Más de 130.000 personas participaron en la Romeria de les Canyes en el tercer domingo de Cuaresma
Más de 130.000 personas han participado hoy en la tradicional Romeria de les Canyes, que por primera vez se celebraba bajo la declaración de Bien de Interés Cultural Inmaterial de la Humanidad. La ciudad entera se desplazó hasta el cerro de la Magdalena en una marea de gente, identificada por sus cintas verdes, aunque los hubo que renunciaron a su caña. Según el ayuntamiento, solo se repartieron 25.000 en la puerta del Ayuntamiento.
Esperanza molina/Castellón Información
Una marea de cintas verdes ha peregrinado esta mañana hasta el cerro de la Ermita de la Magdalena, para conmemorar la fundación de la ciudad. La comitiva oficial, tanto la civil como la religiosa, salían de la Plaza Mayor de Castellón, con alguna que otra historia. La no oficial, de todos los rincones de la ciudad.
Antes incluso de que se realizara la despertá, Castellón ya era un hervidero de gente. Los unos porque acudían a por su caña, a reunirse con los amigos, o a los puntos de encuentro para salir de romería. Los otros, porque todavía no habían cerrado los ojos después de una noche de fiesta, y aún asi, se resistían a acabr la jornada sin su caña y su cinta.
La Plaza Mayor se llenaba de gente, más que otros años. Prro es que hoy el día estaba para ir de 
Romeria y a cualquier parte. Y ya puestos ¿Por qué no ver la salida oficial de la peregrinación mientras recogemos las cañas?
En la comitiva oficial, la Corporación ‘casi’ en pleno, el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, el expresidente Alberto Fabra, el presidente de la Diputación Provincial, Javier Moliner… y toda una gama repleta de políticos y diputados del Partido Popular y juna amplia representación del PSOE.
Como nota curiosa, con algo de malicia, la presencia, en esta Comitiva, de Xavi del Señor y de Ignacio Vallejo, de Castelló en Moviment. Es la primera vez que participan en la Romería ‘oficial’ e ‘institucional’. Aunque como señalaba Xavi del Señor “Hemos querido que no nos lo cuenten”, y con ello demostraba coherencia, ya que chirriaba demasiado que alguien que no aceptaba las fiestas tradicionales presidiera una comisión de investigación sobre la gestión de un periodo de la fiesta tradicional.
Polémica en la salida de la Comitiva Oficial
Se produjo cuando, en recuerdo con los problemas surgidos el año pasado de si entrada en la iglesia si, entrada en la iglesia no, se buscó una solución mixta, que no gustó a nadie. Según los presidentes de las Gaiatas se les dijo cinco minutos antes de que sde ejecutara el plan.
El tema era el siguiente: cuando se de luz verde al inicio de la Romería, el que quiera que avance y se meta en la iglesia. El que no, voluntariamente, se queda donde está. Pero a la salida, en lugar de iniciar el recorrido, los que entraron en el templo tuvieron que dar una ‘volteta a la plaza y a la fuente, para volver a integrarse en la Romería, que ya avanzaba al mismo tiempo en el recorrido marcado…
El sin sentido no fue entendido por propios ni por extraños. A la alcaldesa le cayeron los abucheos del público. Menos que el año pasado y localizados al pie del Fadrí, delante de la iglesia, donde se apagaron bastante al son del volteo de las campanas.
Carros engalanados
Los carros engalanados también partieron al cerro de la Magdalena, contentos, de fiesta, y haciendo sonar los pitos de los vehículos.
Se les diseño un trayecto, que los hizo coincidir bastante en el entorno de María Agustina. Los carros continuaron por La avenida de Lledó, y la procesión por Capuchinos.
Pero esta decisión también tuvo sus contratiempos.
Sucedió cuando los automóviles se encontraron cerrados por una lado y por otro por las comitivas. Y se dio el caso, de que se metieron por la plaza Juan XXIII, donde se estaba produciendo la Romeria. No tuvo mayor trascendencia.
En Sant roc, Miles de romeros llenaron prácticamente todo, el entorno de la Ermita, los campos, los caminos…
Ambiente de fiesta, pero sobre todo, de ganas de fiesta.
Personas de todas las edades, familias completas, grupos de amigos, cupo todo el mundo.
Lleno absoluto también en el cerro de la Magdalena.
Apenas quedó un hueco libre. La gente avanzaba como una marea humana con sus cintas verdes bajo un sol intenso y mucho calor.
Paella monumental, bocata debajo de un árbol, los almuerzos más variados… acercarse tocar la campaneta, a ver la sangre del moro, o a contemplar como avanzan las obras del Castell Vell.
Era media mañana cuando ya muchos iniciaban el retorno. Los más madrugadores. Y un poco más tarde como el resto cogía sus cosas y emprendía camino.
Según la policía local, este año fueron más de 130.000 peregrinos. Castellón cumplió con su voto de renovación de la tradición
Declaraciones oficiales
