El alcalde de Vila-real afirma que “hemos tenido que hacer frente en solitario a los problemas de la ciudad sin contar con Diputación y Generalitat”
El alcalde de Vila-real, José Benlloch, es crítico con el comportamiento que han tenido con la ciudad Generalitat y Diputación. “Algunos nos llamaban de broma la aldea gala, porque estábamos aislados en el mapa. Al principio nos consideraron un accidente y esperaron a que nos cayéramos. Pero hemos demostrado que hay otros modelos para hacer las cosas, que somos un referente y un laboratorio de lo que podría ser el Gobierno de Comunitat Valenciana”, dice Bennlloch. Pero lo cierto, indica, “es que hemos salido adelante y prácticamente sin ayudas; de los 8,5 millones que aporta Vila-real a las arcas de la Diputación, lo más que hemos recibido han siso 50.000 euros. Eso y la polémica de las entrada de toros, marcan un antes y un después en el municipio vila-realense.
E.Molina/X.Tirado/Castellón Información
Vila- real es como un punto discordante en el mapa. Tiene 52.000 habitantes, es el municipio más numeroso después de Castellón, aunque para algunos, Vila- real es el verdadero referente de la provincia porque es también un referente industrial, un referente agrícola, un referente en cuanto a ciudad de servicios, y un municipio con identidad propia, que presenta contradicciones muy significativas con el resto de la provincia. Tiene equipo en Primera División de futbol que ha hecho que la provincia de Castellón se conozca en todo el mundo con el sobre nombre de Vila- real.
Y en la actualidad, como lo define su alcalde, José Benlloch, son la antítesis del dominio político en la provincia; son como la aldea gala de los comics de Asterix y Obelix, que se mueve contra corriente en un mundo en el que solo quedan ellos; y, sin embargo, han demostrado que pueden salir adelante.
Y la cosa tiene más bemoles de lo que parece. Ellos fueron los que hace años decidieron combatir una crisis agrícola con nuevas alternativas, industriales. Son el vértice del triángulo provincial de la cerámica de Castellón, que hoy en día es una de las principales productoras del mundo. Y con la burbuja de la construcción han vuelto a demostrar, que pueden sufrir la crisis más que ningún otro municipio y que pueden volver a surgir de sus cenizas para seguir siendo competitivos.
“Al principio, pensaban que habíamos sido un accidente y que no duraríamos más de un año”
Pero lo que más diferencia a Vila-real en este momento del resto de la provincia y la Comunitat Valenciana es que, contra todo pronóstico, han sabido gobernar con un cuadripartido de izquierdas durante tres años; que lejos de hundirse está consiguiendo rendimientos positivos para la población, mientras el Partido Popular campa a sus anchas por el resto de la provincia y de la Comunitat.
José Benlloch, alcalde de Vila-real, señalaba en este sentido: “Yo lo que creo es que hemos sido capaces de demostrar algo que a mucha gente le duele y que a los adversarios políticos -no los considero enemigos, porque son compañeros de democracia, que es el Partido Popular- sí que les preocupa. Y es el que ellos han intentado vender que hay solo un modelo para salir de la crisis económica, y que está basado en recortar y en echar por la borda del barco a unos cuantos ciudadanos, a una parte de la sociedad…”
“Nosotros… indica, “sí que creo que el gobierno que presido, en principio era como el demonio de esta Comunitat para el PP. Para ellos era un tripartido, o cuadripartido con gobiernos de izquierdas, el que era imposible el diálogo, que era imposible el gestionar adecuadamente y cumplir con las expectativas, para ellos; y que era imposible salir de la crisis sin tirar a unos cuantos por la borda…”
La pesadilla del PP y la Joya de la Corona del PSPV-PSOE
“Y esto, sí que se ha demostrado en esta ciudad de que no es así; han sido tres años de estabilidad absoluta en el gobierno, sin ningún conflicto ni público ni privado, y lo reconozco, con mucho esfuerzo de diálogo y consenso continuado, y además, haciendo políticas en las que somos, en estos momentos, un referente, felicitándonos incluso el presidente del Gobierno, el Señor Rajoy, por el cumplimiento de las normas de estabilidad, de las cuatro reglas, cosa que el resto de los pueblos de esta provincia, no pueden decir, ni siquiera la capital”.
Y es que, como afirma José Benlloch, no se podía creer que llegaran a buen puerto, al menos durante los primeros meses. Lo que constituía una excepción, un accidente, ha pasado a ser una amenaza.
El cuadripartido de Vila-real, lejos de presentar vulnerabilidades, ha demostrado ser mucho más sólido de lo que se pensaba. Y el alcalde de la ciudad ha sabido sacarle partido a la situación y se presenta ahora mismo como la pesadilla del PP y la Joya de la Corona del PSPV-PSOE.
“Somos el laboratorio de lo que podría ser la Comunitat Valenciana”
“Bueno, mire, este fin de semana he estado con la presidenta de Andalucía, Susana Díaz, que me invitó al Rocío, y hemos estado unos días por allí… me comentaba y estábamos hablando de la situación de Vila-real… porque realmente se conoce en toda España y… es verdad que me he convertido un poco en un referente dentro del partido y me piden mucha opinión para todos los temas… fundamentalmente somos un poquito el laboratorio de lo que puede ser en el futuro la Comunitat Valenciana, y yo estoy escribiendo una guía, sobre lo que es el gobierno… porque Vila- real… algunos nos llamaban como una broma, la aldea gala, rodeados por un partido distinto, que no nos pone las cosas nada fáciles, que no nos ha ayudado lo más mínimo”.
“Gobernar Vila-real es, señala José Benlloch, saltando las diferencias, como gobernar un pequeño estado de una pequeña comunidad. En Vila-real hay agricultura, y por tanto hay agricultores, hay que hablar con ellos y hay que hacer políticas… En Vila-real hay industria, hay que hablar con ellos y hacer políticas; hay comercio… Vila-real es una ciudad de servicios, con el Hospital de La Plana, con el Palacio de Justicia, con Hacienda, con Seguridad Social… es decir, con todos los servicios que pueden prestarse… En Vila-real hay un tejido asociativo muy potente. En Vila- real hay universidad ya, porque la hemos traído nosotros de la Universidad Jaume I, con un acuerdo con ellos, pero ya teníamos la UNED, como un referente importantísimo. Es decir, hay un poco de todo, y por tanto, cuando uno gobierna, tiene contacto con todos los sectores como los puedes tener dentro de una comunidad autónoma… y además, en Vila- real hay cuatro partidos gobernando… y eso es un elemento que sí que ha generado un referente y un modelo distinto”.
Vila-real no figuraba en el GPS de los coches oficiales
Dicho todo esto, José Benlloch denuncia que, después de aquella etapa de escepticismo, donde nadie le echó una mano pensando que durarían poco, Vila-real se ha visto ninguneada en muchos sentidos, tanto con respecto a la Diputación como a la Generalitat.
“Yo he vivido dos etapas. La primera, en la que no teníamos interlocución ninguna con ellos, ni con la Generalitat ni con la Diputación, pese a tener un diputado provincial que lo es gracias al pueblo de Vila- real, y que es el portavoz del Partido Popular de aquí.
En la primera, considero que el PP pensó que lo que había ocurrido en Vila-real era un accidente, que eso era solucionable, que los partidos que habíamos hecho este pacto éramos partidos que no íbamos a aclararnos, que era ingobernable… y por tanto esperaron un tiempo, nos tuvieron a prueba.
Y mientras nos tuvieron a prueba la ciudad fue perdiendo muchas oportunidades y los coches oficiales pasaban por la Nacional 340 y no tenían grabado en el GPS la ciudad de Vila-real. No pude hablar más que en las Cortes, ese es el privilegio que tengo como diputado, de que me tengan que atender, de hablar con ellos, pero como alcalde no. Yo no tengo por qué utilizar mi partido para algo para lo que me han dado la legitimidad los ciudadanos de Vila-real, que es ser alcalde… Esto fue proceso duro de casi un año”.
Luces y sombras con el Gobierno Valenciano
“Posteriormente, añade Benlloch, ha habido luces y sombras. En cuanto al Gobierno Valenciano no tengo quejas de todos por igual. Hay conselleres que yo creo que se han portado muy bien con la ciudad, como el de Justicia, Cabré, fue muy leal con la ciudad. Buscamos una solución de lo que se podía hacer en esos momentos, con toda una situación de crisis económica, para tirar el Palacio de Justicia adelante… Vila-real puso de su parte. De la consellera de Educación, María José Catalá, ahora portavoz del Gobierno, no tengo nada que decir de ella en cuanto a la lealtad institucional, de reunirme siempre que ha hecho falta. Cuando ha podido ha dicho si, cuando no ha podido ha dicho no. Y con la consellera de Bienestar Social digo lo mismo. Hacemos lo que podemos. Nos debe mucho dinero de los servicios sociales, yo lo digo continuamente, pero entiendo también las circunstancias económicas que tiene la Comunitat, y cuál es la prioridad de alguna gente, dentro del Partido Popular, que no creo que sea de ella, que prefiere pagar la Fórmula 1. Y yo lo entiendo, yo soy humano y entiendo que uno recibe una herencia y la tiene que gestionar como puede… pero al menos, lo importante, es que den la cara”.
“El President (Alberto Fabra) que yo creo que tiene una papeleta muy complicada, creo que ha apostado más por su partido que por la institución y por la Generalitat, y a Vila-real, en ese sentido, le ha tenido poco respeto, y lo digo bien claro”.
“Yo he tenido muchas con versaciones con él, incluso privadas, y no le he visto mucho interés, supongo que porque el modelo no es un modelo interesante para él y lo quieren desprestigiar… Y no ha venido a Vila- real oficialmente, cuando yo se lo he pedido en varias ocasiones para interesarse por el problema de los ciudadanos. Ha venido para inaugurar infraestructuras, casi en secreto, y luego invitándome, evidentemente… pero creo que no ha sido muy leal”.
"Las entradas de toros acabaron en los tribunales por culpa de Moliner"
¿En cuanto al presidente de la Diputación, Javier Moliner, pues solamente hace falta ver los hechos? ¿No?
“Yo me llevaba muy bien con el señor Moliner. Me sigo llevando muy bien personalmente, compartimos muchas reuniones en empresas públicas como Reciplasa, que tenemos en común con varios ayuntamientos, y con la Diputación, siempre hemos sido leales con ellos, siempre que nos han pedido algo... Pero evidentemente, me defraudó desde el día en que los responsables del Partido Popular de Vila-real me dicen, a través de una notificación que les hago, que no tengo que pagar unas entradas de toros… ellos son los que lo dicen que no hay que pagarlas. Yo, como lo dicen ellos, que no hay que pagarlas, no las pago. Los técnicos me dicen que no las pague y el señor presidente de la Diputación desoye a sus compañeros de partido, del PP en Vil-rreal, desoye a los técnicos municipales y nos retrae, del dinero público de los ciudadanos de Vila- real, casi 20.000 euros que nos obligan a ir a los tribunales, lo que supone esto de enfrentamiento con la institución y el personal, cosa que tenía muy fácil solución en aquel momento. Si sus compañeros lo decían y los técnicos del Ayuntamiento de Vila-real lo decían, habernos devuelto el dinero y habría sido más fácil y más fluida la relación”.
Discriminación histórica de la Diputación
“Pero tengo que decirle que, realmente la discriminación que sufrimos por parte de la Diputación es histórica.”
“El señor Folgado continuamente se dedica a hacer convenios singulares… con diferentes municipios. Nosotros recibimos, hace tres años, nada, porque nos excluyeron de los Planes de las ciudades mayores de 50.000 habitantes, a Castellón y a Vila-real. El año pasado ya, por la presión que se ejerció y el ridículo que hicieron, porque los ciudadanos de Vila-real aportan 8,6 millones de euros del presupuesto de la Diputación, porque somos 52.000 habitantes y la Diputación se nutre de los impuestos del Estado, que pagan también los ciudadanos y las empresas de Vila-real, y recibimos, el año pasado creo que 50.000 euros, no llega; y este año, 25.000”.
“Si de 8,5 millones de euros que aportan las gentes de Vila-real a la Diputación, recibimos 25.000 y tenemos que estar dando las gracias al señor presidente, además de alguna colaboración que agradezco, de la Imprenta de la Diputación… Yo creo que podría hacerse muchísimo más. Esperamos muchísimo más de esta institución, que para mí es anacrónica y no debería existir; o si existe, tendría que cambiar absolutamente todas sus estructuras y ser otra cosa; no un nuevo gobierno de contrapoder, y lo que es curioso es que al presidente que elijo yo, porque son los alcaldes y los concejales los que lo eligen, y que se convierta en un poder superior. No tiene sentido”.
