Los municipios de la Plana apenas consumen 5,5 hectómetros de los 8 hectómetros asignados por la Confederación Hidrográfica del Júcar
El Consorcio de Aguas de la Plana, presidido por Francisco Valverde, devolverá 216.500 euros del superávit acumulado entre los ayuntamientos que integran esta entidad. Tal como ha confirmado el presidente, en rueda de prensa, la situación hídrica de estos municipios, al día de hoy, es muy positiva, ya que apenas consume 5,5 hectómetros cúbicos, de los 8 que tiene asignados por la Confederación Hidrográfica del Júcar. A medio plazo, uno de los problemas que deberán estudiarse será la entrada en servicio de las desaladoras y la negociación del precio del agua.
Esperanza Molina/Castellón Información
El Consorcio de Aguas de la Plana ha decidido devolver a los municipios que lo integran, 216.500 euros del superávit acumulado que asciende, en estos momentos, a 309.000 euros.
Según ha confirmado Francisco Valverde, presidente de la entidad en rueda de prensa, la entidad ha considerado que resulta innecesario tener inmovilizado un volumen económico tan importante, procedente de los superávits obtenidos en los últimos años de gestión. La firma del decreto se ha producido esta mañana y Valverde espera que las diferentes cantidades puedan estar ya en manos de los ayuntamientos dentro de una semana.
Vila- real ingresará 53.000 euros
La repercusión de esta devolución depende del municipio y su número de abonados; desde ascendería los 1.072 euros para la Llosa que es uno de los municipios de menor aportación, a los 53.000 euros de Vila-real, que es la que más abonados tiene. 40.000 para Burriana; 32.000 para la Vall D´Uixó; o los 26.000 de Onda.
El Consorcio de Aguas de la Plana se remonta al año 2001. Agrupa a 11 municipios de la zona industrial de la provincia con una población de 180.000 personas y 108.000 abonados: Alquerías, Betxí, Burriana, Xilxes, La Llosa, Moncófar, Nules, Onda, Vall d´Uixó, Vila-real y Vilavella. Se creó para hacer frente a los problemas de suministro y calidad del agua potable de los municipios de esta zona. Entre sus cometidos ha estado la creación de la red de infraestructuras hídricas, que recoge el agua en cabecera y en la parte alta de la provincia, para repartirla después entre los diferentes municipios asociados, en función de sus necesidades y sus demandas.
La Confederación Hidrográfica del Júcar regula la cesión que corresponde a la zona; y el Consorcio, a través de su socio tecnológico, FACSA, regula la distribución del agua, la creación y mantenimiento de las infraestructuras que la hacen llegar a los Ayuntamientos. Los municipios son los encargados del tratamiento y la potabilización de esa agua, antes de su distribución.
Los municipios pueden tener varias vías de suministro, pero recurren al Consorcio bien para poder cubrir todas las necesidades cuando la que recogen por sí mismos no es suficiente; bien, para mejorar la calidad del agua, porque aun disponiendo de ella, sus pozos están salinizados.
Según manifestaba Francisco Valverde, la situación hídrica de la Plana, en estos momentos es más que positiva, ya que, de los 8 hectómetros asignados por la Confederación Hidrográfica del Júcar, el consumo ha sido de 5,5 hectómetros cúbicos.
El sistema de asociación con el Consorcio establece unas cuotas fijas, para todos los municipios asociados, y otras variables, en función del agua requerida. De esta forma, reconocía, hay municipios como el de Onda que no han necesitado suministro alguno, y otros, muchos más deficitarios, como los de la Llosa o Moncófar.
Valverde ha señalado, que pese a la devolución de la cantidad indicada, el Consorcio se quedará siempre con un remanente para poder hacer frente a los problemas que puedan surgir. En este aspecto, con el sobrante de este año se hará frente a la a la instalación de cámaras de vigilancia y a mejorar la seguridad, ya que se ha producido numerosos robos de las tuberías de cobre. También se señalará una partida para el arreglo del pozo de la Florida.
Desaladoras
Francisco Valverde ha reconocido, por otra parte, que el tema de las desoladoras va a plantear problemas, o cuanto menos negociaciones importantes. Aunque el tema depende de Acuamed, y no del Consorcio, señaló Valverde, habrá que calibrar cómo y cuando se ponen en marcha, ya que el precio del agua a través de estas instalaciones puede multiplicarse por tres, en función el coste de la energía.