La consellera, Salomé Pradas, ha visitado las obras junto a los alcaldes de Peñíscola y Benicarló
La Conselleria de Medio Ambiente, Agua, Infraestructuras y Territorio ha comenzado los trabajos para la ejecución de la futura rotonda de la N-340 con el Camí de la Ratlla entre Peñíscola y Benicarló, una actuación que, según ha explicado la consellera Salomé Pradas, “supondrá una importante mejora de la seguridad vial en un cruce que registra una gran densidad de tráfico”.
Pradas, que ha visitado las obras junto a los alcaldes de Peñíscola y Benicarló, Andres Martínez y Juan Manuel Cerdá, respectivamente, ha indicado que la carretera transferida por el Ministerio a los ayuntamientos “constituye uno de los viales de acceso a la franja costera y requería una solución urgente para resolver los problemas de tráfico y de seguridad vial”.
La consellera ha destacado que este proyecto “es una reivindicación histórica que por fin este Consell va a atender tras años de olvido y uno de los primeros compromisos que asumí como consellera”. Además, ha añadido que, tras estos meses de trabajo “hemos logrado cumplir nuestra promesa de desbloquear el proyecto y darle celeridad necesaria para garantizar la seguridad de los viales y de la accesibilidad a la zona comercial e industrial de sus inmediaciones”.
La responsable de Infraestructuras ha avanzado que actualmente se está finalizando el movimiento de tierras, las excavaciones y rellenos y la previsión de ejecución de esta actuación es el mes de abril.
El coste estimado de la glorieta, que tendrá un radio de 28 metros, con una calzada de 9 metros y unos arcenes de 1,5 metros es de unos 600.000 euros.