La industria cerámica de Castellón (provincia de Alicante, según la ministra Calviño) necesita ayudas reales, que sean efectivas y que no se limiten a un montón de promesas huecas y de buenas intenciones. El sector necesita soluciones a sus problemas para recuperar una rentabilidad que le permite crear puestos de trabajo y riqueza para todos.
Y no debe ser tan difícil, porque otros países de nuestro entorno ya han puesto en marcha esas ayudas que permite a sus sectores productivos hacer frente al desmesurado incremento de la factura energética, como es el caso de Italia, Alemania o Francia. Y es que el Gobierno de España, el Gobierno de Pedro Sánchez, en lugar de aprobar medidas reales que sean un balón de oxígeno para las empresas y los miles de puestos de trabajo que dependen de ellas como han hecho otros gobiernos de la UE, sigue ignorando las demandas del sector cerámico.
El Gobierno del PSOE abandona a la industria cerámica porque ni siquiera sabe que este sector crucial para el empleo y la economía de la Comunitat Valenciana se concentra en más del 90% en la provincia de Castellón. Ahí tenemos a la ministra Nadia Calviño, vicepresidenta del inefable Pedro Sánchez, que presume por la tele de apoyar a los azulejeros de Alicante… El PSOE vive en la más oscuras de las ignorancias y Pedro Sánchez no ve dos palmos más allá de su sillón…
Pero ante la dejadez y el abandono del PSOE, el PP planta cara a la situación. Por eso, ante un Gobierno que sitúa al sector cerámico de Castellón en la provincia de Alicante y que no conoce la realidad de la industria ni se preocupa por ella, el presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo ha venido a nuestra provincia, se ha reunido con las patronales cerámicas Ascer y Anffecc y ha visitado una planta azulejera. Pero, sobre todo, en el PP hemos presentado propuestas realistas y contundentes para poner fin a la sangría de puestos de trabajo que se está produciendo en la provincia.
La principal propuesta que lanzamos desde el PP y que el propio presidente Feijóo explicó en Castellón es crear una tarifa especial para industrias hiperintensivas en energía, como es el caso de la cerámica, para que las fábricas no pierdan competitividad y puedan seguir produciendo. Otra de las medidas que proponemos desde el PP es crear una línea de ayudas o créditos fiscales para repartir los costes derivados del aumento exponencial del precio del gas entre empresas y Gobierno. Desde el PP también consideramos que es necesario hacer uso de los fondos europeos para ayudar a la industria, para completarse con un paquete de ayudas excepcionales y temporales para paliar los costes del gas.
La situación del sector cerámico es especialmente crítica para el empleo de nuestra provincia. Por eso no podemos cruzarnos de brazos. Por eso desde el PP estamos trabajando para solucionar los problemas de una industria básica para nuestra economía de Castellón y de los castellonenses. De toda la provincia de Castellón. ¡Y mientras, la ministra Calviño se preocupa por la cerámica de Alicante!
