Alejandro Marín-Buck. Portavoz de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Castellón.
Esta semana hemos asistido al debate del estado de nuestra ciudad, Castelló de la Plana. Un debate en el que además de portavoz, usé mi condición de sanitario para hacer una radiografía de la capital de La Plana en el primer año de Legislatura. Fui claro y conciso porque un año es mucho más que la Covid-19 que ellos usan como escusa de su inacción al frente del gobierno. Les pedí que desconfinaran su gestión y que no utilizaran el coronavirus para seguir en cuarentena porque los comerciantes, hosteleros PYMES, autónomos y en definitiva, los castellonenses no viven de anuncios ni se curan de perdones.
Un diagnóstico que no gustó a los miembros del Fadrell, debo decir que las verdades cuestan de digerir pero quedó claro que a algunos, les costó más que a otros. Pero como buen profesional, les recomendé que si no estaban de acuerdo que salieran a buscar segundas opiniones, es el procedimiento habitual que aplican los enfermos conscientes que tienen un problema y se quieren curar. Por eso les pedí que se desconfinen, que salgan a la calle y que escuchen a los castellonenses de la Avda de Lidón y lean sus pancartas, porque quieren diálogo, no plantón. Solucionar los aparcamientos de los vecinos de la Farola y de la Calle Herrero y adyacentes, donde el TRAM y el carril bici les ha quitado plazas de parking respectivamente; atender las reivindicaciones de los comerciantes del mercado, responder a los tasqueros, auxiliar a los hosteleros en ayudas y bonificaciones, que no queden en mero anuncio, que éstas lleguen a sus cajas y bolsillos; limpiar la ciudad y sus solares para evitar insalubridad. Ubicar bien los contenedores marrones sin invadir los pasos de peatones, ni los carriles bici, ni las plazas de minusválidos, y luego trasladen el marrón a todos. Sentarse a negociar con los sindicatos de este ayuntamiento, con todos sin distinción, y atender sus peticiones en la mesa de negociación. Nombrar al gerente del patronato de Turismo, agilizar la burocracia de la atención ciudadana evitando listas de espera en la cita previa, desbloqueen el teléfono de atención al público....Si lo mantienen bloqueado no podrán escuchar más opiniones y contrastar la enfermedad diagnosticada.
En definitiva les pedí solucionar problemas, no crearlos donde no los hay. Así los que hace cinco años venían a rescatar personas, cada día que pasa pierden la oportunidad de hacerlo, pero lo peor es que no reconozcan el problema, acusándonos a la oposición de no aportar solución, cuando las que aportan con descaro e imposición.
Este es el Gobierno que tenemos en nuestra ciudad socialista que no social, o progresista sin progresar o de polítiques valentes que todavía siguen semiconfinados detrás de la pantalla para que nadie les tosa.