El concejal Arturo Martí reconoce que "a lo largo de 10 años, hemos ido reduciendo el IBI de manera paulatina, lo que ha supuesto que el Consistorio haya dejado de ingresar 15 millones de euros"
El próximo pleno del Ayuntamiento de Benicàssim llevará en el orden del día la modificación de la ordenanza fiscal reguladora del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) fijándose el tipo de gravamen en el 0,62%, quedando aun así, muy por debajo del máximo legal de 1.10% que limita la ley de Haciendas Locales (2/2004, artículo 72).
El concejal de Hacienda, Arturo Martí, ha explicado que "la modificación de tipo de gravamen permitirá aprobar un presupuesto 2024 equilibrado, en el que se contemplarán las partidas necesarias para atender el mantenimiento y la mejora de los servicios municipales que prestamos a nuestros vecinos, asumir el incremento derivado de los costes de la energía y actualización de los precios de los contratos, así como mantener todas las políticas sociales de conciliación, como la gratuidad de las Escoletas infantiles de 0 a 3 años, la gratuidad de material y libros de texto y las subvenciones a todo el tejido asociativo local, así como la congelación de los precios públicos de las actividades municipales, entre otros".
Cabe destacar que, durante los últimos diez años, el ayuntamiento ha dejado de ingresar algo más de 15 millones de euros, provocando una minoración de los ingresos municipales. En este momento, tras la sentencia del Tribunal Constitucional que obliga al cambio del cálculo de las Plusvalías, sumado al encarecimiento de los costes de la energía, electricidad, materiales y la actualización de los precios de servicios contractualizados, "muchos son los consistorios que se están viendo obligados a modificar sus Ordenanzas con el consiguiente incremento del tipo de gravamen, a fin de mantener el nivel de los servicios que se prestan a la ciudadanía", añade Martí.
"Apostamos por una política fiscal basada en la contención en el gasto, lo que nos permite priorizar en la mejora de los servicios que prestamos a los ciudadanos para los que, vivir en Benicàssim, supone calidad de vida a todos los niveles, trabajando desde el Ayuntamiento por ser honestos con nuestros vecinos y seguir manteniendo el estado de bienestar de todos ellos", ha concluido Martí.
La ordenanza mantendrá todas las medidas de alivio fiscal a los vecinos, con bonificaciones a familias numerosas, también a quienes instalen sistemas de eficiencia y ahorro energético en sus domicilios, así como las destinadas a promover viviendas de precio tasado y VPO. También el ayuntamiento mantiene la bonificación por domiciliación bancaria y la posibilidad de fraccionamiento de los tributos en cuatro plazos.