Luis Andrés Cisneros.
En primer lugar quiero desear a todos mis lectores, un Feliz Año 2021, en mi vuelta a la agradable tarea de transmitirles mis pensamientos y mis ideas a través de este medio digital.
Desde el inicio de los tiempos todos y cada uno de los que han poblado la Tierra se han preocupado de buscar cual sería la mejor inversión o aquella que les reportaría más ventajas para ganar más dinero, más poder, más riqueza y, por encima de todo, mayor dominio sobre el resto de los mortales.
Para lograr sus objetivos, a lo largo de la Historia, y salvo que los historiáfobos censores de la Historia digan lo contrario, recurrieron a toda clase de estratagemas, desde la guerra al dominio tecnológico, pasando por hambrunas, genocidios, asesinatos y otras lindezas.
Pero, hete aquí, que en el Siglo XXI descubren, y sobre todo en España, que todo era mucho más sencillo: sólo había que mentir, y contra más veces, mejor, dándose la siguiente paradoja: ‘puedes mentir, a continuación decir lo contrario y así continuamente, sin que pase absolutamente nada’.
Ejemplos los tenemos a montones, y en este último año se ha multiplicado de manera exponencial. Tenemos el modelo icónico de mentiras compulsivas; ese personajillo responsable del control de Emergencias en nuestro país, con nombre de vino barato, Don Simón, que ha ido cambiando de discurso mentiroso día a día y, además con una sonrisa sarcástica en su rostro cuando estaba hablando de seres humanos muertos.
Pero, ahí está, arropado por el falso Doctor Sánchez, y toda la corte de gañanes de este gobierno social-comunista que nos chupa la sangre (Por cierto un gran logro de Mariano Rajoy cuando lo nombró para el cargo). Están aupados en una montaña de burdas mentiras, pero que les sirven para conseguir sus deleznables objetivos que no son otros que acabar con España, destruir la familia, nuestra historia.
Pero lo más triste es que saben que son marionetas del Nuevo Orden Mundial, por eso el falso Doctor se ha reunido frecuentemente con George Soros al objeto de recibir las oportunas órdenes para seguir manejado y dirigido por los espurios intereses de un reducido grupo de oligarcas sin escrúpulos.
Pero, parece que a la gente le gusta que la engañen, que le mientan, que se burlen de ellos ya que, contra todo pronóstico siguen recibiendo votos de los electores. Claro que si tenemos en cuenta quienes son los que encargan las encuestas, cualquier parecido con la realidad puede ser mera coincidencia. Además, salvo contadas excepciones, muy contadas, los medios donde se publican pertenecen también al aparato de la oligarquía dominante.
O bien una mayoría de los españoles está anestesiada o bien son muchos los ‘estómagos agradecidos’ que no quieren perder sus prebendas o, lo más triste, que busquen so coto de comodidad y tengan miedo a luchar por su libertad.
No hace mucho un buen amigo mío me hizo la siguiente reflexión:
‘Antes un preso buscaba escaparse para buscar la libertad, ahora piensa en tener las mayores comodidades en la cárcel’.
Y no le falta razón, el hedonismo, la conformidad, la comodidad y la cobardía son los elementos que adornan a la civilización occidental. Aunque esto no sólo es de nuestra época, ya en pleno dominio del Frente Popular, allá por los años 30 del pasado siglo, ya dijo el político socialista Julián Besteiro que, sus compañeros en el régimen que se cargó la República, estaba sustentado en ‘Un Himalaya de mentiras’.
Todo ello se ha hecho posible por los nefastos gobiernos que hemos tenido, desde Suárez, hasta nuestros días, salpicado todo ello por una serie de políticos de baja estopa y con un hedonismo exagerado, donde sólo ha primado el interés personal despreciando, de mala manera, el general. Unido a una Enseñanza pésima y en la que sólo importa que los alumnos pasen de curso, sin importarles los conocimientos que adquieren. Sólo cuentan los votos que puedan recolectar.
Llevan años mintiendo, y cuanto más lo hacen más les votan. Pero no se inquieten y lo hemos visto en los últimos años; votar a PP, PSOE, C’s o Podemos nos conduce al mismo fin. Como dice ese axioma español ‘entre bomberos no nos pisamos la manguera’. De momento, parece que VOX es la única alternativa a no desaparecer bajo el tsunami del Nuevo Orden Mundial.
Lo asombroso es que la Mentira, sea rentable y esté bien vista. ¡¡Quién nos lo iba a decir hace pocos años¡¡