y laboral. El diagnóstico está consensuado por las diferentes organizaciones que configuran el Comité Económico y Social, que está compuesta por las asociaciones empresariales, los sindicatos, y asociaciones de la sociedad civil valenciana como cooperativas, del sector agrario, cofradías de pescadores, consumidores y usuarios, federación valenciana de municipios y provincias, las Cámaras de Comercio.
Tal como ha explicado Alfonso, lo que constata la memoria es que “la Comunitat Valenciana continua creciendo”, pero con factores que hay que observar con atención porque según el presidente del Comité “se ha ralentizado el crecimiento de la industria y ello pueden afectar factores internacionales como las dudas que hay a nivel mundial por el Brexit, y esto afecta a un sector importante de nuestra Comunitat como son las empresas exportadoras, como las del automóvil o la cerámica, por ello es un elemento que hay que constatar con preocupación”.
Desde el CES tienen una visión optimista del panorama de la Comunitat, según ha asegurado el presidente, “hemos detectado un esfuerzo muy importante de la sociedad, de los trabajadores, de las instituciones porque las cosas funcionen bien y por ello tenemos una visión optimista, pensamos que están funcionando mejor, por ejemplo las políticas públicas están funcionando mejor, la sociedad civil también, los empresarios están aguantando muy bien los factores de riesgo, los trabajadores están contribuyendo a esta mejora. Pero dentro de esta visión optimista también hay problemas que continúan como las bolsas de marginación y el acceso de la gente joven a la vivienda es un problema importante”.
La despoblación, principal problema de Castellón
En cuanto a los problemas concretos de la provincia de Castellón, ha concretado que el principal es la despoblación de las zonas rurales. “De las cinco o seis comarcas más despobladas de la Comunitat Valenciana, tres están en la provincia de Castellón por ello es un problema serio, tanto económico como social, la concentración de la población en la franja litoral. También Castellón tiene un problema de infraestructuras porque por ejemplo la estructura ferroviaria es deficiente y habría que mejorarla, que afecta también a las poblaciones del interior, porque si no hay un ferrocarril que vertebre el territorio eso afecta. En definitiva, pensamos que en la provincia de Castellón hay más problemas estructurales”.
Otro de los problemas que puede afectar a la provincia es la naranja que puede verse afectada por acuerdos de la Unión Europa en terceros países.
En materia de mercado de trabajo, en la memoria se destaca, que se está incrementado los datos de empleo y están bajando los datos del paro pero sigue existiendo una dependencia excesiva a la temporalidad y un sesgo de género en la población activa donde hay menor presencia de mujeres y mayor presencia de mujeres en los datos del paro registrado. "En definitiva vemos una recuperación leve porque todavía nuestro mercado de trabajo tiene que cambiar sustancialmente" ha concluido.