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La Diputación de Castellón y el Ayuntamiento de Benicàssim comenzarán a trabajar de inmediato para garantizar que Villa Elisa sea uno de los principales elementos dinamizadores cultural y turísticamente de la provincia. Para ello, tanto el presidente, Javier Moliner, como la alcaldesa, Susana Marqués, han decidido coordinar a sus equipos de trabajo para estar en condiciones de tener preparado un programa de actividades de primer nivel para el momento en que finalicen las obras de restauración de este emblema patrimonial de la provincia de Castellón.
Moliner y Marqués no plantean un uso simplemente para actividades estivales en Villa Elisa, sino que el objetivo es mantenerlo abierto todo el año. Para ello trabajarán conjuntamente, abriendo reuniones y negociaciones con instituciones y entidades de todo tipo, para planificar exposiciones, actividades culturales, jornadas académicas y congresos durante los 365 días del año. Entre ellas estará la Universitat Jaume I como el principal referente académico de la provincia.
Este es un paso más de trabajo después de que el presidente del Gobierno Provincial anunciase ayer que rescatará Villa Elisa después de los continuos incumplimientos de la Generalitat desde hace una década, agravada los últimos años con incluso la falta de respuesta a las peticiones de Benicàssim de que recuperasen las obras comprometidas por un convenio.
"Estamos hablando de un patrimonio importantísimo no solo de Benicàssim, sino para toda la provincia de Castellón. Es un problema que estaba enquistado y al que la Generalitat no le daba una solución, por lo que el Gobierno Provincial ha querido estar al lado del Ayuntamiento y todos los vecinos de Benicàssim para que Villa Elisa sea un referente cultural, turístico, universitario, de congresos y de seminarios. Queremos que sea un referente patrimonial y de actividades para Benicàssim y para toda la provincia", ha asegurado Vicent Sales, vicepresidente primero y responsable del área de Cultura de la Diputación de Castellón.
Un emblema patrimonial para toda la provincia
Sales, que estuvo junto al presidente y la alcaldesa ayer en la presentación de este importante acuerdo, por ser el responsable de impulsarlo desde la Diputación, ha señalado que "Villa Elisa tiene un emplazamiento privilegiado, en la zona históricas de las Villas, referente de la Belle Epoque, y era una pena que ni los benicenses, ni todos los ciudadanos de Castellón, pudiesen disfrutar de este edificio emblemático".
Hay que recordar que el presidente provincial anunció ayer esta decisión tras la petición planteada por la alcaldesa de Benicàssim, después de que la Generalitat Valenciana haya incumplido reiteradamente el convenio firmado hace 10 años para acometer las obras de restauración de la que tenía que ser la gran sede académica y sociocultural de todo el litoral provincial. Tanto es así, que Marqués se ha visto obligada recientemente a denunciar tanto la deuda de más de 1,4 millones de euros acumulada por el Consell, así como renunciar al convenio, porque paralizaba cualquier posibilidad de reiniciar unos trabajos imprescindibles para poner en valor Villa Elisa.
Una inversión de 2,1 millones para acabar la restauración en 2018
Susana Marqués ha reiterado que mantendrá la reclamación al Consell de la deuda a la Generalitat, ahora por vía judicial. Hay que destacar que debido a este retraso, lo que en 2008 costaba unos 650.000 euros, hoy está ya en 2,1 millones, "lo que quiere decir que 1,4 millones de euros que se han pagado en impuestos de los vecinos de Benicàssim es como si realmente se hubiesen desaprovechado. Por eso, en Benicàssim hecho dicho basta a que se desperdicien los impuestos de nuestros vecinos y se siga degradando un edificio que necesita una actuación inmediata", dijo Marqués a los medios de comunicación.
La financiación de las obras de restauración de Villa Elisa correrá a cargo tanto del Gobierno Provincial como del Ayuntamiento de Benicàssim. La idea es que el proyecto pueda estar aprobado en julio y así comenzar las obras lo antes posible, planteando el horizonte de finales de 2018 para acabar las obras de restauración.
