En su "Memoria Socieconómica y laboral de 2020", el órgano consultivo alerta del aumento del desempleo en un 13,8% con la destrucción de 72.500 puestos de trabajo en la Comunitat
G. A. R./Castellón Información
La economía de la Comunitat Valenciana se contrajo un 11,5 por ciento en 2020, año de la pandemia, por encima del resto de España, un 10,8% y de la zona Euro, 6,6%, según avanzó hoy el presidente del Comité Económico y Social de la Comunitat Valenciana (CES-CV), Carlos Luis Alfonso Mellado, en la presentación de la “Memoria sobre la Situación Socioeconómica y Laboral de la Comunitat Valenciana, 2020”, en la Casa dels Caragols de Castellón. Un acto celebrado tras el pleno en el que se aprobó por unanimidad este documento.
Entre las razones de esa caída de la actividad económica están, apuntó, “la reducción del consumo privado de las exportaciones de bienes y servicios explican la mayor pare de la caída del PIB, que fue más intensa en los meses de abril y mayo”, en pleno confinamiento. En su exposición, Carlos Alfonso, indicó que las medidas extraordinarias adoptadas para atajar la pandemia han tenido un impacto contractivo "severo" sobre el PIB y el empleo (aumento del desempleo en un 13,8%) en la Comunitat Valenciana, lo que supuso la destrucción de 72.5000 puestos de trabajo y deparó 51.300 desempleados más al concluir el año.
Por contra apuntó que la menor incidencia sanitaria de la enfermedad y el mayor peso del turismo nacional con respecto al extranjero han permitido una recuperación más rápida, lo que "unido a un menor efecto de la crisis sobre la inversión y las exportaciones, ha dado lugar a un impacto final más reducido en el comportamiento de la demanda de la Comunitat.
El CES-CV apunta en su Memoria que es preciso el reforzamiento del sistema sanitario público, dotándolo de más recursos humanos, económicos y de infraestructuras. Pero para poder afrontar ese objetivo es preciso que la Comunitat Valenciana reciba más fondos del Gobierno central, "lo que pone de relieve la insuficiente financiación que recibe", señaló Carlos Alfonso, que insistió en que "es preciso cambiar el sistema de financiación actual pues la situación es insostenible". Asimismo, recordó que el riesgo de despoblación que afecta a 78.897 personas de 171 municipios de la Comunitat.
Tras reconocer el esfuerzo realizado por la Administración, el presidente el CES-CV insta a mantener las políticas encaminadas a superar la crisis, priorizando el gasto sanitario y apoyando a las familias y empresas, incluidos los trabajadores autónomos, por medio de políticas monetarias y fiscales expansivas.
El presidente del CES-CV ha abogado porque la Comunitat Valenciana continúe sentando las bases para alcanzar un modelo económico sustentado en el conocimiento, la innovación, la apertura y la conexión con el exterior, "articulado sobre el principio de sostenibilidad, además de apostar por la digitalización y la reindustrialización".
En materia de infraestructuras, el CES-CV cree fundamental la total finalización de las obras del Corredor Mediterráneo, así como afianzar las del Corredor Cantábrico-Mediterráneo. Además, reivindica otras infraestructuras ferroviarias como el Tren de la Costa de la Comunitat Valenciana o la red de cercanías, y aboga por el impulso de plataformas intermodales que permitan pasar de carretera a ferrocarril y a transporte aéreo.
En materia portuaria, el órgano consultivo recomienda a la Autoridad Portuaria de Valencia, a Puertos del Estado y a las tres administraciones con capacidad en la toma de decisiones que el proceso de participación de la sociedad civil garantice alcanzar consensos en los que se tenga en cuenta la sostenibilidad social, medioambiental y económica en lo que se refiere al proyecto de ampliación del Puerto de Valencia.
Empleo
La presidenta del Grupo de Trabajo del Bloque II, Mila Cano, que ha abordado las Políticas de Empleo y Relaciones Laborales, ha destacado el descenso de la ocupación en un 3,2% en 2020 y el aumento del desempleo en un 13,8%. Además, ha indicado que en diciembre de 2020 en las oficinas de empleo de la Comunitat Valenciana había inscritas 437.701 personas, a las que hay que añadir 47.150 personas sujetas a un ERTE.
Según ha explicado, los sectores más afectados han sido servicios -especialmente hostelería y comercio-, seguido de actividades de ocio, servicio doméstico, transportes y almacenamiento y agricultura; mientras que las comarcas más afectadas han sido aquellas que están más vinculadas con el turismo, como Marina Alta y Marina Baja en Alicante, la ciudad de València y Els Ports en Castellón.
La Memoria del CES-CV apunta que el desempleo juvenil se agravó considerablemente durante la crisis sanitaria, elevándose la tasa de paro entre la población más joven hasta alcanzar el 36,6%,a lo que se suma el bajo porcentaje de beneficiarios de prestaciones por desempleo en el colectivo de los jóvenes.
Nardi Alba ha sido la encargada de exponer los puntos más destacados vinculados a niveles y condiciones de vida, y ha recordado que la Comunitat Valenciana necesita luchar contra la despoblación del medio rural y garantizar la igualdad de derechos de sus habitantes.
Por otra parte, para luchar contra el cambio climático, el CES-CV propone extender e impulsar la generación de energía mediante fuentes renovables y potenciar el autoconsumo, además de promover la economía circular para reciclar, reducir y reutilizar.
Asímismo, el CES-CV recomienda modificar progresivamente el modelo de financiación del sistema público de pensiones y adaptarlo a las tendencias demográficas que están reduciendo la población activa y propone realizar un estudio para impulsar el nuevo modelo que atienda criterios de suficiencia de prestaciones para las futuras generaciones.