El Consell prorroga el convenio con el Ministerio de Agricultura sobre la gestión del espacio marítimo-terrestre hasta 2018
La Generalitat Valenciana y el Ministerio de Agricultura seguirán compartiendo la gestión y los gastos de mantenimiento del espacio marítimo terrestre de las Islas Columbretes, situadas en el término municipal de Castellón, a una distancia de unas 30 millas náuticas. El Consell ha prorrogado hoy el acuerdo original que se firmó en el 2006, hasta el 2018.
Castellón Información
El Consell ha aprobado hoy la prórroga del convenio de colaboración con el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente sobre la gestión compartida del espacio marítimo-terrestre del Archipiélago de las Islas Columbretes.
El convenio fue firmado por el Ministerio y la Conselleria de Infraestucturas, Territorio y Medio Ambiente el 3 de noviembre de 2006 y fue prorrogado hasta el 31 de diciembre de 2014. Ahora, el convenio se prorroga hasta diciembre de 2018, ya que la colaboración realizada durante los años de vigencia ha tenido los efectos previstos.
Gracias a esta prórroga, ambas administraciones seguirán realizando de forma conjunta tareas de seguimiento, información y difusión de los seres vivos de las Columbretes y diversas actividades de conservación, así como del mantenimiento de las instalaciones destinadas a los servicios de las islas.
El Ministerio de Agricultura se encargará, además, de la conservación de los recursos pesqueros, la operatividad de los servicios de mantenimiento y la protección de la reserva marina para lo que aportará los barcos necesarios.
Por su parte, la Conselleria tiene encargada la operatividad del mantenimiento de la reserva natural y el funcionamiento del centro de información de las Columbretes situado en el Planetario de Castellón.
Las Islas columbretes están declaradas espacio protegido y reserva natural. Las restricciones de usos en su área están vinculadas a estos reconocimientos especiales de protección. Lamentablemente durante el último año han sido protagonistas no por su riqueza marina y ambiental, sino, por la petición de una licencia para realizar prospecciones acústicas en su entorno. La empresa que solicitó estos permisos, permite comprobar si hay petróleo en el subsuelo.
El informe de impacto ambiental, sobre la documentación aportada por esta empresa, se publicó a principios de enero. Desde entonces se han producido más de 2.000 alegaciones sobre los impactos negativos que, tanto la prospección acústica, como posteriormente las perforaciones petrolíferas si las hubiera, originarían en el archipiélago y en las especies marinas protegidas. El ministerio todavía no se ha pronunciado en torno a las alegaciones ni sobre la aprobación de este impacto ambiental.
