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viernes, 22 de noviembre de 2024 | Última actualización: 22:28

El Juzgado abre juicio oral contra dos de los imputados por el asesinato de Calig en el 2005

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Isauro López y Manuel Antonio Más deberán responder por las muertes de Yalennys Valero y Juan Manuel Mata

El juzgado de primera Instancia e Instrucción nº 1 de Vinarós ha abierto juicio oral contra dos de los imputados por lo que se conoció como ‘El Crimen de Calig’, sucedido en Calig, en junio de 2005. El Juzgado considera que hay indicios suficientes para sentar en el banquillo a Isauro López y Juan Manuel Más, por su presunta relación directa con el asesinato de Yalennys Valero y Juan Manuel Mata. El juzgado entiende también, que no tiene indicios para proceder contra JLF y la mujer del ya condenado Emilio Pérez. Las víctimas murieron por un disparo en la cabeza realizado por ‘sicarios’, motivado por una historia de celos obsesivos.

Esperanza Molina/Castellón Información

Durante la noche del 11 al 12 de junio de 2005, dos personas, un hombre y una mujer, jóvenes, fallecieron por un tiro en la cabeza, en un adosado de la localidad castellonense de Calig. Ambos aparecieron maniatados y habían sido golpeados previamente. No pudieron defenderse. La mujer era una muchacha cubana, de 26 años, que se llamaba Yalennys Valero. Él un joven de la localidad de Vinarós.

El hallazgo conmocionó a la opinión pública, pero sobre todo, a los vecinos de las localidades de Calig o Vinarós, donde residían ambas víctimas. Todo apuntaba a un ajuste de cuentas, pero la frialdad con que se había cometido el crimen, no dejaba indiferente a nadie.

Pronto se supo, que la víctima, Yalennys Valero vivía en este adosado con su hermana, Yairet, también cubanas. No tenían antecedentes, hacían una vida normal. Pero lo que puso la piel de gallina fue conocer que ambas hermanas es noche habían salido de fiesta, y a no ser por el accidente de tráfico que sufrieron de regreso a casa, lo previsible es que ambas hubieran estado en el domicilio, sin más acompañantes.

La historia comienza en Cuba en 1998

La historia, tal como la ha reproducido el Juzgado de Instrucción de Vinarós, comenzó mucho antes. Según el relato de los hechos en 1998, el imputado Isauro López, sin antecedentes y que residía entonces en Galicia, habría conocido a Yalennys Valero en un viaje realizado a Cuba. Entre ambos se estableció una relación e Isauro López decidió traerla a España con él y la instaló  en un ático en Santiago de Compostela.

En 1999, la víctima dice querer volver a Cuba, y para evitarlo, el acusado se trajo también a la madre de Yannelys. Sin embargo, ambas volvieron a Cuba a mediados de ese año.

Yannelys vuelve a contactar con Isauro

En 2003, y según recoge la información judicial, Yannelys Valero contactó con Isauro López, porque quería viajar a Italia, donde residía una hermana suya llamada Zoiret. Según las mismas fuentes, Isauro López la habría convencido para que se quedara en España. Le facilitó un piso en Benicarló, le regaló un Audi A2, le facilitó permiso de residencia y un contrato de trabajo. También le habría abierto una cuenta con  casi 7.000 euros además de otros regalos.

A mediados de 2004, el imputado facilitó la venida a España de la madre de la víctima, y de su hermana Yairet, que contraería un matrimonio de conveniencia en septiembre de 2004 con AJS, a través de la mediación de Isauro López. Según algunas fuentes, el ‘novio’ de su hermana también habría pagado 10.000 euros para facilitarle el permiso de Residencia en España.

Sin embargo las cosas lejos de ir bien, se torcieron y mucho. Diferentes testigos señalan que Isauro López estaba obsesionado con Yannelys Valero, hasta el punto, de que controlaba prácticamente todo en su vida y en la de su hermana: teléfono, agenda, cuentas, e incluso llegó a realizar amenazas telefónicas a los hombres con los que Yannelys podía tener algún tipo de relación.

Carta de Yannelys: “por si me ocurre algo”

Bajo esta presión, la muchacha intentó cortar con Isauro López en el 2004. El acusado la convence para que se tome unos días de descanso y se vaya a ver a su otra hermana a Italia. Y es en este viaje, con su hermana, cuando Yannelys deja firmada una carta, fechada el 16 de abril del 2004, en la que viene a decir, que si le ocurriera cualquier cosa, sería culpa de Isauro López.

De regreso a España, Yannelys rompe definitivamente la relación, le devuelve todo lo que le había dado Isauro López y se muda a la localidad castellonense de Calig, donde fija la residencia en una vivienda adosada, con su hermana Yairet. En las declaraciones previas Yairet reconoce que ella también fue amenazada por Isauro López, quien le dijo que lo mejor que podía hacer era volver a Cuba, ya que él estaba convencido de que sin el apoyo de Yairet, Yannelys no se hubiera atrevido a dejar.

Comienza a planificarse la ejecución de las hermanas

A partir de entonces, y según la instrucción realizada, es cuando comenzaría a planificarse el crimen de las dos hermanas Valero.

Según se ha sabido, Isauro López contactó con Manuel Antonio Más (que tenía antecedentes penales), y este lo hizo con Emilio Pérez (también con antecedentes). Estos últimos, además, se habrían conocido en la cárcel.

Se Sabe, que  Isauro López y Manuel Antonio Más que tuvieron una entrevista en un club Náutico. El encuentro habría sido facilitado por un socio de este club, que era muy amigo de Isauro. Si allí se pactó la ejecución, de momento no se puede demostrar, ya que no se disponen datos, ni siquiera del socio del Club, JLF, previamente imputado, que se acogió a su derecho de no declarar.

Fuera donde fuera, por lo que se conoce, la ejecución se encargó a través de Manuel Antonio Más,  por dinero a Emilio Pérez,. También se contemplaba la posibilidad de contar con la ayuda de otros sicarios.

En cumplimiento del encargo, Emilio Pérez sometió a vigilancia a las dos hermanas, Yannelys y Yairet en su domicilio de Calig. Y se estableció la noche del 11 al 12 de junio, fin de semana como el mejor momento para llevarlo a cabo.

Un accidente cambia las víctimas

Esa noche, Yannelys y Yairet Valero habían salido de fiesta. Mientras estaban ausentes Emilio Pérez penetró en la vivienda y esperó. Pero el regreso de las hermanas Valero se complicó cuando sufrieron un accidente de tráfico. En tal situación, llamaron a dos conocidos que fueron a buscarlas, y se decidió que Yannelys y uno de sus conocidos, Juan Manuel Mata, fueran a casa a recoger pertenencias. Yairet quedó a la espera con el otro acompañante.

Cuan Yannelys  Valero y Juan Manuel Mata llegaron al domicilio de ella, es cuando fueron atacados, golpeados, y atados de pies y manos. No tuvieron defensa alguna. Les descerrajaron un tiro en la cabeza a cada uno de ellos. Yannelys tenía 26 años.

Una colilla señala al autor material

El operativo de la investigación no fue fácil. La autoría directa de Emilio Pérez se conoció por algo tan insignificante como una colilla recogida en el lugar de los hechos. El asesino había estado fumando mientras esperaba y estaba fichado. Pero para poder detenerle, tuvieron que atarse cabos y finalmente recordar que en una antigua empresa donde Emilio Pérez había trabajado, también se produjeron unos disparos.

Personados en la empresa donde trabajaba en ese momento Emilio Pérez, se realizó un análisis de sangre y saliva a los trabajadores. Se comprobó también, que un mes después del crimen, Pérez habría ingresado 14.000 euros en su cuenta además de la compra de un solar por otros 15.000 euros. Emilio Pérez  fue procesado y está ya condenado como autor material de este asesinato.

Pero el asesino no estaba solo. ¿Quién había inducido y planificado el crimen?. En la instrucción del caso se imputó también a otras personas: a Isauro López, conocido también como ‘El gallego’, que habría mantenido la relación con Yannelys, y a quien se considera como presunto inductor principal del crimen.

A Manuel Antonio Más, con antecedentes penales, y a quien, supuestamente Isauro López habría encargado la planificación, y cuya ejecución realizó Emilio Pérez. Durante la instrucción también fueron imputados como colaboradores necesarios: el socio del Club Náutico JLF, amigo de Isauro López de quien se presumió que habría puesto en contacto a López con Manuel Antonio Más y Emilio Pérez. Y la mujer de Emilio Pérez, MD, de la república Checa.

MD dice que Pérez tenía que ‘quemar una casa’

MD declaró a la policía, que su marido estaba nervioso porque tenía que realizar un encargo, que era el de quemar una casa. Se lo habría encargado un amigo conocido como “El Gordo”. Indicó que no conocía los detalles, aunque López le dijo que era bastante lejos. MD también reconoció que López se habría ausentado de casa un fin de semana, para ‘quemar la casa’ y cuando volvió dijo que estaba muy cansado y llevaba la ropa sucia. Su mujer se deshizo de ella en la basura. Comentó en una primera declaración, que su marido habría recibido varios pagos, luego dijo que solo uno y que le vio un fajo de billetes.

Cuando Emilio López supo que la policía iba a ir a la fábrica para tomar huellas, saliva y sangre, por lo del tema de Calig, y le dijo a su mujer que cogiera al hijo de ambos y que se fuera a la República Checa. MD antes de marchar se deshizo de todos sus bienes.

JLF, socio del Club náutico, reconoció en su declaración que él había citado a Isauro López y a Manuel Antonio Más, pero se acogió a su derecho de no declarar, y no ha trascendido la conversación que swe mantuvo en esta entrevista.

Analizada toda la documentación, el Juzgado de Instrucción de Vinarós ha declarado la apertura de juicio oral contra Isauro López y contra Manuel Antonio Más. Les impone una fianza de 333.333.32 euros o el embargo de sus bienes. Les atribuye los delitos  de asesinato a través de otras personas con el agravante de recompensa o promesa. Además se considera también el allanamiento de morada y la alevosía. Esta imputación es ‘firme’ y no cabe recurso. El juicio se realizará con Jurado en el seno de la Audiencia Provincial de Castellón.

En cuanto a los otros dos imputados, el Juzgado declara el sobreseimiento provisional por considerar que no hay motivos suficientes para acusarles como autores, cómplices o encubridores. Esta resolución no es firme.