El concejal y portavoz adjunto del PP asumirá el próximo fin de semana la presidencia, ya que llega a la cita como candidato único y con la fuerza de los 213 avales presentados, el 92,63 % del censo de afiliados
Castellón Información
Adrián Casabó (Vila-real, 1987) asumirá el próximo fin de semana la presidencia del Partido Popular de Vila-real. Muy vinculado al movimiento asociativo de la ciudad, Casabó es licenciado en Periodismo y ha trabajado en varios medios de comunicación. Actualmente ejerce como profesor de Secundaria en un centro educativo. El concejal y portavoz adjunto del Grupo Popular en el Ayuntamiento de Vila-real llega a la cita como candidato único y con la fuerza de los 213 avales presentados, que suponen el 92,63 % del censo de afiliados en la ciudad.
¿Cómo valora la respuesta que ha tenido por parte de los afiliados de su partido?
Es una suerte contar con ese importante respaldo de los afiliados, lo que pone de manifiesto que este es un partido unido, fuerte y que tiene los mimbres necesarios para volver a ser un partido ganador. Pero de lo que más feliz me siento estos días es de la ilusión que ha despertado esta renovación en la calle y aprovecho para dar las gracias a todos los vecinos, asociaciones y empresas que me han hecho llegar sus mensajes y muestras de cariño.
¿Qué le ha impulsado a dar ese paso adelante?
Sin duda, la pasión que siento por Vila-real. He tenido la suerte de trabajar por mi ciudad desde diferentes asociaciones y entidades, que me han ayudado a conocer más la ciudad, sus tradiciones, pero también los deseos y preocupaciones de su gente. Creo que es momento de devolver a Vila-real todo lo recibido. Es un honor, pero también una tremenda responsabilidad asumir las riendas de este proyecto político, que estamos seguros que es el que mejor puede representar a una amplia mayoría de los vila-realenses.
Esta renovación en Vila-real llega después de un proceso de cambio en el Partido Popular de la provincia de Castellón. Usted apoyó públicamente a la actual presidenta cuando presentó su candidatura. ¿Cómo valora estos dos primeros meses de Marta Barrachina al frente del partido?
Marta Barrachina ha demostrado ya en estos dos primeros meses que era la persona idónea para dirigir el Partido Popular de Castellón en este momento. El partido ha redoblado su presencia en la calle, escuchando a los vecinos de todos los municipios y presentando numerosas iniciativas de apoyo a sectores económicos y entidades afectadas por la gestión de la izquierda. Me sumé a su proyecto desde el primer momento porque tenía claro que era la mejor opción y debo agradecer su apuesta por Vila-real desde el minuto cero. No se puede emprender un proyecto para la provincia sin tener en cuenta a nuestra ciudad.
¿Cómo definiría el proyecto de Adrián Casabo?
Mi proyecto para Vila-real no es solo Adrián Casabó, es un proyecto de conjunto, que quiero construir junto a mis vecinos, las asociaciones, las empresas… He tenido la suerte de trabajar en equipo allí donde he tenido la oportunidad, tanto en el ámbito profesional como en las asociaciones de las que he formado parte y creo firmemente en ello. Quien se cree indispensable e insustituible en cualquier proyecto tiene un serio problema. Es momento de pasar de la política del yo, a la política del nosotros.
¿Qué cree que necesita Vila-real?
Por desgracia hemos visto como Vila-real ha dejado escapar en esta década muchas oportunidades de futuro, mientras otros municipios de nuestro entorno conseguían atraer interesantes inversiones y dotar de nuevos servicios a sus vecinos. Necesitamos que Vila-real vuelva a ser una ciudad dinámica y que genere oportunidades.
- Es necesario impulsar el comercio y las pequeñas empresas y no esperar a darles una respuesta cuando se manifiestan porque la situación es ya límite.
- Es necesario que el Ayuntamiento de Vila-real genere oportunidades atractivas. No podemos permitir que nuestras empresas se vayan fuera del término municipal para seguir creciendo y no podemos seguir dejando pasar el tren a nuevos proyectos e inversiones, que necesitan de buenas condiciones y de una administración que no les ponga trabas y les acompañe en su crecimiento.
- Necesitamos un Ayuntamiento que ofrezca el mejor entorno para vivir, una ciudad que sea agradable, que esté limpia y que ofrezca oportunidades para que todos los vecinos tengan la opción de desarrollar sus mejores cualidades. Tenemos la suerte de contar con un variado y amplio tejido asociativo que es clave para la vida de nuestra ciudad.
¿Cree que la estructura del ayuntamiento tiene capacidad para ello?
Por supuesto que sí, pero hay que hacer una gestión eficaz de los recursos. Tras una década de gobierno socialista seguimos sin tener definida la Relación de Puestos de Trabajo (RPT) y las necesidades en muchos departamentos del Ayuntamiento siguen sin estar resueltas. No se están cubriendo las plazas de los trabajadores municipales que se están jubilando. Por ejemplo, la plantilla de la Policía Local está muy mermada y eso termina repercutiendo en el servicio que se presta a nuestros vecinos. Por poner algún ejemplo, la Policía Rural cuenta con dos agentes para todos los turnos y todo el término municipal y la Policía de Barrio dispone de dos agentes para toda la ciudad.
El departamento de servicios públicos ha quedado desmantelado totalmente, lo que impide ofrecer un servicio rápido y eficaz para solucionar las incidencias y avisos de los ciudadanos ante desperfectos en aceras, parques, farolas… En el departamento de Servicios Sociales nos encontramos con el mismo problema, con el agravante de que esas deficiencias en el servicio por la falta de personal repercute directamente en la atención a familias con mayores dificultades o personas dependientes.
Ha hablado usted de que el proyecto del actual equipo de gobierno está agotado ¿Por qué cree que la ciudad necesita un cambio?
Llevamos 10 años escuchando anuncios de proyectos que una década después siguen sin ser una realidad. El tiempo de los eslóganes y los anuncios vacíos de contenido está llegando a su fin. No podemos hablar de la ciudad de la salud y tener cinco años cerrado el ambulatorio de Torrehermosa; ni presumir de ser ciudad educadora y estar una década esperando el cuarto instituto o un edificio propio para la Escuela de Idiomas; ni querer liderar el Fondo de Cooperación y deber a las ONG ayudas desde el año 2016. Las excusas caen ya por su propio peso. Primero era la herencia recibida del gobierno anterior, ahora la pandemia...pero la realidad es la que es y no se puede ocultar más.
Pero el alcalde continúa achacando a la gestión del PP los problemas que tiene la ciudad...
Es curioso ver como el alcalde de la ciudad reconoce que estamos ante el peor momento de Vila-real. Yo haría una matización. No es el peor momento de Vila-real, es el peor momento del gobierno de Vila-real. Digo yo, que después de diez años de gobierno ¿alguna responsabilidad tendrá él sobre esto, no? Él es desde hace una década el CEO de Vila-real y en cualquier empresa si el CEO no consigue resultados, no aguanta ni un año en el puesto, Benlloch lleva ya diez.