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El concejal de Educación y Cultura del ayuntamiento de Benicàssim, Javier Alonso, ha anunciado esta mañana la apertura de un nuevo plazo extraordinario de preinscripción en las Escuelas Infantiles Municipales para los bebés que todavía no han nacido, pero que lo harán antes del 30 de septiembre.
Alonso ha destacado que "creemos que es una de las acciones más importantes que podemos poner en marcha para las familias que se encuentren en esta situación para fomentar la conciliación laboral y familiar y facilitar los recursos educativos a todos los padres y madres".
Actualmente, tras el primer período de preinscripción ordinaria, de bebés que pueden comenzar el curso lectivo en fecha y forma, han quedado un total de once plazas disponibles entre las EIM Tasio y Doloretes. Así que la disponibilidad de plazas abre la posibilidad a que se amplíe el plazo de preinscripción, de manera extraordinaria, también a los nasciturus.
El motivo de poner como fecha tope para el nacimiento del futuro bebé el 30 de septiembre es porque, para escolarizar al bebé, éste ha de haber cumplido cuatro meses y por tanto, es la fecha límite de 2017 para cumplir el requisito.
Los requisitos para realizar la preinscripción son: que el nacimiento se produzca antes del 30 de septiembre de 2017, presentar la instancia en cualquiera de las dos Escuelas Infantiles entre hoy, 10 de mayo y hasta el viernes 19 de mayo de 2017, presentando la documentación específica (certificado médico oficial que acredite el embarazo en el momento de la presentación de la solicitud, con indicación de fecha prevista de nacimiento). Teniendo en cuenta que, cuando se produzca el nacimiento, para formalizar la matricula será necesario aportar el libro de familia y SIP (documentación que no se tiene con anterioridad al nacimiento) a aportar posteriormente.
El menor junto con su padre/ madre o tutores deben estar empadronados en Benicàssim. Así mismo, es imprescindible que los progenitores o tutores no sean deudores a la hacienda municipal.
Alonso ha manifestado que "esta es una nueva oportunidad para dar más servicio y derechos a las familias beniceses que, tienen la posibilidad muy poco frecuente en la provincia, de contar con una escuela infantil pública que no supone gasto para los padres, lo cual es un gran alivio económico también para las familias".
