23 personas necesitaron asistencia sanitaria la noche del sábado, ningún caso grave.
Jornada apoteósica la del sábado.
Nada más abrirse las puertas podía palparse en el ambiente la que se avecinaba. No sólo la afluencia de público era notablemente mayor que la del viernes, sino que las vibraciones que desprendían los asistentes eran otras. Había ganas de guitarreo, de corear hitazos, bailarlos... Había ganas de entregarse al cartel, compuesto en principalmente por pop rock británico. Comenzaron a repartir caña los jovencísimos China Rats en el escenario Trident Senses. Seguidamente, Miles Kane se ganó el lleno del Maravillas y se lo puso difícil a los Artíc Monkeys, que pese a ofrecer un directo correcto contó con el respaldo del público. Buena nota tomaron los Kaiser Chiefs, que salieron a escena dispuestos a llevarse el trofeo del sábado. Guitarras potentes, hitazos, y un Ricky Wilson desatado corriendo de lado a lado del escenario o encaramandose a la torre de iluminación hicieron que consiguieran su propósito. Los pocos que no fueron testigo de ese éxito estaban disfrutando de las melodías pop electrónicas de Telepathe, envolventes, deliciosas. La nota mas destroyer salió de las manos de Knife Party. Con su electro house no sólo rompieron suelas sino que por momentos el suelo de la Trident parecía temblar bajo los saltos de tanto fiber sediento de fiesta. Con Svreca gran parte del público resistió bailando hasta el cierre del recinto.