Castellón Información
Los investigadores del Instituto de Materiales Avanzados (INAM) de la Universitat Jaume I, Juan Bisquert (director) y Francisco Fabregat (investigador principal), ayudados por técnicos del Departamento de Física, Noemí Sanchis y Pablo Domínguez, han puesto en marcha una iniciativa dirigida a las escuelas de Castellón para promover la enseñanza científica desde edades tempranas, en este caso sobre cuestiones energéticas. Concretamente, los investigadores han diseñado un sistema para explicar la energía solar fotovoltaica a niños de sexto de ESO (11-12 años) o mayores con instrumentos de medida que han sido financiados por el proyecto Destiny, una acción tipo Marie Curie de la Unión Europea.
La iniciativa se puso en práctica por primera vez este mes de enero en el CEIP Bernat Artola. En la primera parte de la actividad, se realizó una explicación del problema de los combustibles fósiles y su impacto sobre el cambio climático, que motiva la necesidad de utilizar sistemas de producción de energía renovable. En la segunda parte, los niños utilizaron un sistema de medida especialmente diseñado para este fin. El equipamiento les permitió manipular y determinar la producción eléctrica de energía, primero con baterías, y después con células solares fotovoltaicas, lo cual les hizo comprender la conversión de luz en electricidad, de forma cuantitativa.
Según apuntan los investigadores del INAM, esta experiencia ha dado unos resultados excelentes. Se ha observado que poner en contacto a los niños con investigadores profesionales genera un gran interés en el aula. Así, los niños ya tienen una familiaridad previa con estas cuestiones energéticas, científicas y de gran impacto social y rápidamente se involucran cuando ven la posibilidad de profundizar en estos temas fascinantes, generan preguntas y trabajan en equipo para encontrar soluciones consensuadas. En cuanto a la parte aplicada, estos niños han sido capaces de dominar rápidamente las magnitudes físicas de corriente eléctrica, tensión, potencia, energía. También han realizado las conexiones eléctricas sin dificultad, investigado variaciones y han encontrado regularidades y propiedades. Por lo tanto, en un tiempo relativamente breve han comprendido perfectamente los aspectos principales de la conversión de luz solar en electricidad.
«En general, esta experiencia demuestra que los niños adecuadamente preparados por sus maestros y los investigadores científicos, establecen muy rápidamente una conexión, puesto que comparten la candidez que comporta un espíritu de curiosidad y aprendizaje, la capacidad de discusión y la voluntad de comunicación», apuntan los miembros del INAM. Así mismo, añaden que las discusiones posteriores también han puesto de manifiesto que los maestros de escuela tienen un gran interés en dar una formación científica de calidad a sus estudiantes, puesto que mejora su formación y al mismo tiempo puede ser un material de trabajo que pone en marcha una gran participación en las aulas.
Desde el INAM, existe un gran interés en desarrollar futuras acciones que involucran la experiencia viva de los investigadores científicos profesionales y la capacidad comunicativa y formativa de los maestros, para establecer programas de gran impacto en la cultura científico-técnica de los futuros ciudadanos. Así, invitan a los diferentes sectores sociales interesados, como los diferentes especialistas formativos, responsables de gestión educativa, etc., y sobre todo los maestros, a hacer llegar sus opiniones al respecto para establecer un programa concreto y efectivo que acerque los investigadores y la ciencia a las escuelas. Se pueden hacer llegar los comentarios pertinentes a la dirección del INAM (inamadmin@uji.es).