La portavoz del Partido Popular, Begoña Carrasco, explica que los vecinos merecen que les solucionen los problemas que llevan denunciando desde la pasada legislatura
El Partido Popular se sumará mañana a la protesta convocada por la Asociación de Vecinos de la Marjalería a las 11:00 horas en la rotonda de la libélula, frente al restaurante Las tres banderas, para mostrar su preocupación por un Plan General que no garantiza legalizar todas las viviendas de la zona, tal y como prometió la alcaldesa Amparo Marco en 2019, año electoral.
"Estaremos al lado de los vecinos para que dejen de ningunearles desde el equipo de gobierno. Merecen que les solucionen los problemas que llevan denunciando desde la pasada legislatura como las inundaciones, falta de limpieza o la necesidad de asfaltado, además de dar seguridad jurídica a todas sus viviendas", explica la portavoz del Partido Popular, Begoña Carrasco.
Y añade: "El Plan General, aprobado sin consenso, sigue sin aportarles tranquilidad, ya dijimos que no es el Plan General que necesita Castellón. Este documento somete a revisión incluso aquellas propiedades que estaban en suelo urbano. Al eliminarse el Plan Especial de la Marjaleria que les protegía, deberán cumplir una serie de condiciones y pagar de su propio bolsillo esta adaptación al nuevo planeamiento urbanístico".
En este sentido, Carrasco lamenta que se les traslade la problemática a los propietarios, "para legalizar sus viviendas deberán estar por encima de la cota de inundabilidad y tendrán que instalar por su cuenta depuradoras en cada una de sus viviendas, y todo esto tendrán que hacerlo en un máximo de diez años", apunta.
"Definitivamente, éste no es el Plan General que hubiera aprobado el Partido Popular, en primer lugar porque no nace del consenso, nosotros defendemos para la Marjalería un Plan Especial adaptado a la realidad actual. Los vecinos piden seguridad urbanística para poder vivir tranquilos, y hay que tener en cuenta la singularidad de la zona", insiste.
Entre las reivindicaciones que volverán a sonar mañana en la protesta está la la apertura del consultorio médico de la Marjaleria, más presencia de patrullas policiales para evitar robos y ocupaciones ilegales de viviendas, como está habiendo en todos los distritos de la ciudad, y por supuesto la petición de reparación de la tubería que sigue, después de tres años, inundando propiedades en la Molinera, Senillar y Bovar, además de la activación de los motores de extracción de agua para evitar que sean puntos de proliferación de mosquitos.
