Castelló en Moviment pide explicaciones por “el uso político” del programa del Grao para beneficio electoral de PSOE
La ausencia de Begoña Carrasco por enfermedad y el voto de calidad de la alcaldesa forzaron la aprobación de una moción de CseM, que exige mayores controles sobre el Gobierno municipal de Amparo Marco, que difícilmente podrán cumplirse. La decisión dejó a Compromís en solitario, al lado de PP, aunque por distintas razones. Los primeros porque contravenía el Pacto del Grao, los segundos, porque el reglamento municipal ya lo establece. CseM intentó afear al PSOE con la cartelería de los Carnavales del Grao
Esperanza Molina/ Castellón Información
El pleno ordinario del Ayuntamiento de Castellón del mes de febrero tenía poco contenido pero ofreció un espectáculo que no se esperaba, con contradicciones y protestas, estas últimas, protagonizadas por la Unidad GIP de la Policía Local.
Tal como estaba programado, los policías acudieron al pleno. Dejaron ver sus reivindicaciones de equiparación laboral y permanecieron en silencio… apenas unos minutos, para luego abandonar ordenadamente la sala.
Comenzaba la sesión con la toma de posesión de la nueva concejal socialista, Mónica Marinela. La nueva edil se colocó entre el público, a la espera de ser llamada para prometer su cargo… ese ha sido el procedimiento utilizado hasta ahora. Pero para sorpresa hasta de sus mismos compañeros, la alcaldesa se dirigió a ella, le hizo indicaciones y la obligo a sentarse en la bancada para, desde allí, salir a hacer su promesa, con toda la Corporación puesta en pie.
Esto no ha ocurrido antes… se miraban los concejales, incluidos los de su propio partido, que no sabían explicarse el por qué del cambio en este protocolo de toma de posesión.
Comenzaba la lectura de los puntos, pero la tranquilidad duró poco, porque los agentes del GIP, ya en la calle, en la plaza del Mercadillo, donde recaen las ventanas del salón de Plenos, comenzaron su protesta sonora, con pitos y trompetas.
El barullo era tan grande, que la alcaldesa torció el gesto y pidió al concejal Rafa Simó, que intervenía en ese momento, que parara en tanto pudiera recobrarse la tranquilidad.
Hasta en siete ocasiones la alcaldesa paralizó el pleno. En sus asientos, los concejales se movían inquietos, y finalmente la alcaldesa llamaba a los portavoces para tomar una decisión: suspender el pleno en tanto se hubiera acabado la concentración de los policías, o convocar el pleno para otro día.
En la Junta de Portavoces, y según señalaron algunos políticos, salieron a relucir todo tipo de posturas: desde el derecho a la movilización, que era de respetar, hasta la posibilidad de que los agentes estuvieran incurriendo en un delito como funcionarios que son.
E incluso, según comentó Gabarda, en el comentario irónico de Xavi del Señor, portavoz de CseM, que dejó caer que lo que hacían los polícías estaba recogido en la Ley Mordaza.
Ante la cara atónita de los periodistas, Xavi del Señor insistía después, que él lo único que había señalado, es que reconocía el derecho de los policías y su grupo apoyaría a quienes hicieran lo mismo para reivindicar sus derechos.
Se propuso entonces, que los portavoces municipales hablaran con los policías, y finalmente los hubo (representantes del equipo de Gobierno), que se reunieron con ellos.
Lo cierto es, que una vez cumplido su principal objetivo, reivindicar derechos, los policías abandonaron la plaza y se reanudó la sesión.
Recurso contra el Plan Acústico de Tetuán y la Muralla
Con el voto en contra del PP, se aprobó la ratificación del decreto de alcaldía, en el que el Ayuntamiento comparecerá en el recurso contencioso administrativo interpuesto contra el acuerdo del Plan Acústico de las zonas de la Plaza de la Muralla Liberal y Plaza Tetuán..
También salió adelante con el voto en contra del PP, el Plan Especial para la obtención del suelo y mejora de las Riberas del Río Seco en la zona de Crèmor; y con el voto en contra de PP y CS, la personación del Ayuntamiento en el recurso contencioso administrativo, esta vez contra el cambio de topónimo de Castellón, para que su nombre oficial sea solo en valenciano.
Rechazadas las alegaciones al Presupuesto 2019
Ya, en Despacho Extraordinario, hubo debate en lo que concierne al rechazo de las alegaciones al presupuesto de 2019 presentadas por el sindicato Csif y Abogados Cristianos.
Por parte de la oposición, tanto Ciudadanos como el Grupo Popular cuestionaron al equipo de Gobierno que hubiera entregado a última hora y sin tiempo real para su estudio, el expediente de ambas alegaciones y su resolución. “No se hacen las cosas así, dijo Vidal, no se entregan 50 folios el día anterior a las cuatro de la tarde y se convoca una comisión para aprobarlo a las 11 de la mañana…Más vale que trabajen de otra manera o acabaremos todos de la tensión…”
En la misma línea se pronunció Carlos Feliu por el PP. El concejal popular afirmó que ni habían tenido tiempo ni habían podido preparar el debate, al tiempo que indicó que el tema no era tan urgente cuando el presupuesto de 2019 se presentó ya iniciado el ejercicio.
No fue aceptada esta crítica por parte del equipo de Gobierno ni de su portavoz en este tema, Patricia Puerta, que respondió en un tono poco grato, que la urgencia estaba clara, “aprobar el presupuesto”, y que pocas quejas podían tener si cuando se les preguntó en la Comisión si necesitaban alguna aclaración, no la habían solicitado.
Así mismo, Puerta se refirió a las alegaciones presentadas, que dijo, incumplían el reglamento y no eran aceptables. Fue bastante despreciativa con la alegación del sindicato Csif, y de los numerosos folios que razonaban y argumentaban la protesta, se centró solo en un par de frases, con las que pretendió poner de manifiesto ignorancia, incultura e incluso, ordinariez de la alegación. No señaló que lo indicado era solo una explicación coloquial dentro de una exposición razonada…
El tono de la concejal fue calificado como de ‘chulería’ por parte de PP y Cs, pero Patricia Puerta se mantuvo en sus trece.
Volvieron a salir a colación las plazas de minusválidos, para personas como Borja, cuyo caso llegó en el pleno de enero, y tampoco se resolvió nada, aunque todos votaron a favor de “adecuar las plazs de aparcamientos destinados a personas con movilidad reducida para adaptarse a la normativa de accesibilidad universal”.
Y finalmente, la última moción dio que hablar, porque chirrió por los cuatro costados.
Sesiones de Control de la alcaldesa
Había sido presentada por CseM, para promover una reforma del reglamento de pleno municipal e incluir sesiones de control.
El portavoz de la agrupación comenzó con un ataque contundente: hacia la alcaldesa, de quien dijo, había promovido estas sesiones de control cuando era portavoz de la oposición, en 2012 y se había olvidado de ello hasta ahora; y para el PP, porque entendían que la derecha no lo quisiera, por si llegaba la casualidad de que pudieran volver a acceder al Gobierno.
El vicealcalde y portavoz de Compromís, Ignasi García, tomó la palabra, para señalar, que el Gobierno del Ayuntamiento se rige por el Pacto del Grao, que contempla en su argumentario un sistema de control que no está contemplado en la moción de CseM, por lo cual no podían darle su voto.
Parecía que las cosas podían estar claras… pero no lo estaban, porque la alcaldesa, visiblemente ofendida de que hubieran dudado de ella, afirmó que daba la cara cuando se lo requerían y que votaría a favor de la moción de CseM. ¿Divisiones en el seno del equipo de Gobierno?
Desde el PP, Juan José Pérez Macián intentó explicar con mucha paciencia, lo que había supuesto para Castellón acceder al estatuto de grandes ciudades, que obligó a la revisión del Reglamento Municipal y que cumpliera todos los parámetros de trasparencia y de control. Un reglamento, recordó, consensuado en su día con todos los grupos políticos y sus portavoces. Tras el ‘modo explicativo’, el perfil político de Macián fue a por Amparo Marco, a la que acusó de no haberse leído ni en el 2012 ni en la actualidad el Reglamento Municipal, y haber basado sus mociones anteriores y comportamiento actual en demagogia.
Y Vicente Vidal, de Ciudadanos, intentó utilizar el tema para llamar la atención de la alcaldesa, rebotarse posteriormente porque se le había malinterpretado y finalmente, dejar colocada la crítica y la exigencia de transparencia, pero sin posicionarse después en el voto.
Y la cosa fue a peor cuando, ya entrados en el ‘y tu más’ Patricia Puerta intervino, para ‘defender’ a su alcaldesa, y afirmar categóricamente que estaban cumpliendo el Pacto del Grao y que el PP no quería controles.
Mientras, desde presidencia, Ignasi García explicaba por lo bajo a la alcaldesa los puntos del Pacto del Grao, le mostraba el argumentario y le indicaba que habían metido la pata, al menos en las formas y las expresiones, porque estaban dando apoyo a una moción que incumplía lo pactado.
Aún así, y como Marco ya había anunciado su voto, no podía recular ¿Qué podía decir ahora? ¿qué no lo iban a votar después de cómo se habían expresado?
Reconoció, sin embargo, que el Pacto del Grao y la moción presentada no eran lo mismo, pero se mantuvo en sus trece, porque ella, dijo, defendía por encima de todo la transparencia municipal…
Llegó la hora de votar. CseM y PSOE sumaban posiciones a favor de la moción… 11 votos. Compromís y PP, cada uno por unas razones diferentes, se pronunciaban en contra… 11 votos (uno menos de lo que hubiera sido habitual, porque Begoña Carrasco estaba enferma y por tanto ausente). Y Cs pese a lo dicho o no dicho, se abstenía.
Se producía un empate… la alcaldesa consultó con la secretaria. “Volvamos a votar y reconsideren sus posiciones”, dijo. Pero los votos fueron los mismos. En un caso así, el voto de la primera autoridad vale doble como voto de calidad… Se aprobó la moción…
¿Los Carnavales del Grao con sello del PSOE?
Para completar el relato cabe hacer referencia al último punto, el de Ruegos y Preguntas, que contó solo con una intervención, la de Xavi del Señor, de CseM, que acusó a la alcaldesa de hacer uso político con la publicidad municipal. Es la segunda vez que el de CseM, pone en esta tesitura a aparo Marco. La vez anterior, fue en referencia a Fitur, cuando el eslogan electoral de Marco se confundía con la campaña de promoción de Castellón en Madrid. En esta ocasión dijo, porque tanto los folletos como el cartel de los Carnavales del Grao son asombrosamente similares a los de la campaña electoral de la alcaldesa… ¿Coincidencia o intencionalidad?
Concluida la sesión, el portavoz de Compromís, Ignasi Garcia, manifestaba, que las mociones deben de tener sentido común y aprobarse con la certeza de que se pueden cumplir… en este caso venía a referirse a que la moción de CseM de incrementar el control sobre el Gobierno municipal está bien, pero para poderla sacar adelante hacer falta una revisión del reglamento municipal, algo que difícilmente se va a poder sacar adelante en lo que queda de legislatura. En este aspecto, por lo menos García fue honesto y coherente con su voto.