La temperatura media, 21.1 ºC, es 0.2 ºC superior que la de la climatología de referencia (20.9 ºC), y la precipitación acumulada ha sido ha sido 1.5 l/m2, que es un 94% inferior que la del promedio climático del periodo 1981-2010 (25.5 l/m2). Se puede decir que el mes ha sido extremo en cuanto a temperaturas, con fresco o incluso frío en la primera mitad, cuando incluso se llegaron a registrar heladas el día 12 y se produjeron récords de temperatura mínima más baja en un mes de junio en algunos observatorios de Castellón. Seguramente, por el recuerdo de los efectos de la ola de calor de los últimos días del mes, la sensación sea que junio ha sido muy cálido
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El mes de junio de 2019 ha sido ligeramente más cálido de lo normal y extremadamente seco en la Comunidad Valenciana. La temperatura media, 21.1 ºC, es 0.2 ºC superior que la de la climatología de referencia (20.9 ºC), y la precipitación acumulada ha sido ha sido 1.5 l/m2, que es un 94% inferior que la del promedio climático del periodo 1981-2010 (25.5 l/m2).
Se puede decir que el mes ha sido extremo en cuanto a temperaturas, con fresco o incluso frío en la primera mitad, cuando incluso se llegaron a registrar heladas el día 12 y se produjeron récords de temperatura mínima más baja en un mes de junio en algunos observatorios de Castellón, lo que contrastó con una extraordinaria ola de calor en los últimos días del mes, que afectó con más intensidad a la provincia de Castellón, donde se superaron gran parte de los registros históricos de temperatura más alta en un mes de junio.
En cuanto a lluvia, el mes ha sido extremadamente seco, el más seco desde al menos 1950, con una cuarta parte del territorio en la que la precipitación de junio ha sido nula y dos terceras partes donde la precipitación ha sido inferior a 1 l/m2.
La ausencia de precipitaciones en junio está muy relacionada con la ausencia de tormentas. Sólo ha habido tres días de tormenta en el mes que dejaron un total de 42 rayos dentro del territorio de la Comunidad Valenciana, que es, con diferencia, el registro más bajo de rayos en un mes de junio.
Junio, que ha sido extremadamente seco, no ha sido una excepción en gran parte de nuestro territorio durante la primera mitad del año 2019. El temporal del mes de abril, que afectó sobre todo a la mitad sur, se puede considerar que ha sido el único episodio de lluvia importante del año. Así, en gran parte del litoral de Valencia, desde Cullera y hacia el norte, y en amplias zonas de Castellón, la precipitación acumulada en los seis primeros meses de 2019 es inferior a la mitad de lo que suele ser normal.
Seguramente, por el recuerdo de los efectos de la ola de calor de los últimos días del mes, la sensación sea que junio ha sido muy cálido, pero la realidad es que gran parte del mes las temperaturas se mantuvieron por debajo de los valores normales. El día 12 fue el más frío, con mínimas por debajo de 2 ºC en localidades del interior de la mitad norte. En los observatorios provinciales de València y Castellón, no se registraba una mínima tan baja a estas alturas del mes de junio desde hace más de dos décadas.
El contraste térmico del mes, más notable en Castellón, queda manifiesto en el comentario que envió Melcior Rovira, el observador meteorológico de Atzeneta del Maestrat, estación con datos ininterrumpidos en el mismo emplazamiento desde 1944: “en un mismo mes hemos batido récord de máxima absoluta y mínima absoluta en junio. El día 12 hicimos 4'5ºC, mínima absoluta por debajo del anterior récord de 5ºC del año 1966; y el día 29 hicimos 40ºC, récord de máxima por encima de los 39ºC del 15 de junio de 2003”.
Térmicamente, el fenómeno más singular se produjo en los últimos días del mes, cuando una extraordinaria ola de calor que afectó a gran parte de la mitad norte y al nordeste de la Península se dejó sentir en la Comunidad Valenciana los días 28 y 29, con registros que son efemérides de temperatura máxima en un mes de junio en todos los observatorios de la provincia de Castellón, salvo en los del extremo sur, y en algunos de ellos, como los de Morella, Vilafranca o Atzeneta del Maestrat, con series de datos cuyo inicio se remonta a la primera mitad del siglo XX, las efemérides se superaron dos días consecutivos.
En general, el mes ha resultado algo más frío de lo normal en observatorios del litoral y algo más cálido en el interior, sobre todo en el norte de Castellón, donde las anomalías han sido superiores a 1 ºC. En las capitales y en otros observatorios seleccionados, el balance térmico del mes de junio es el que se indica en la tabla siguiente.
La precipitación acumulada ha sido ha sido 1.5 l/m2, que es un 94% inferior que la del promedio climático del periodo 1981-2010 (25.5 l/m2) y, globalmente, califican al mes como extremadamente seco, el más seco desde al menos 1950.
Algunos datos de la extrema sequedad de junio:
En una cuarta parte del territorio la precipitación de junio ha sido nula y en dos terceras partes la precipitación ha sido inferior a 1 l/m2.
En los observatorios provinciales de Castellón y de Valencia, la precipitación en junio ha sido 0, en el de Alicante, 0.2 l/m2.
En el observatorio de València, con datos desde 1864, sólo ha habido siete meses de junio en los que no haya llovido nada, tres en el siglo XIX: 1869, 1871, 1879; tres en el siglo XX: 1919, 1931, 1950, y 2019 en el siglo XXI. Por tanto, no había un mes de junio tan seco en la ciudad de València desde 1950.
- En el observatorio de Castellón, con datos desde 1911, sólo en junio de 1923 y en junio de 2019 la precipitación acumulada ha sido 0. Por tanto, no había un mes de junio tan seco en la ciudad de Castelló de la Plana desde 1923.
- En el observatorio de Atzeneta del Maestrat, con datos desde 1944, sólo en junio de 1959 y en junio de 2019 la precipitación acumulada ha sido 0.
En el observatorio de Morella, con datos desde 1916, se han acumulado 1.2 l/m2 y ningún día de tormenta. Sólo en 1916 llovió menos en Morella en un mes de junio: 0.8 l/m2.
La ausencia de precipitaciones en junio está muy relacionada con la ausencia de tormentas. Sólo ha habido tres días de tormenta en el mes que dejaron un total de 42 rayos en zonas dispersas del interior y en el Baix Maestrat.
Junio de 2019 es, con diferencia, el de menos rayos registrados dentro de nuestro territorio. Aunque normalmente en zonas litorales y en la mitad sur las tormentas no son muy frecuentes en junio, sí que lo son el interior de la mitad norte, y este pasado mes, en esa zona, la actividad convectiva fue muy baja.
Sólo en zonas aisladas del interior y nordeste de Castellón se ha superado ligeramente los 10 l/m2 de acumulado mensual y, como se ha mencionado antes, en una cuarta parte del territorio no ha llovido.
En relación a lo que suele ser normal en cada punto, el mes de junio ha resultado ha sido muy seco en la mitad del territorio, seco en una cuarta parte y extremadamente seco en la otra cuarta parte.
Junio, que ha sido extremadamente seco, no ha sido una excepción en gran parte de nuestro territorio durante la primera mitad del año 2019. El temporal del mes de abril, que afectó sobre todo a la mitad sur, se puede considerar que ha sido el único episodio de lluvia importante del año. Así, en gran parte del litoral de Valencia, desde Cullera y hacia el norte, y en amplias zonas de Castellón, la precipitación acumulada en los seis primeros meses de 2019 es inferior a la mitad de lo que suele ser normal (zonas coloreadas en rojo de la imagen siguiente). Mientras, zonas dispersas del sur de Valencia y de Alicante, presentan superávit en este mismo periodo debido a la precipitación acumulada durante el temporal de levante de Semana Santa.