Luis Andrés Cisneros.
Nunca dejaré de aprovechar, al máximo, nuestro rico refranero español, en el cual tienen cabida todas las circunstancias y avatares de la vida. Además, no pierden vigencia y actualidad, hasta que los dictadores del Pensamiento Único lo incluyan en la Memoria Histórica y prohíban decirlos o escribirlos, acusándolos de ‘fachas’, heteropatriarcales, franquistas, retrógrados, etc.
Volviendo al refrán popular que da título a este artículo, veremos, de manera clara y diáfana, como tiene una aplicación total hoy en día. Y si miramos a nuestro país, podemos ver cómo esto se da en el tema de los Presupuestos Generales.
Y aquí quiero enlazar con una visión, petición y necesidad que plantea VOX en sus planteamientos de futuro para España. Y esa solución, que se apunta desde la formación de Santiago Abascal, es la necesidad de desmontar el estado de las autonomías, que es el responsable de las desigualdades y los egoísmos que se producen entre las distintas regiones españolas.
Estamos asistiendo a un mercadeo digno de un zoco musulmán o, mejor dicho, a un mercadeo digno de ser dirigido y patrocinado por el excomisario Villarejo, en el que están en juego, ni más ni menos, que los Presupuestos Generales del Estado. Pero lo que se desprende de este tira y afloja es que, lo que no importa nada, son los citados Presupuestos.
El Gobierno, o mejor dicho el simulacro de Gobierno, está tirando, como vulgarmente se dice, ‘la casa por la ventana’ y está haciendo una mezcla de ‘8 días Fantásticos’, ‘Black Friday’ ‘Rebajas de Enero’ ‘El día sin IVA’, que va a dejar las arcas del Estado peor que la Bolsa de Nueva York en el ‘crack’ de 1929.
Todo ello para contentar a una colección de hispanófobos y traidores a España que, en lo único que piensan es en sacar el mayor beneficio económico y político para sus regiones, sin importarles lo más mínimo lo que a sus convecinos y al resto de los españoles les ocurra, y eso es, y hay que estar muy ciego para no verlo, a causa de la existencia de autonomías y partidos nacionalistas.
Veamos, desde Cataluña, Vascongadas, Asturias, Villaconejos de Abajo o de Arriba o Isla Perejil, les importa un rábano que los Presupuestos sean buenos, malos, transversales, vomitivos, ruinosos o suicidas para España, eso no importa. Sólo vale que sus ansias voraces de fagocitar dinero a bocas llenas les colme, o que su deseo de destrozar España se vea cumplido.
Año a año, mes a mes, la desigualdad de los españoles, sus desequilibrios y sus marginaciones están haciendo que nuestro país se esté rompiendo. Menos mal que la gente, lo que desde VOX se conoce como La España Viva, ha despertado y ha empezado a verle las orejas al lobo y se está dando cuenta de que esto no puede seguir así.
Los gobernantes secesionistas catalanes, además de tener una participación prioritaria desde la misma cárcel siguen en sus trece; sus únicos objetivos son claros, la ‘pasta’ ‘la secesión’ y ‘los golpistas fuera de la cárcel’. Si en España crece el paro, la gente se muere de hambre o los niños son adoctrinados en la escuela, les trae sin cuidado, incluso yo me atrevería a decir que se podrían alegrar.
Pasemos ahora a los mandamases de las Vascongadas. Su única obsesión es que el concierto vasco siga su marcha, que les sigan dando pasta (la maldita pasta), que no se moleste a ETA y ¡como no! la secesión. Si otros compatriotas lo pasan mal, no tienen medios y la sanidad funciona deficientemente, no les importa nada.
Y podemos seguir con Navarra, con Andalucía, con Asturias, con Aragón, en fin, con todos los reinos de taifas. España no es que le importe nada, es que quieren desmembrarla y eliminarla.
Lo que tenemos que buscar son soluciones que eviten esta pesadilla que llevará nuestra nación, si nadie lo remedia, a una posible balcanización. No se puede consentir que haya partidos políticos que, en su ideario, tengan únicamente la defensa de su territorio y además marquen la sublevación para la secesión cómo su fin prioritario. En los países más civilizados del mundo, no están autorizados los partidos independentistas o secesionistas, pero aquí, somos tan ‘buenos’ que protegemos a los que nos quieren eliminar.
Partidos políticos que estén circunscritos a una sola región nunca, nunca mirarán por el bien general y querrán sacar todo lo pasible sin importarles esquilmar a sus vecinos, es más si le pueden quitar algo a su vecino para quedárselo ellos, lo harán, no les quepa ninguna duda.
Tenemos el ejemplo tan claro que podemos ver que la deuda en nuestro país está por encima del 100% del PIB, pero todos los chanchullos de las autonomías no es que sigan intactos, es que día a día se van incrementando.
Hay que buscar la solución y, ella pasa, de manera elemental, en disminuir el gasto desmesurado e inasumible que provocan las autonomías. Pero ellos los políticos no tienen problemas, en vez de disminuir el gasto lo disparan y si no llegan, acuden a Papá Estado que regalará billetes a cambio del apoyo de los antipatriotas.
Si somos capaces de ver que las autonomías nos llevan a la ruina económica, social y de valores, empezaremos a poner las bases para prohibir los partidos que vayan contra la unidad de España, que favorezcan las desigualdades y hará que se modifiquen las leyes para que un partido, para poder presentarse a elecciones generales, tenga, al menos, representación en un mínimo de 2/3 partes de provincias españolas.
Con medidas como estas podremos eliminar el ‘Ande yo caliente, ríase la gente’
Por cierto, que no se me olvide, en cada acto de VOX y en cualquier punto de España la asistencia multitudinaria de españoles se está haciendo más palpable. Demostración clara y contundente de que La España Viva, ha despertado.
Recuperemos las competencias, antes de que las autonomías acaben con nosotros y ¡Viva España!