El beneficio ordinario se situó en 788 millones
El margen de intereses creció un 5,5% y el margen bruto se incrementó un 11,3%, después de que los ingresos por comisiones aumentaran un 25,3%, todo ello sin incluir a BMN en 2017. La ratio de capital CET1 fully loaded se situó en el 12,51%, tras aumentar 56 puntos básicos en el ejercicio, y generarse casi 800 millones de capital. Los activos no rentables (riesgos dudosos y adjudicados brutos) se redujeron en 6.000 millones de euros, más del doble de lo previsto en el Plan Estratégico. Bankia captó 120.576 clientes nuevos en el año e incrementó en 103.000 la base de usuarios con los ingresos domiciliados. Las nuevas formalizaciones de hipotecas crecieron un 6%, al tiempo que tanto las de crédito al consumo como las de financiación a empresas aumentaron el 13%. El 45,4% de los clientes del banco ya son digitales. Por esta vía se realizaron el 25,8% de las ventas en diciembre
Castellón Información
Bankia obtuvo un beneficio atribuido de 703 millones de euros en 2018, lo que supone un incremento del 39,2% respecto a 2017. En términos ordinarios, el beneficio se situó en 788 millones, lo que supone un descenso del 3,4% respecto a los 816 millones ganados en el ejercicio anterior.
El presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, ha destacado que el año 2018 ha sido, desde el punto de vista estratégico, "muy importante para nosotros porque hemos integrado a BMN en un tiempo récord y de forma magnífica, y eso nos abre enormes posibilidades de cara al futuro", y ha añadido que la fusión "nos ha proporcionado ya un incremento de nuestra base de clientela".
En este sentido, ha manifestado que el dividendo por acción con cargo al ejercicio 2018 crecerá en un 5%, con lo que, "a lo largo de estos años, desde Bankia hemos devuelto más de 3.000 millones de euros de ayudas".
Goirigolzarri ha mostrado, además, gran confianza en la transformación de la entidad en el año que acaba de iniciarse. "Entramos en el año 2019 con una nueva organización. Una organización pensada para el futuro, una organización mucho más ágil y mucho más ambiciosa. Y eso, desde luego, nos va a dar resultados en el corto, pero también en el medio y largo plazo".
Por su parte, el consejero delegado de la entidad, José Sevilla, ha puesto en valor que "a lo largo de 2018 hemos crecido en los segmentos clave de nuestro negocio, como el crédito al consumo y la financiación a empresas, en los que hemos aumentado las formalizaciones e incrementado nuestra cuota de mercado".
Sevilla ha subrayado que se cierra un año "muy importante en todo lo referente a sanidad del balance y al crecimiento de nuestra ratio de capital, que alcanzará el 12,51% cuando se cierren las transacciones en curso, lo que nos mantiene como una de las entidades más solventes del sector".
Resultados
El ejercicio 2018 estuvo marcado de nuevo por un entorno de tipos de interés extraordinariamente bajos, por lo que el banco centró su gestión, por un lado, en mejorar las dinámicas de negocio con el objetivo de incrementar los ingresos actuales y sentar las bases para aumentarlos aún más en el futuro, y, por otro, en acelerar la reducción de activos problemáticos y la obtención de sinergias tras la fusión con BMN con el objetivo de anticipar gran parte de los ahorros de costes contemplados en el Plan Estratégico.
Durante 2018, Bankia elevó un 5,5% el margen de intereses, hasta 2.049 millones de euros (no obstante, de haberse incluido a BMN en la cuenta de resultados de 2017, esta línea caería un 9,6%). Los ingresos por comisiones se incrementaron un 25,3% (3,4% en comparación homogénea) y los resultados por operaciones financieras aumentaron un 11,5%, lo que permitió que el margen bruto avanzara un 11,3% (cae un 6,3% con BMN) y se situara en 3.368 millones.
El margen bruto de clientes creció hasta el 1,58%, nivel que se equipara con el logrado en el primer trimestre de 2017 y que, con anterioridad, no se conseguía desde la segunda mitad de 2013. Esta cifra fue cinco puntos básicos superior a la del último trimestre de 2017, crecimiento que estuvo motivado por un menor coste de los depósitos y un ligero aumento del rendimiento de los créditos.
Los gastos de explotación crecieron un 20,7% por la integración de BMN, pero en perímetro homogéneo descendieron un 4,3% gracias a la aceleración de la captura de sinergias tras la fusión, que ascienden ya a 130 millones de euros, frente a los 66 millones que se preveían para este momento. Con ello, el margen antes de provisiones subió un 1,4% (-9,1% en proforma), hasta 1.498 millones.
Las dotaciones ordinarias de crédito y adjudicados se elevaron a 437 millones, un 2,5% menos que el ejercicio anterior, lo que permitió reducir cinco puntos básicos, hasta el 0,18%, el coste de riesgo recurrente. De manera adicional, se realizó una dotación extraordinaria de 85 millones después de impuestos por la venta de una cartera de activos improductivos de un tamaño de 3.070 millones en el momento del acuerdo. A cambio, esta operación permitirá ahorrar 200 millones de euros en los tres años posteriores a su cierre.
De esta forma, el beneficio ordinario ascendió a 788 millones de euros (un 3,4% menos), que queda en 703 millones si se resta la provisión extraordinaria por la venta de carteras (un 39,2% más que los 505 millones del año pasado, cuando se hizo un cargo de 312 millones para la fusión).
Aumento del dividendo por acción
Con estos resultados, el Consejo de Administración propondrá a la Junta General de Accionistas elevar un 5% el dividendo por acción, hasta los 11,576 céntimos (11,024 céntimos en 2017). Así, la cuantía total que se abonará a los accionistas de Bankia ascenderá a 357 millones de euros, frente a los 340 millones del ejercicio precedente. El pay-out alcanza así el 50%.
Con la participación actual del 61,4% que tiene el FROB en Bankia, este dividendo supondrá un nuevo avance en el proceso de devolución de las ayudas por importe de 219 millones de euros. Así, el total de las ayudas reintegradas tras realizarse el pago, que está previsto en abril, ascenderá a 3.083 millones de euros, de los que 961 millones corresponden a los cinco dividendos abonados desde 2014.
Mejor calidad del balance y más solvencia
Uno de los principales esfuerzos realizados por el grupo durante el ejercicio 2018 fue en la mejora de la calidad del balance, tanto en la reducción de los activos dudosos como en los adjudicados. En este sentido, el banco disminuyó en 6.000 millones los activos improductivos (NPA) en el año, que se situaron en 10.900 millones, frente a los 16.900 millones del año anterior. Esto supone que se ha conseguido más que duplicar el objetivo marcado de reducir 2.900 millones al año durante los tres años del Plan Estratégico.
Dentro de la reducción de activos improductivos, 3.702 millones correspondieron a la reducción de dudosos, que quedaron en 8.416 millones, lo que equivale a una tasa de morosidad del 6,5%, y supone 2,4 puntos menos que hace un año.
Los otros 2.300 millones de caída de NPA se debieron a la disminución de los activos adjudicados, que quedaron en 2.462 millones. Además de la gran operación de venta de activos, Bankia se desprendió de 13.300 unidades en ventas orgánicas, por importe de venta de 646 millones, un 7,2% más que un año antes.
En términos de solvencia, Bankia ha cerrado el ejercicio 2018 con una ratio de capital CET1 fully loaded del 12,51%, que recoge el efecto de la venta de carteras de activos improductivos y la operación de reorganización de bancaseguros. Esto supone un incremento de 56 puntos básicos respecto al ejercicio anterior y generar 775 millones de euros de capital en el año.
Si se incluyen las plusvalías de la cartera de deuda soberana a valor razonable, la ratio CET1 fully loaded es del 12,62%. La ratio total solvencia ascendió al 16,34%, lo que supone un incremento de 161 puntos básicos en el año.
Bajo la métrica phase in, que es la exigida desde un punto de vista regulatorio, la ratio de capital CET1 se sitúa en el 13,80%. Esta cifra computa las plusvalías latentes de la cartera de deuda disponible para la venta y no incluye la venta de la cartera de activos improductivos. El exceso de capital sobre los requerimientos regulatorios SREP es de 524 puntos básicos.
En el apartado de liquidez, Bankia también consiguió una mejora. Finalizó el pasado ejercicio con una ratio de créditos sobre depósitos del 91,2%, frente al 93,9% del año anterior.
Más clientes, más vinculados y más digitales
La actividad del ejercicio estuvo muy influida por la fusión de Bankia y BMN, y precisamente por ello se registró un año de menos a más en el dinamismo comercial. Finalmente, el banco logró alcanzar y elevar la velocidad de años anteriores e incrementó la base de clientes nuevos y vinculados; concedió más hipotecas, créditos al consumo y financiación empresarial; registró crecimientos en negocios de valor añadido, como los medios de pago y la gestión de activos, y observó cómo aumentaba el ritmo de digitalización de los usuarios.
El banco elevó en 120.576 el número de clientes durante el ejercicio y aumentó la vinculación, ya que al término del año contaba con 103.000 clientes más con los ingresos domiciliados.
En la base de clientes, se produjo, además, un aumento del ritmo de digitalización, de manera que, a final de año, el 45,4% de los clientes eran digitales y el 25,8% de las ventas se realizaron por esta vía, frente al 15,7% del año precedente. Destacar que el 31,4% de las concesiones de crédito al consumo se hicieron de forma digital, al igual que el 19,4% de la contratación de planes de pensiones o el 12,6% de fondos de inversión.
Además, la mitad de los clientes del banco cuentan ya con un gestor personalizado. De ellos, 755.000 clientes son atendidos en la actualidad por un asesor personal a distancia, a través del servicio 'Conecta con tu Experto'.
Crece la concesión de financiación
En cuanto a la actividad, las formalizaciones de hipotecas crecieron un 6%, hasta 2.928 millones de euros; en tanto que las de crédito al consumo aumentaron un 13%, hasta 2.286 millones, y las de financiación empresarial se incrementaron un 13%, hasta 14.484 millones. De esta forma, el saldo de crédito al consumo subió un 14,1% y el de empresas, un 4,4%.
Del mismo modo, el banco registró avances significativos en el negocio de los medios de pago. La facturación de los terminales punto de venta (TPV) creció un 15,2%, y los pagos de clientes con tarjeta en comercios aumentaron un 12,8%. Todo ello se tradujo en un nuevo crecimiento en las cuotas de mercado, que se situaron en el 12,39% en el caso de los TPV y en el 12% en la de compras con tarjeta.
Por el lado de los recursos de clientes minoristas, finalizaron el año con un descenso del 0,3%, hasta 147.149 millones de euros. En esta evolución, destacó el comportamiento de los fondos de inversión, que, en un año muy complicado de mercados, incrementaron la cuota en 17 puntos básicos, hasta el 6,55%.