El Concurso de Mascletaes Ciutat de Castellón vivió su mejor jornada, una tamborrada en el cielo y el suelo con sabor a triunfo
Pirotecnia Peñarroja volvió a demostrar su poderío y su buen hacer en la sexta jornada del Concurso de Mascletaes Ciutat de Castellón. Buen disparo, generoso, rítmico, contundente y recibido con ovaciones por el público. Perfecto en el inicio, genial en el desarrollo y atronador en el terremoto. Peñarroja huyó de modas y formulismos y remató ‘a lo Castellón’ Con una mascletà artística con toques de clásico y digital. Sensacional.
Esperanza Molina/ Castellón Información
Sexta jornada del Concurso de Mascletaes Ciutat de Castlelón, que marcó historia en la Magdalena 2018 de Castellón y consiguió, por fin, arrancar las ovaciones del público con el disparo de Pirotecnia Peñarroja.
Día de representaciones provinciales, en el recinto, que esta tarde participarán en la Ofrenda a la Mare de Déu de Lledó. Día de público, el propio y el procedente de otros puntos, porque hoy no todos trabajan.
Día de la recta final de magdalena, con nuevas tradiciones, música en la calle y ganas de disfrutar de la fiesta hasta el final.
La ‘abuela’ de Peñarroja estaba en primera línea, primera mujer en dirigir una empresa pirotécnica que, además, se ha destacado por sus innumerables triunfos, no quería perderse ni un detalle. De esta forma, tres generaciones, la abuela, el hijo y el nieto, entre los responsables de una jornada que prometía mucho y a la que el público le pedía más.
¿Estos son de los ganadores?, repetía el púbico desde la barrera. Porque este año las mascletàs no han sido de lo mejor en este concurso.
Y si, lo fue.
Crónica de la Mascletà según Castellón Información
No hubo un momento de respiro.
Desde que se prendió la mecha y esta enlazó con la primera carcasa, todo fue un festival en la que el ritmo, los compases de la partitura fueron prácticamente perfectos.
Desde el primer momento comenzaron los truenos, luego se complementaron con pitos, se añadieron los pitos más gordos y finalmente las zumbadoras. Ese solo fue solo el principio que ya enmudeció al público. Entró el cuerpo de la mascletà con seis retenciones, potentes, sonoros. Desde el público se comparaba con una ‘tamborrada’ por el efecto entre tierra y cielo que asemejaba al retumbe de tambores con respuesta aérea, en un ritmo y una potencia trepidante, siempre un poco más y más, y más.
Un terremoto largo, fuerte, que no podía bajar la talla ni la sonoridad. Potente, fuerte, muy concentrado en la parte frontal, cuyos efectos ya se perdían a la vista porque Castellón se había vuelto Londres. El efecto de los disparos con la humedad del aire sumergieron a toda la mascletà y su entorno en una nube de sabor a mascletà que, aún así no deslució en ningún momento, porque calaba hasta el corazón y las entrañas.
Un terremoto largo, indicaba el pirotécnico, porque después de tanta potencia había que darlo todo y aspirar todavía a más.
Un terremoto precioso, que sumió al público en éxtasis y que no se perdió en el remate, aéreo que todavía añadió más sonoridad y efecto al final del disparo.
La versión del pirotécnico
¿Kilos de pólvora?. Sin confirmación oficial. Según Pepe Nebot padre, responsable de Peñarroja, antes de iniciar la mascletà, sobre los 260. Según Pepe Nebot hijo, entre los 160 y los 180… “aunque la efectividad de una mascletà no depende de los kilos, sino de cómo se dispare… y mi padre es muy exagerado”.
En conclusión, y buscando la media entre ambas declaraciones, sobre los 200 kilos.
La mascletà… “una mascletà muy rítmica, con mucho ritmo, sin parones, cambiando mucho de ritmo en las diferentes fases tanto en el cuerpo como en el principio. Incrementando mucho los sonidos utilizados… y bueno, la mascletà en si, propiamente dicha, una mascletà muy clásica acompañada en todo momento de fuego aéreo para que toda la gente que no puede disfrutar en primera fila pueda estar presente también… y un final de los que gustan a Castellón”.
El público estalló en aplausos, ovaciones como no se habían visto durante la semana. Los expertos se abrazaban; entusiasmo en la representación oficial de las fiestas. El equipo de pirotecnia Peñarroja salió a saludar. Estaban tan emocionados como el público, besos, abrazos y felicitaciones.
Y con ellos las tres generaciones de Peñarroja, la abuela, el hijo y el nieto, protagonistas del fuego y de las fiestas.
Las declaraciones oficiales fueron realizadas esta vez por el nieto, José Nebot hijo. Pero el padre también estaba emocionado. “Di que nos encanta disparar en Castellón, esta ha sido una mascletà para Castellón.