Diez meses después de que se realizara el vallado del complejo Eurosol de Benicàssim han empezado las obras de derribo del emblemático recinto turístico y comercial de la zona de las villas de la localidad con 50 años de historia.
El complejo se encuentra ubicado en la playa de Heliópolis, una de las más concurridas de Benicàssim, y que junto con las de Torreón y Voramar son las más comerciales. Frente a lo que ocurre con estas dos últimas, la zona de Eurosol se presenta como una zona de paso, sin plazas, zonas peatonales y con escaso aparcamiento. Por este motivo y según han explicado varias voces expertas el ayuntamiento tendrá que volcarse en buscar soluciones como lo hizo con Voramar y, sobre todo, con Torreón.
El Ayuntamiento de Benicàssim concedió la licencia para las obras de derribo de Eurosol el pasado mes de marzo tras recibir los informes favorables por parte de Costas Madrid y de Costas Valencia.
Eurosol pasará a ser un nuevo centro gastronómico y de ocio, en principio sin locales comerciales, y estará gestionado por el grupo La Guindilla, liderado por José Romero, que cuenta con numerosos locales en Castelló y Benicàssim.
El centro, con una extensión aproximada de 3.000 metros cuadrados, estará distribuido en tres plantas tal como ha explicado el concejal de Urbanismo, Carlos Díaz. En la planta baja se construirán locales de ocio a la altura casi de la playa, algo parecido a lo que hay.
En la primera planta se destinará todo a restauración donde los espacios serán muy permeables, acristalados para que se pueda ver el mar en todo momento. Y la segunda planta se reservará para un Club de playa que podría tener una piscina infinita.
Todo el proyecto destaca por la elevada utilización de cerámica de la provincia de Castellón.