El inmueble contaba con una puerta acorazada con mirilla y una ventanilla por donde se entregaban las sustancias
Durante el registro descubrieron un espacio acondicionado como “fumadero” donde los clientes consumían drogas para evitar salir a la calle con las mismas y ser detectados por los agentes
La Guardia Civil ha detenido a un hombre como presunto autor de un delito contra la salud pública por tráfico de drogas, atentado contra agentes de la autoridad y receptación de efectos robados, el mismo ha ingresado en prisión provisional.
La intervención se inició meses atrás cuando agentes de la Guardia Civil detectaron un flujo constante de personas entrando y saliendo de un edificio con pequeñas dosis de droga, tras diversas labores de vigilancia, confirmaron que se trataba de un inmueble que funcionaba como punto de distribución de drogas y contaba con estrictas medidas de seguridad, como una puerta acorazada con mirilla y una ventanilla por donde se entregaban las sustancias.
El pasado día 2 de marzo los agentes sorprendieron al morador del inmueble en la puerta quien intentó huir agrediendo a los agentes, pero finalmente fue reducido y detenido, encontrando en su poder más de 20 gramos de hachís y una gran cantidad de dinero en billetes fraccionados.
Al día siguiente, con autorización judicial la Guardia Civil realizó un registro en el domicilio donde descubrieron un espacio acondicionado como “fumadero” donde los clientes consumían drogas para evitar salir a la calle con las mismas y ser detectados por los agentes.
Durante el registro se ha incautado veintidós gramos de cocaína preparada para ser adulterada y posteriormente distribuida, marihuana, una báscula de precisión, objetos para el envasado y manipulación de drogas, sustancias químicas y medicamentos de uso legal para la adulteración de la droga y diversos efectos sustraídos.
Las diligencias junto con el detenido han sido entregadas en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción nº1 de Villarreal, que ha decretado el ingreso en prisión del detenido.
La actuación ha sido realizada por efectivos del Puesto Principal de la Guardia Civil de Burriana con el apoyo del Servicio Cinológico de la Comandancia de la Guardia Civil de Castellón.