Se reunió con el vicepresidente de la UE, Frans Timmermans, en un encuentro en el que propugnó el papel de la electrificación en la seguridad energética y la descarbonización de Europa
El presidente de Iberdrola, Ignacio Galán, ha reafirmado hoy en Nueva York el compromiso inversor de la compañía española en la transición verde, tanto a nivel global como en los Estados Unidos, y ha hecho un llamamiento a responsables políticos y empresas del sector privado para que estrechen su colaboración con el fin de superar las barreras que siguen obstaculizando el despliegue de las energías limpias y la necesaria inversión en renovables, redes y almacenamiento.
Galán se pronunciaba en estos términos en una mesa redonda organizada por el Grupo de Líderes por el Clima y presidida por el vicepresidente ejecutivo de la Comisión Europea, Frans Timmermans, en el marco de la Semana del Clima de Nueva York.
El evento titulado Cómo los sectores público y privado de la UE y Estados Unidos pueden trabajar juntos para lograr el liderazgo mundial en materia de ambición climática y seguridad energética ha reunido a una amplia representación de empresas privadas, organismos públicos e instituciones financieras norteamericanas.
Durante su intervención en el Empire State Building, el presidente de Iberdrola se ha referido a los problemas globales relacionados con la dependencia mundial de los combustibles fósiles y los retos adicionales causados por la actual crisis energética. Galán ha coincidido con António Guterres, secretario general de Naciones Unidas, en que "el actual escenario mundial demuestra que la transición energética no puede esperar. No se trata sólo de una cuestión climática, también es urgente la autosuficiencia energética y abordar los problemas creados por los altos precios de los combustibles fósiles, que suponen aún el 80% del consumo energético global".
“En Iberdrola no tenemos dudas: hemos invertido más de 140.000 millones de euros en la transición energética y vamos a acelerar nuestro plan inversor en energías renovables, redes y almacenamiento, generando un impacto positivo para la economía y la sociedad, pero también para la naturaleza”, ha asegurado.
Por eso, “en Iberdrola hemos aprobado un nuevo plan de biodiversidad, con el compromiso de ser positivos netos para la naturaleza en 2030, más que compensando cualquier impacto en la biodiversidad producido por la compañía y actuando sobre nuestra cadena de suministro”, ha afirmado.
El presidente de Iberdrola ha recordado que, en la Unión Europea, la dependencia de los combustibles fósiles ha tenido un impacto negativo en la competitividad de las empresas y ha provocado repetidas situaciones de crisis en las últimas dos décadas.