El equipo de gobierno inicia el procedimiento para volver a adjudicar los trabajos del Vicente Artero, La Marina y el Pinar
Las aulas para los niños de dos años en los colegios Vicente Artero, La Marina y el Pinar vuelven a salir a concurso público, porque la empresa adjudicataria ‘dejó colgado’ al ayuntamiento en el límite de los plazos de adjudicación. Vicent Sales ha afirmado que la empresa apuró todos los plazos y dejó a la entidad municipal sin capacidad de actuación. Compromís pide que se vuelvan a licitar cuanto antes.
Los colegios Vicente Artero, La Marina y El Pinar debían haber estrenado aulas en este curso escolar, destinadas a los niños de dos años. Se trataba de un proyecto en el que se había puesto la mayor ilusión, con el fin de optimizar las condiciones en los que los pequeños se estrenaban en el cole.
Pero las cosas no han salido como se esperaba. Con el curso a punto de empezar, las aulas no estaban ni se las esperaba. Ante la preocupación de los padres, la concejal de Educación María España reconocía la existencia del problema y se improvisaban medios para que los niños de dos años de los tres colegios fueran debidamente atendidos.
¿Cuál fue el problema? ¿Qué había ocurrido?
Según ha informado el portavoz del gobierno, Vicent Sales, la remodelación de los tres colegios para la creación de este aula salió a concurso público y se adjudicó a la empresa Edificaciones Inconop Industrial de Levante , S.L.
Los procedimientos de contratación
Hasta aquí todo bien. Pero los procesos de contratación pública tienen sus procedimientos. No son inmediatos en el tiempo. Para empezar, en función del volumen económico de la obra, deben de ser publicados en la Plataforma de Contratación del Estado. Tal como se hizo.
En esta plataforma se publican también los pliegos de condiciones técnicos y administrativos, y se establece un plazo para que las empresas puedan concurrir a este concurso público.
Esas condiciones técnicas y administrativas establecen un sistema de puntuación y valoración, con el fin de que todo el procedimiento pueda realizarse de la forma más transparente; de que no interfieran intereses de terceros. Se establecen hasta tres pasos diferentes con sus diferentes puntuaciones. Sobre A, sobre B y sobre C. Solo al llegar a este tercero, el último que se abre es cuando entra también en concurso el presupuesto de las obras.
Esa Plataforma informa de la oferta más ventajas, que la traslada a los técnicos municipales, y es la Mesa de Contratación del ayuntamiento la que eleva a los órganos de gestión la adjudicación del proyecto.
Cuando la obra ya tiene un adjudicatario concreto, todavía se abre un plazo para que la empresa justifique que dispone de todos los documentos que se le exigen y efectivamente está cualificada y tiene capacidad para llevar a cabo esos trabajos. Durante ese periodo, las otras empresas que se han presentado al proyecto pueden también, presentar sus objeciones, e incluso denunciar la adjudicación, si estiman que puede haber defectos en la valoración y la adjudicación.
En este procedimiento, en concreto, la Plataforma, y la Mesa de Contratación se decantaron por la empresa Edificaciones Inconop Industrial de Levante , S.L. para la construcción de las aulas de dos años para los tres colegios.
Sin embargo, las cosas ya venían revueltas. Una vez notificada la adjudicación, indicaba Vicent Sales, la empresa apuró hasta el último día ‘hábil’ para responder al ayuntamiento. Y así ocurrió también con el resto de los trámites que la empresa debería haber solventado en los plazos previstos.
De esta manera, el tiempo corría, la adjudicación final se retrasaba, la empresa tardaba o no daba señales de vida, y se aproximaba la fecha del inicio del curso escolar. Las aulas no estaban construidas.
Vicent Sales manifestaba en rueda de prensa, que finalmente el Ayuntamiento de Castelló pudo comprobar que la empresa se encontraba en Concurso de Acreedores. Es decir, ni empresa, ni construcción de las aulas que deberían haberse estrenado este mes de septiembre.
Como además los plazos corrían, el ayuntamiento se quedaba también sin capacidad de reacción para poder optar por una solución alternativa, como la de derivar la adjudicación de las obras a la segunda empresa mejor valorada en el concurso público.
En resumen, las Aulas para niños de dos años en los colegios Vicente Artero, La Marina y el Pinar, ni están ni se las espera. No existen.
El problema se ha resuelto buscando soluciones alternativas… pero el proyecto se ha quedado en el aire.
La Junta de Gobierno Local aprobaba esta mañana incoar un expediente a la empresa Edificaciones Inconop Industrial de Levante , S.L. con ello, resuelve el expediente que anula la adjudicación y abre la vía administrativa para exigir a la empresa una indemnización por daños y perjuicios ocasionados a la administración.
Ahora, el ayuntamiento deberá volver a iniciar todo el procedimiento, desde cero, para sacar a concurso la construcción de las tres aulas que nadie duda que acabarán por construirse, pero el daño ya está hecho.
Una vez conocida esta información, Ignasi Garcia, portavoz de Compromís ha denunciado:
“El Partido Popular no solo retrasó la adjudicación de la obras de las escuelas de dos años en los Ceips La Marina, el Punar y Vicente Artero, sino que lo han adjudicado a una empresa que no va a realizar la obra. Por eso, Compromís exige que se licite de nuevo el contrato para acabar con las aulas provisionales que hay en estos tres colegios y, sobre todo, que continúen apostando por la educación de dos a tres años que implementamos en el gobierno anterior y que son tan necesarias y beneficiosas para las familias de Castellón y el Grau”.