La conducción que lleva el agua desde la fuente de San Miguel a la localidad castellonense se vio afectada por el incendio que el pasado mes de marzo quemó 4.000 hectáreas en la zona
La Generalitat ha iniciado la ejecución de las obras destinadas a reemplazar la tubería de la localidad castellonense de Puebla de Arenoso que resultó dañada por incendio que el pasado mes de marzo quemó alrededor de 4.000 hectáreas de monte en la provincia de Castelló.
Tras la validación por parte del Consell de la declaración de emergencia los trabajos para reponer la referida instalación, que cuentan con un presupuesto que supera los 400.000 euros, se desarrollan ya a buen ritmo.
Tanto es así, que el director general el Agua de la conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica, Manuel Aldeguer, ha señalado que “las obras estarán concluidas en el plazo de un mes, de tal manera que el suministro de agua en las mejores condiciones quedará absolutamente garantizado”.
La conducción original que traslada el agua desde la fuente de San Miguel hasta Puebla del Arenoso se realizó de forma manual en los años cincuenta del siglo pasado y alguno de los tramos de la misma que se encontraban en la superficie sufrieron los efectos del fuego.
Un primera intervención impidió que el suministro quedase interrumpido, pero es ahora cuando se están acometiendo unas obras que incluyen, entre otras cosas, la total sustitución de la tubería que, una vez finalizada la tarea, discurrirá bajo tierra, a un metro de profundidad, a fin de evitar su deterioro y prevenir también que pueda verse afectada de nuevo por cualquier otro siniestro. La citada conducción tiene una longitud de 2.400 metros.
Además, este programa de obra incorpora una desviación de la tubería para facilitar la distribución de agua para los cultivos de la zona, la construcción de dos fuentes para dar servicio tanto a personas como a animales silvestres y el reforzamiento de ciertas estructuras con el objeto de evitar los posibles daños que pudiesen ocasionar en el futuro hipotéticas avenidas de agua.
