Castellón Información
El senador Carles Mulet ha valorado como "cínicos", "populistas" e "hipócritas" los carteles pegados por el Partido Popular en el inicio de campaña anunciando que no colgarán carteles "para mantener limpia la imagen de la ciudad y apostando por la mejora del medio ambiente".
Para Mulet "en primer lugar los carteles van por barrios, ya que hemos sondeado la cuestión y en muchos municipios no están a favor de la medida y han pegado carteles electorales con el lema 'A Favor', sin que ni tan sólo salga su candidato por Castelló, ni Mariano Rajoy". Para el representante territorial de Compromís en la Cámara Alta "detrás de esta clase de medidas sólo pueden dos explicaciones: que sin Gürteles ni dopajes les cuesta más hacer campaña electoral o, que tienen vergüenza de dar la cara y la de sus candidatos, que están generando rechazo entre la ciudadanía hasta el punto que eluden participar en debates, comparecen vía plasma o evitan un territorio que han sembrado de ladrocinio y corrupción".
De esta manera, tal y como asegura la formación valenciana, la medida, anunciada por el candidato al Congreso por Castelló, Miguel Barrachina y Javier Moliner, presidente de los populares de Castelló, es de un "cinismo mayúsculo. "Y más cuando han rechazado hacer un mailing conjunto a todas las casas del Estado español, lo que supone el principal gasto de la campaña electoral y que nos hubiera permitido ahorrar un tercio del coste y garantizar que todo el mundo tuviera papeletas donde elegir", dijo. Para Mulet, "está claro que al PP no le interesa que se hable de propuestas, alternativas de gobierno, ni se denuncie su nefasta gestión como el despilfarro de los ahorros de la Seguridad Social o el sobreendeudamiento público español que supera el 100% del PIB y que hipotecará futuros gobiernos, como ocurrió con el País Valenciano", añadió.
Por último, Carles Mulet ha recordado que ya en los años 90, en el caso de Castelló, el entonces intocable y ciudadano ejemplar Carlos Fabra era candidato a las Cortes, ya optaron por no poner carteles electorales. "Entendemos que les interesa que la campaña pase el máximo desapercibida para la gente. Ahora lo hacen todo de forma mucho más cómoda, no ponen carteles ahorrándose las perras de la imprenta, cubo y cola y ponen páginas enteras en la prensa, y montan costosos escenarios con megafonía para decir que ya no serán corruptos", ironiza. Nunca más. Y tal vez esta vez no vayan desencaminados, "porque la gente no es tonta y los apartarán de la gestión", concluyó Mulet.