La mayoría de los ciudadanos tienen un concepto peyorativo de la zona, más allá de lo que estiman los criterios técnicos
La ponencia de Consuelo Leal y Mª Elena Gil, ha abierto el I Congreso de la Marjalería de Castelló en el Centro Cultural de la Marina. Aunque el objetivo fundamental de este encuentro es analizar la riqueza ambiental de la zona y las posibles medidas de protección, el nuevo Plan General es fundamental para definir los niveles de protección del paisaje y cómo se abordarán las actuaciones. Y es que, los ciudadanos de Castelló tienen un concepto más peyorativo de la zona más allá de lo que opinan los técnicos.
Esperanza Molina/ Castellón Información
El I Congreso de la Marjalería de Castelló, organizado por la concejalía de Transición Ecológica y los colectivos Gecen y Au d’Ornitologia, ha abierto sus puertas esta tarde, con el proceso de inauguración y las primeras ponencias.
“Organizamos el congreso para explicar con argumentos científicos la necesidad de la conservación ambiental de la Marjaleria, generando un debate en toda la ciudad sobre sus valores ambientales e implicar a todos los actores para compatibilizar el uso residencial con la restauración paisajística y la reactivación agraria”, ha explicado el concejal de Transición Ecológica, Fernando Navarro, durante la inauguración de las jornadas, acompañado por la teniente de alcaldía del Grau, Mary Carmen Ribera; el director general de Medio Natural y de Evaluación Ambiental de la Conselleria de Emergencia Climática; Julio Gómez; y Joan Castany y Francisco González, representantes de los colectivos Au d’Ornitologia y Gecen, organizadores del congreso junto a la Concejalía.
La importancia de los humedales, ha centrado la presentación del director general de Medio Natural, quien ha destacado que una las líneas estratégicas de los fondos de reconstrucción pasan por mejorar los humedales y ha subrayado su importancia para mitigar el cambio climático.
Aunque la organización ha repetido por activa y por pasiva, tanto en la presentación de este Congreso como durante la inauguración, que el objetivo de este encuentro no es debatir sobre el Plan General, lo cierto es que ese planeamiento urbanístico va a ser la base de todo el análisis.
‘Ordenación de la Marjalería. Acciones previstas en el nuevo planeamiento en aras a su recuperación ambiental'
De esta forma, la primera ponencia presentada ha sido: ‘Ordenación de la Marjalería. Acciones previstas en el nuevo planeamiento en aras a su recuperación ambiental'. Ha sido impartida por Consuelo Leal, arquitecto y directora del Plan General, y por Mª Elena Gil, técnico agraria y experta en tema de paisaje.
Durante su intervención, se ha analizado la situación de la Marjalería en función de los conocimientos que se tienen sobre este territorio. Es decir, su origen como un humedal que, como todas las actividades económicas del ser humano ha sido readaptado a lo largo de la historia para dar una respuesta productiva.
La Marjalería, que comprende un basto territorio delimitado por el término municipal de Benicàssim, por el norte, el término de Almassora por el Sur, la línea del litoral por el este y el Camí de la Donació por el oeste; presentan unas características orográficas que promueven su inundabilidad, por la alta cota freática pero, además, la dificultad de desaguar el agua que se acumula procedente de la zona alta del termino municipal, y los fenómenos de lluvia.
Esas características han determinado muchos de sus usos a lo largo de la historia. El último más conocido, el del cultivo del arroz, actividad que entró en declive en los años 60 del pasado siglo.
Es, a partir de ese momento, cuando se desecan los terrenos con un sistema de tuberías construidos en el subsuelo. Se modifican las actividades agrícolas, las casas de aperos se convierten poco a poco en viviendas y dan paso a la edificación de viviendas.
Una proliferación urbana en progresivo incremento, de forma desordenada y sin servicios o muy deficitarios.
La mayor parte de esos terrenos son de propiedad privada, aunque también hay suelo de titularidad pública.
Tal como comentaban las técnicas, el Plan General de 1984 ya planteó el problema, aunque no llegó a darle soluciones. “No se da un tratamiento homogéneo a los terrenos de la Marjalería, sino que se califica en diferentes categorías con varios usos permitidos: de carácter agrícola y residencial”.
El urbanismo de la época limitaba los núcleos de población y concedía las autorizaciones en base a la superficie de las parcelas y la distancia entre las mismas. Era la época de los primeros ayuntamientos democráticos, y como recuerdan muchos marjaleros, de lo que se denominó 'la ley del punto y final’. Dicho de otra forma, la Marjalería se llenó de letreros en los que se prohibían las nuevas edificaciones.
Sin embargo, no se consiguió el objetivo propuesto. Es más, durante las décadas siguientes el número de edificaciones y la población de la Marjalería se multiplicó. Con ello también se generaron carencias y problemas: falta de sistemas de saneamiento, alumbrado, servicios, comunicaciones, vertidos a las acequias…
El Plan General de Castelló del 2000, se aprobó sin ordenar el territorio de la Marjalería, que se dejaba sobre la mesa, porque se estaba generando un Plan Especial, aprobado en 2006. Ahora bien, destacaba Leal, se prohibía cualquier nueva edificación en tanto no se aprobara aquel Plan Especial y el suelo era considerado como No Urbanizable.
El Plan Especial de la Marjalería se aprobó en 2006 y fue reconocida como legal por las administraciones local y autonómica.
“La resolución aprobatoria establece como condicionante el cumplimiento de la resolución de impacto ambiental que, a su vez, supedita su carácter favorable al cumplimiento de las siguientes condiciones:
- Cumplimiento de las medidas correctoras del estudio de inundabilidad
- Cumplimiento de las medidas correctoras del EIA (Estudio de Impacto Ambiental)
- Realización de un nuevo programa ambiental
- Parámetros ambientales a controlar
- Vigilancia y control de nivel y estado del acuífero
- Seguimiento de Especies protegidas”.
Aquel Plan Especial dividía la Marjalería en una enorme cuadrícula que abarcaba más de 22 millones de metros cuadrados. Reconocía los núcleos de población consolidados, que podrían ser considerados como suelo urbano, aunque para ello debían de contar con los servicios fundamentales. También reconocía posibles suelos urbanizables en base a su desarrollo, cercanía a los caminos principales y posibilidades de dotarlas de una urbanización. Y establecía también parcelas mínimas para futuras construcciones y suelos no urbanizables donde respetar el carácter agrícola o paisajístico.
Aquel Plan Especial requería de posteriores desarrollos para dotar de servicios a esas parcelas ‘habitables’ y núcleos de población, como la creación de redes de alcantarillado. El problema, es que para poderlo hacer se necesitaba una inversión enorme, a gran escala. Esos desarrollos apenas se realizaron.
Analizados estos planeamientos urbanísticos y la situación de la Marjalería durante esos años, el Ayuntamiento de Castelló espera aprobar en breve el nuevo Plan General Estructural, condicionado a la DATE que viene a ser el Informa de Impacto Ambiental y territorial.
Desde que se aprobara el Plan Especial de la Marjalería hasta la redacción del Plan General actual, se han producido cambios importantes, como el cambio de mentalidad en lo que se refiere a la existencia de los humedales; las normativas que protegen el suelo en función de su valor medio ambiental, o las nuevas pautas de protección del Paisaje. Todas ellas destinadas a proteger el territorio, las especies de la zona, la riqueza ambiental, y la situación urbanística que delimita la Ley del suelo.
Y es aquí donde el Plan General Estructural analiza la situación actual de la Marjalería y las actuaciones que es necesario llevar a cabo.
Lo que establece el Plan, en función el respeto a las normas supramunicipales y la DATE, contempla: “La evaluación ambiental y territorial estratégica, que da lugar a un Estudio ambiental y territorial estratégico, pero también contempla El estudio de Paisaje, el Estudio de inundabilidad, y la infraestructura verde.
“El Programa de Paisaje para la restauración ambiental y mejora del Paisaje de la Marjalería:
Objetivos y beneficios que se espera obtener:
1.- Conocimiento y puesta en valor de los espacios de mayor valor paisajístico actual o potencial del ámbito de la Marjalería.
2.- Conectividad con los espacios ya ordenador de alto valor paisajísticos que la rodean:
Al norte, el Parque Natural del Desert de les Palmes y el Paraje Natural Municipal del Ermitorio de la Magdalena así como el propio Molí la Font.
En el Centro el Riu Sec.
Al este el litoral junto con las playas del Pinar, Gurugú y Serradal”,
EL programa de Paisaje y la restauración ambiental y mejora del Paisaje contempla una serie de puntos:
1.- “implementar/ mejorar soluciones de servicios (vertidos)
2.- Demolición de construcciones en ruina.
3.- Retirada de carteles publicitarios.
4.- Demolición de sistemas de vallado que no favorezcan la biodiversidad.
5.- Protección de aguas subterráneas, afloramientos y manantiales.
6.- Señalización de recorridos didácticos.
7.- Control de vertidos no autorizados.
8.- Realización de censos para el control de bioindicadores de flora y fauna.
La pregunta del millón viene a ser: ¿Qué se quiere para la Marjalería? ¿Qué hay que proteger y como hacerlo? Y si de lo que se trata es de recuperar la riqueza ambiental de la zona… ¿Desde cuando hacerlo?
Curiosamente, manifestaban las dos técnicas, para a elaboración del Plan General se recogió la participación de los vecinos de Castelló. Y una de las conclusiones es que los mismos ciudadanos contemplan la calidad de la situación actual de la Marjalería, de una forma mucho más peyorativa de lo que lo hacen los técnicos que trabajaron sobre el planeamiento.
¿Es posible una compatibilidad entre las acciones para prevenir los riesgos y la recuperación ambiental en la zona?” “¿Pueden las actividades ya implantadas cooperar activamente en la prevención de impactos y en la recuperación ambiental de la zona?”
Por todo ello, en su ponencia, las técnicas ponían sobre la mesa todos estos interrogantes: Situación inicial y situación final a la que se pretende llegar
¿Este recorrido es posible?
- ¿Cual es el objetivo para la zona?
- ¿Quién lo decide? Actores implicados en los procesos.
- Para lograrlo ¿Cuáles son los nuevos condicionantes a tener en cuenta?
- ¿cuáles son las acciones ya realizadas?
- El papel de la administración local.
El plan General Estructural intenta dar respuestas a todos estos planteamientos. Estructura la zona en función de su riqueza ambiental, y la subdivide en unidades ambientales. Y establece el tipo de actividades que se podrán desarrollar.
De cómo afectan todos estos planteamientos a los vecinos de la Marjalería que ahora viven en el territorio, no dio tiempo a profundizar en ello. Lo que se si puso sobre la mesa, es que el Ayuntamiento está obligado a cumplir unas normativas que le vienen dadas por la legislación autonómica pero también por la normativa europea y medioambiental.
La gestión llevada a cabo en les Carrisals de Elx
La segunda ponencia de la tarde fue la impartida por Juan Miguel Montaner, de la Unió de Llauradors, ha explicado la gestión llevada a cabo en les Carrisals de Elx para restaurar este espacio, un conector entre dos masas de agua, destacando su reserva de boiodiversidad y la implicación de su comunidad de regantes en el desarrollo de acciones ambientales.
El Parc Agrari del Baix Llobregat
Sònia Callau, jefa de la Unidad de Apoyo a los Espacios Agrarios de la Diputación de Barcelona, expone el Parc Agrari del Baix Llobregat, el primer espacio de estas características creado en España, una figura periurbana que contempla una cogobernanza entre el sector público y el primario para poner en valor el territorio y la agricultura de proximidad
La primera jornada ha contado también con Pilar Donat, de la Universitat de Alicante, con una ponencia sobre la protección de la marjal y el ecosistema dunar
Las jornadas continúan este sábado con conferencias sobre la biodiversidad y la riqueza hídrica de la Marjaleria y su historia, con intervenciones de Au d’Ornitologia, Gecen, la Asociación Herpetológica Pinon y Crearqció El domingo concluirán con una jornada de anillamiento en la desembocadura del río Seco, y un ruta ciclista en la Marjaleria.
Una exposición de fotos históricas acompaña las jornadas del I Congreso de la Marjalería.