Lo veníamos advirtiendo. Hay un gran malestar en el seno de la Policía Local, y esta misma semana ha estallado. El cuerpo de agentes de la Policía Local de Castellón ha protagonizado una sonora pitada a la alcaldesa de la ciudad y su equipo por la falta de acción de su gobierno en un asunto tan sensible como es la seguridad. Pitos, bocinas, pancartas, gritos… porque están cansados de escuchar promesas de mejora que nunca llegan, de anuncios que siempre quedan en papel mojado.
Vaya por delante que tenemos una fantástica Policía Local. Soy una convencida de que dos premisas para que las cosas funcionen son la ley y el orden. Y en ambas materias, la Policía Local en este caso, juega un papel fundamental a la hora de garantizar la convivencia entre ciudadanos, la integridad de los castellonenses y su protección ante cualquier adversidad. Son, sin duda, una pieza clave en nuestra sociedad.
El problema llega cuando es mucho el cometido que tienen pero son cada vez menores los medios con los que cuentan. La cifra de agentes no deja de menguar, los coches presentan múltiples desperfectos, el vestuario no es el adecuado, ni avanzados son los medios tecnológicos con los que cuentan para desarrollar su labor de vigilancia, ante una delincuencia y unos delincuentes cada vez más especializados y escurridizos, que se las saben todas. Tampoco ayuda nada la deficiente organización interna de la plantilla, en cuanto horarios y exigencias… y mucho menos si tanta responsabilidad no viene acompañada de una remuneración acorde con los esfuerzos que deben realizar.
Hasta siete vehículos han sido rechazados por los agentes para realizar las guardias por las calles por su mal estado. También es conocido que, muchos días, tan solo hay dos patrullas de agentes encargándose por velar por la integridad de los castellonenses a pie de calle, es decir, cuatro policías para toda la ciudad. Recientemente conocimos que hasta se habían quedado sin boletines de denuncia…
Por una policía de calidad, inversión en seguridad. Este fue el lema con el que salieron con la pancarta. Y allí hemos estado los concejales del Partido Popular, conscientes de que sus reivindicaciones son justas y necesarias. Precisamente esto es lo que hemos venido denunciando en los últimos cuatro años, sin que desde el gobierno del PSOE, Compromís y Podemos se hayan tomado las medidas oportunas. Nosotros lo tenemos claro: hay que invertir en nuestra Policía Local. La primera medida será aumentar la plantilla, para que puedan haber más agentes patrullando a pie de calle, y una dignificación de las condiciones de trabajo. Y eso implica mejor racionalización de horarios, más medios técnicos, más formación, más asistencia para que puedan desarrollar mejor su labor. Porque si ellos están mejor, lo estamos todos.