El alcalde de Valencia, Joan Ribó, asistió a la mascletà y tuvo ocasión de comparar entre Valencia y Castellón
Pirotecnia Gironina disparó la segunda mascletà del Concurso de Mascletaes Ciutat de Castellón. Lo mejor de todo fue el disparo, impecable en todas sus fases. Buen ritmo, bien enlazado un cuerpo con otro, y mucho dominio del fuego aéreo. Terremoto, fuerte, sonoro, que fue a buscar el “se puede un poco más’… bajó la intensidad con fuego aéreo para rematar con fuerzas con remates y terremotos terrestres y aéreos. El alcalde de Valencia asistió hoy a la mascletà con la Comitiva oficial y sus compañeros de Compromís.
Castellón Información
Segunda mascletà del Concurso Ciutat de Castellón, en el recinto del primer Molí de Castellón.
Hoy disparaba pirotecnia Gironina. 140 kilos de pólvora y un calibre de 75 mm.
Se notaba que era día laborable por la asistencia de público que, aún así, era abundante.
En la zona de invitados, el alcalde de Valencia, Joan Ribó, acompañado por sus compañeros de Compromís, Verónica Ruiz y Enric Porcar.
Casi al mismo tiempo llegaba la alcaldesa de Castellón, Amparo Marco, acompañada por el concejal Rafa Simó. Mini cumbre de alcaldes en tono festivo antes del disparo.
A las 14:00 horas las reinas, Carla Bernat y Lucía Burguete, acompañadas por la concejal de Fiestas, Sara Usó y el alcalde de Valencia, Joan Ribó, prendieron la mecha de la traca inicial.
Comenzaba el espectáculo.
En su diseño fue una mascletà clásica, con un inicio de disparos aéreos acompañados por carcasas en el suelo que marcaban los tiempos.
Una combinación clásica, con ráfagas digitales, que establecían el ritmo, cada vez más acelerado, cada vez más impactante.
Fue una mascletà bien medida que acabó por entrar en un terremoto fuerte. Un terremoto en el que Gironina jugó con el impacto de los truenos y los efectos aéreos para incrementar su efectividad.
Y cuando el público pensaba que había llegado el final, volvió el fuego aéreo con un descenso de la intensidad... Volvía a comenzar la cuenta atrás. Y de nuevo, fuego intenso de menos a más para enlazar con un nuevo terremoto, más sonoro y espectacular, en un ritmo de llamada respuesta entresuelo y cielo. Una ejecución espectacular.
Según el pirotécnico, el resultado fue el esperado, se cumplieron objetivos.
“Hay poco que inventar en pirotecnia pero hemos intentado combinar con fuego aéreo y fuego terrestre todo lo que ha sido el final”, Confirmaba también el uso de mucho fuego aéreo “porque el lugar lo agradece”. Ortega definía de esta manera el disparo: “El cuerpo de la mascletà es un cuerpo tradicional, lo que si se incrementa es el tema de las secuencias digitales de principio y la secuencia final que ha sido a base de truenos y a base de la pantalla de multicolor”. “Yo entiendo una mascletà de esa forma, ir ‘in crescendo’ hasta un punto de aún aumentarlo un poco más”.