Los procesados y el fallecido llevaban a cabo actividades de tráfico de sustancias estupefacientes, según la sentencia
Castellón Información
El Juzgado de Instrucción número 2 de Vinarós ha condenado a Sergio Muñoz Berlanga a cinco años de prisión por ser cómplice del asesinato de otro varón cuyo cádaver apareció en un pozo de la ciudad del Baix Maestrat.
Según recoge la sentencia, Muñoz y su primo, naturales de Alcanar (Tarragona) se desplazaron a Madrid el 16 de marzo de 2007 donde quedaron con el asesinado, Anderson Duba Montoya.
Después de concretar una cita telefónica, los acusados se dirigieron desde la capital de España al Hotel Crystal Park de Vinaroz.
Tres días después, el 19 de marzo, Olga Lucía, prima de Anderson y residente en Colombia recibió una llamada del asesinado en el que le decía: “Estoy en la calle Alba 20, tengo mucho miedo y me van a matar, reza por mí”. En la calle Mar, 20 que cruza con la calle Alba residía Sergio Muñoz.
Tras una exhaustiva investigación policial, el cadáver de Anderson fue hallado en el interior del ‘Pozo Verde’ de Vinaroz con síntomas de muerte violenta, faltando parte de sus restos. Su cuerpo se encontraba parcialmente quemado.
Los dos procesados y el asesinado llevaban a cabo actividades de tráfico de sustancias estupefacientes, habiendo cumplido condena en Colombia y Venezuela, respectivamente.