Vicente Blay Casino Serra. Presdente de NNGG en Castellón y portavoz adjunto del PP Almassora
Aquel que me conoce sabe que si estoy en política es, sobre todo, por y para Almassora. Mi pueblo y los almassorins son lo que más me ocupa y me preocupa aunque, hace más de tres años, me topé por el camino con un regalo de esos que jamás te esperas y que vino cargado de responsabilidad pero, especialmente, de realidades ilusionantes.
Porque sí, Nuevas Generaciones y sus afiliados es eso, un regalo. Bueno, es incluso algo más, una familia. Un grupo de amigos unidos bajo unas mismas siglas, empujados por unos mismos ideales y que, sobre todo, comparten la pasión que desprende el proyecto que más se asemeja a los castellonenses, el del Partido Popular.
Y es que sí, eso es lo que me he encontrado en los últimos años en cada acto, cada reunión, cada renovación o, sencillamente, tras cada whatsapp de un amigo de nuevas; ilusión por formar parte de la organización juvenil más grande de la provincia y, sin lugar a dudas, la que mejor puede responder a las necesidades y demandas de los jóvenes castellonenses.
Por eso, como presidente provincial de NNGG no he podido más que sentir orgullo y admiración por todos aquellos que, sin más recompensa que la de defender unos ideales y portar con orgullo el carnet del PP, hacen grande cada día este proyecto y lo defienden sin ambages. En la universidad, el bar o con los amigos. Si el Partido Popular (y NNGG) es grande es, justamente, gracias a aquellos que enarbolan su bandera espoleados por el convencimiento de que este es el proyecto que merecen y necesitan aquellos que más quieren.
Porque por desgracia, a día de hoy en España ser joven significa liderar el desempleo en Europa y, por eso, los jóvenes necesitan a NNGG y al PP. Por eso y porque, ahora, por culpa de la incapacidad socialista, ser joven en España implica no poder emanciparte. No en vano, a finales de 2020, tan solo un 15,8% de los jóvenes menores de 29 estaban emancipados, la peor cifra desde el año 1999. Y sí, esa desgraciada realidad solo la puede solucionar las políticas del PP y NNGG.
Y es que la izquierda quiere una juventud sumisa, dependiente, sin oportunidades y sin espíritu crítico. Una que no le moleste y siga sus directrices. Una que, sin un horizonte de oportunidades, acabe necesitando a 'papá Estado'. Pero no, la izquierda no entiende que las nuevas generaciones (en todos los sentidos) quiere más. Exige más. Y, sobre todo, con las herramientas y los recursos a su disposición, merece más. Merece al PP y sus políticas de crecimiento, empleo y libertad.
Por eso, el DNI me dice que ya va siendo hora, que la edad no perdona y que uno ya no es de NNGG pero, ¿sabes qué DNI? mientras pueda yo presumiré orgulloso de NNGG y del PP. No puede ser de otro modo así que sí, gracias a ti NNGG.
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