Los castellonenses pagan impuestos de primera para recibir servicios de tercera. Y todo, en un contexto de dificultad económica, con una inflación galopante que hace absolutamente prohibitivo llenar la cesta de la compra, pagar las facturas y hacer frente al pago de la hipoteca. Por eso, desde el Partido Popular de la ciudad de Castellón reclamamos una bajada de impuestos, una medida que permitiría ayudar a las familias, sería un apoyo a las pymes y autónomos y dinamizaría la economía.
Por eso, proponemos la rebaja de los impuestos de la ciudad hasta sumar un ahorro al conjunto de los castellonenses de 10,1 millones de euros. Pedimos una rebaja del IBI, que es el que afecta a un mayor número de castellonenses, para que el recibo les baje en un 10% a todas las familias de esta ciudad.
Por otro lado, defendemos una bonificación de impuestos como el ICIO, hasta en un 90% para rehabilitar viviendas de más de 50 años, o del IAE en un 25%, y del BICE del puerto, para atraer inversiones y nuevas empresas que generen más puestos de trabajo, porque el empleo es la mejor política social.
Y para ayudar a los autónomos y a las pequeñas empresas de esta ciudad, como es el sector hostelero y los comerciantes, proponemos una bonificación total de la tasa de ocupación de vía pública para que las terrazas no paguen hasta el final del año 2023, ayudándoles así a terminar de superar los efectos de la pandemia ya que ellos fueron quienes peor parte se llevaron.
Es el momento y es posible. Una auténtica revolución fiscal que permita que los castellonenses paguen menos impuestos, tengan más dinero en el bolsillo y, en definitiva, puedan disponer de más recursos para afrontar sus obligaciones diarias.
Lo hemos visto en otras ciudades y otros territorios. Allí donde se bajan los impuestos, crece la economía, se dinamiza el mercado laboral, se generan oportunidades. La deficiente gestión de la alcaldesa Amparo Marco, que no cumple todo lo que promete, hace que cada año se queden sin ejecutar millones de euros. Es decir, dinero que el tripartito sí recauda, pero luego no se traduce ni en las inversiones que se prometen ni en los servicios que se publicitan. Desde 2015 se han devuelto anticipadamente a los bancos hasta 36 millones.
Los castellonenses afrontan un otoño y un invierno muy difícil. Así lo auguran los expertos y así ha tenido que admitirlo hasta el propio Gobierno de Pedro Sánchez. ¡Cómo será lo que se nos viene encima! Hay que bajar impuestos. Gobierno, Generalitat… pero también el Ayuntamiento de Castellón. Como administración más cercana a los ciudadanos, puede y debe hacer mucho más por todos los vecinos. Desde el Partido Popular estamos comprometidos con los castellonenses. Nuestro compromiso es bajar los impuestos. Y así lo llevaremos a cabo a partir de 2023, cuando, esperamos, que los ciudadanos nos den su confianza.