F. F.
Kiko Ramírez, entrenador del Castellón, dijo este viernes que "los jugadores son los únicos culpables en esta remontada del equipo", que ha pasado de coquetear con las plazas de descenso a aproximarse a los puestos de 'play-off' de ascenso a Segunda B. "El vestuario es fuerte, cree en sus posibilidades y se esfuerzan todos al máximo porque hay mucha competitividad", agregó.
Respecto a la reacción de su equipo, dijo que "ha sido una remontada sudada, sufrida y creíble", y destacó que los jugadores siempre han ido a por todas. "Salen a competir y si no pueden ganar en el minuto uno lo hacen en el noventa", dijo el entrenador del Castellón.
Después de sumar tres triunfos consecutivos, Kiko Ramírez dijo que "hemos dibujado el camino a seguir, pero nos queda un trayecto duro por recorrer. Nos estamos haciendo fuertes en casa, que es muy importante. Ahora toca recortar puntos respecto a los de arriba y no perder comba de los cuatro primeros".
Respecto al partido de este sábado a las 16.45 horas en el campo municipal de Benigànim, el entrenador del Castellón dijo que "este encuentro es decisivo, ante un rival complicado. Espero que el equipo saque el orgullo y dé un golpe encima de la mesa. El rival lo está pasando mal, por eso lo considero un partido trampa".