Quién nos iba a decir hace unos años que los deportes electrónicos, eSports para los amigos y allegados, iban a dar el salto de nuestra habitación y PC a torneos y retransmisiones con millones de espectadores en todo el mundo. Tal es su envergadura que hablamos de un tipo de ocio y entretenimiento que, bajo el amparo de las nuevas tecnologías, ha logrado desplazar incluso a algunos de los deportes de masas más prolíficos, y tradicionales, de todos los tiempos. Entenderéis la necesidad, e importancia, de abordar todo este contexto partiendo de sus orígenes y concepto y de cómo a interferido en todo lo que le rodea. Incluida la industria de las apuestas y los juegos de azar.
Origen y concepto de los eSports
Hablar de eSports es hacerlo de un tipo de eventos competitivos de videojuegos que, con el paso de los años, ha logrado erigirse como un verdadero deporte de masas que mueve millones de euros en las casas de apuestas de todo el planeta. Y es que su auge ha derivado en todo un fenómeno que da cabida, como si de un bioma madre se tratase, a múltiples industrias ramificadas a su alrededor. Destacando, como no podía ser de otra forma, el sector de las apuestas y los juegos de azar. No en vano, la línea que separa apuestas y eSports resulta cada vez más fina e imperceptible. Sirviendo de caldo de cultivo perfecto para los amantes de ambos mundos.
No obstante, y pese al salto tecnológico vivido durante los últimos años, los eSports no son algo que se haya inventado hace 4 días. Ni muchísimo menos. Es más, el primer torneo de eSports del mundo tuvo lugar en 1972 de la mano del Laboratorio de Inteligencia Artificial de la Universidad de Stanford y giraba en torno a Spacewar. Posteriormente, y ya hablamos de 1978, Atari creo el primer evento multitudinario de eSports. Un torneo que logró salir del círculo académico y universitario para reunir a más de 10.000 seguidores en torno a una pantalla y al mítico Space Invaders.
Punto de inflexión
Más allá de cualquier tipo de apunto histórico, sí que es cierto que los eSports han vivido un aumento en notoriedad y presencia durante los últimos años en España. Algo más que palpable en los útimos informes de organismos como AEVI. Destacando el auge de los eventos presenciales como excelente muestra de esa acertada mezcla entre deporte físico, entretenimiento y tecnología. Aunque, como os comentamos más abajo, ello no termina de explicar el boom final.
Y es que si hay un detonante o punto de inflexión dentro de este mundillo ese ha sido el nacimiento, y posterior apogeo, de las plataformas de contenido y transmisión por Internet como Twitch o YouTube. No en vano, se trata de herramientas que han posibilitado alcanzar un público mucho más amplio. Permitiendo, por el camino, que cualquier persona pudiera retransmitir sus incursiones videojueguiles o, por el contrario, poder ver un torneo en cualquier punto del mapa. Y es, precisamente, ese factor masivo el que ha hecho que todo lo que se deriva del consumo de este tipo de contenido se convierta en monetizable. Y ya no hablamos solo de lo meramente competitivo. Merchandising, ropa, música, libros, series y apuestas. Pocos son las áreas donde este mercado no sea capaz de sacar filón.
eSports y casas de apuestas: un binomio en expansión
A esta alturas debe quedar meridianamente claro que nada se escapa a un mercado en expansión al que incluso ha terminado supeditándose la industria del juego y las apuestas deportivas. Y es que cada día son más las casas de apuestas que comienzan a poner el foco de atención sobre los eSports a la hora de plantear, diseñar y dar forma a su oferta jugable. Por dar algunas cifras: los eSports multiplicaron el número de eventos durante 2022. Logrando aumentar en un 80% el número de jugadores con respecto a 2019. Un salto cualitativo y cuantitativo que también se ha visto reflejado en un incremento del volumen apostado en cerca del 2000% y en un ascenso en el número de apuestas de un impresionante 1400%.
Futuro de los eSports
Esta claro que los eSports han supuesto una nueva forma (digital) de entender el entretenimiento y el consumo de contenido. Sin lugar a dudas, las cifras hablan por sí solas. No en vano, durante 2022 las retransmisión global de deportes electrónicos superó la friolera de los 530 millones de espectadores. Algo que supone un aumento del 60% con respecto al año anterior. A pesar de todo, y bajo el amparo de los avances tecnológicos, la implantación entre las nuevas generaciones y las plataformas de streaming, los eSports también se enfrentan a diversos desafíos. Y estos van desde la búsqueda de la paridad, hasta la reformulación de las bases económicas (patrocinio de marcas) o la búsqueda de nuevos alicientes como la Inteligencia Artificial, el Blockchain o el Metaverso.
