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jueves, 21 de noviembre de 2024 | Última actualización: 18:04

'Invencible': La crudeza de la heroicidad

Tiempo de Lectura: 5 minutos, 39 segundos

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Daniel Bernat. Graduado en Derecho y experto en series.

A lo largo de los últimos años, los espectadores que consumimos productos relacionados con el mundillo de los superhéroes nos hemos acostumbrado al “buenismo” de las películas de Marvel Studios; incluso hay otros ejemplos, como los héroes que se han adaptado en la pequeña pantalla cogiendo como inspiración las viñetas de la editorial DC Cómics que también responden a la idea de un bien común que preservar por encima de todo. Por lo tanto, cuando aparecen ficciones que se desmarcan, aunque sea un poco, de esa tendencia, inmediatamente volvemos nuestra mirada a lo que nos pueden ofrecer. Amazon Prime Video parece haber captado el mensaje, porque ya son dos series que no responden a lo típico: 'The Boys' (altamente recomendable), y de la que os vengo a hablar hoy, 'Invencible'.

La historia nos presenta a un joven americano, Mark Grayson, que sueña con poder llegar a ser lo que es su padre Nolan, el héroe más poderoso de la Tierra, también conocido como Omni-Man. A punto de llegar a la edad adulta, el chaval está preocupado porque sus poderes todavía no se han manifestado, algo que preocupa a su padre, ya que no es lo normal en su raza, los viltrumitas. Nolan Grayson, alias Omni-Man, llegó a nuestro planeta años antes desde un planeta llamado Viltrum, y se quedó tras conocer a la que es actualmente su mujer, Debbie, y juntos criaron a su familia. Pero su identidad superheroica no es un secreto para ellos, como podríamos ver en otras producciones, recurso bastante habitual en muchas de estas, la verdad. Aquí ya vemos un factor diferencial de “Invencible”, porque nos transmite una sensación graciosa de costumbrismo, ya que Nolan, con sus poderes, les trae en cuestión de segundos una pizza riquísima recién hecha en Roma, o un vino exquisito de Francia; tan normal como cuando nosotros vamos al súper y cogemos la comida de la semana, ellos lo tienen asimilado y es su día a día.

Pero esto es una nimiedad comparado con lo que llega a ofrecer en su primera entrega (ya finalizada). Haré un pequeño y ligero “spoiler”: Mark ya obtiene sus poderes en el piloto, y a partir de ahí decide emprender su camino como Invencible, su alter ego superheroico, que guarda cierta gracia que no desvelaré, pero de la que seguro os percataréis si comenzáis a verla. A partir de ahí, el reciente estreno de Amazon Prime Video nos va presentando algo a lo que no estamos habituados, o al menos, no todos los espectadores: la crudeza y el lado más duro de salvar la vida de alguien. Seguro que muchos tendréis en mente combates épicos entre héroes y villanos en muchas producciones, y bastantes de ellos tienen lugar en ambientes urbanos, con viandantes que simplemente pasaban por allí, ajenos al conflicto entre este tipo de seres. El foco no suele estar en ellos, sino en las tortas que se reparten los personajes en cuestión, con alguna que otra intervención en el último minuto y para lucirse del héroe o heroína de turno, salvando a la víctima desvalida. Aquí no. Si hay una invasión alienígena, la gente muere. Si se destruye un edificio, aplasta a cientos de personas. Si quieren mostrarnos a un pobre inocente partido en dos por un ser ultra poderoso, pues te lo enseñan. Y muchas otras más salvajadas que pierden gracia si las menciono.

También Mark tiene su ración de contratiempos. Podemos ver en él cosas de Peter Parker (Spider-man), incluso de Clark Kent (Superman), ya que el autor del cómic en el que se basa esta serie, Robert Kirkman (autor de los tebeos de “The Walking Dead”), es un fan acérrimo del género, y llegó a trabajar una temporada en Marvel. Nuestro protagonista experimenta cosas que otros héroes han vivido a lo largo de los años en las páginas de los tebeos, para bien y para mal. Pero todo forma parte de su proceso para llegar a ser una figura en la que la gente de la Tierra pueda confiar. Todo ello compaginado con su vida personal como humano corriente, no exenta de algún que otro lío por la dualidad que os comentaba antes de mantener una doble identidad, que siempre trae problemas.

Quisiera destacar un detalle importante: es una serie de animación. ¿Por qué digo esto? Porque sé de primera mano que las ficciones animadas muchas veces caen en los prejuicios de gente que lo reduce a comentarios como “yo no veo dibujos animados”, o derivados. A lo largo de mi dilatada experiencia como consumidor de series, os puedo asegurar que hay historias fantásticas en animación que no tienen absolutamente nada que envidiar a producciones de acción real (de carne y hueso, para que nos entendamos). Por destacar algunos ejemplos, diré el anime “Ataque a los Titanes” (en Amazon Prime Video tenéis sus tres primeras entregas completas), "Clone Wars” y “Rebels", dos series de la saga Star Wars (que están íntegras en Disney Plus), o “Love, Death and Robots" (que consta de dos temporadas, la última de ellas lanzada en Netflix el día 14 de mayo). Eso sí, no pondría la animación de “Invencible” por encima de ninguna a las que me he referido. Cada una tiene su estilo, pero la protagonizada por Mark Grayson me falla en algún que otro momento, y diría que cumple sin más; ahora bien, cuando tiene que lucir, luce a lo grande. Es más, si sois fans de Bola de Dragón, alguna de las peleas que mantienen los personajes durante la entrega recuerda a las de Goku y compañía.

'Invencible' ha sido una de las sorpresas en el panorama seriéfilo en este 2021, tanto que Amazon Prime Video la ha renovado por dos entregas más, así que todavía tendremos serie durante unos años más. La ficción tiene una retahíla de personajes y tramas de calidad, momentos de auténtica locura que no dejan indiferente a nadie, y la promesa de que esto no ha hecho más que empezar. Si todavía no estáis convencidos, yo os diría que vierais su primer capítulo; os garantizo que querréis ver más, y todo lo que viene después es mejor y la sensación que te deja, como digo, es que solo estás ante la punta de un iceberg de proporciones gigantescas.