Con el objetivo de que llegue más gente al centro de la ciudad y que se incentiven las compras en los establecimientos comerciales
La alcaldesa de Castellón, Begoña Carrasco, junto a los concejales de Urbanismo y Servicios Públicos, Sergio Toledo; de Movilidad, Cristian Ramírez y de Comercio, Alberto Vidal, se han reunido este jueves con los propietarios de los comercios del centro de la ciudad para informarles sobre las acciones que el Ayuntamiento ya ha puesto en marcha y otras que va a implementar para ayudar al comercio local, con el objetivo de que llegue más gente al centro de la ciudad y que se incentiven las compras en los establecimientos comerciales.
“Queremos mejorar el centro de Castellón y estamos trabajando para conseguir que sea más accesible con el proyecto rediseñado de Zona de Bajas Emisiones y que tenga más vida, a través de las campañas de dinamización y los bonos comerciales que ayudarán a incentivar las compras y atraer a los vecinos y visitantes de otros municipios, por eso otro de nuestros compromisos es que las cámaras dejen de multar cuanto antes”, ha destacado la alcaldesa.
Una de las medidas que la primera edil ha trasladado a los propietarios de los establecimientos está relacionada con el proyecto que ha rediseñado el equipo de gobierno de la Zona de Bajas Emisiones, con el objetivo de atender las demandas de los comerciantes y que la implantación de las exigencias de Europa con un centro más sostenible tengan el mínimo impacto en la economía local. Las mejoras implican una ciudad más verde, más sostenible y más accesible, con algunos cambios de circulación y con la eliminación del sistema sancionador de las cámaras en el centro.
La alcaldesa ha señalado además que “hemos eliminado el cierre al tráfico rodado de los 745.000 metros de cuadrados del casco urbano que contemplaba el proyecto inicial del anterior gobierno garantizando que se cumple en todo momento con los parámetros establecidos dentro de la ley europea de emisiones, tal y como sucede ahora”.
En este sentido, la alcaldesa ha informado a los representantes del sector que se crearán párkings disuasorios, con transporte lanzadera para facilitar la llegada al centro porque “no queremos que el centro vuelva a llenarse de coches, por ello se pondrán en marcha otras medidas como paneles informativos y habrá más agentes de movilidad urbana en la calle para controlar accesos al centro”.
En la reunión, en la que había una treintena de propietarios de establecimientos del centro, la primera edil también ha explicado que antes de finalizar el año el Ayuntamiento va a poner en marcha la campaña de bonos comerciales con 300.000 euros para incentivar las compras en el comercio de proximidad. “Los comerciantes nos pedían que impulsáramos esta iniciativa fuera de las campañas de compras como el Black Friday o Navidad porque en esas fechas las ventas ya están garantizadas, y así lo vamos a hacer”, ha asegurado la primera edil.