Puig: "No puede haber una política energética aislada de la política industrial porque tiene graves consecuencias"
La Mesa de la Cerámica, convocada esta mañana en la Casa dels Caragols, de Castellón, ha reivindicado medidas energéticas que favorezcan la competitividad internacional del sector. los empresarios cerámicos han puesto sobre la mesa los graves problemas que atraviesan ante una falta de sensibilidad que encarece sus costes. El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, ha compartido esta preocupación y ha anunciado que pedirá reuniones inmediatas con el Gobierno Central, para aplicar una política energética que garantice las inversiones y la competitividad del sector cerámico.
LC/ EM/ Castellón Información
La Mesa de la Cerámica se ha reunido por fin esta mañana en la Casa dels Caragols, de Castellón, sede del Gobierno Valenciano en la provincia. En esta reunión han participado los representantes del sector azulejero, Ascer, de la Asociación Nacional de Fabricantes de Fritas, Esmaltes y Colores Cerámicos (Anfecc) y de la Asociación Española de Fabricantes de Maquinaria y Bienes de Equipo para la Cerámica (Asebec), y los representantes del Gobierno Valenciano, liderados por el presidente del Consell, Ximo Puig, el conseller de Economía Sostenible, Sectores Productivos, Comercio y Trabajo, Rafa Climent
Los empresarios no se han andado por las ramas, y el presidente del Consell tampoco. De esta manera, cuando han comparecido ante los medios de comunicación, ambas partes han mostrado su preocupación por el problema energético para sus empresas, y con la transición ecológica necesaria para encontrar una solución "a corto plazo" que permita atender las necesidades del sector.
Y es que, como comentaba el presidente de Ascer, no se puede competir en igualdad de oportunidades cuando los costes de producción y suministro energético son mucho mayores que los de otros mercados. Por esta razón, han pedido al presidente Puig que acabe con la incertidumbre en torno a la cogeneración.
Así las cosas, el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, ha recogido la demanda de los empresarios y ha emplazado al Gobierno central a aplicar una política energética que garantice las inversiones, la renovación de equipamientos y la propia viabilidad del sector cerámico y ha anunciado la solicitud de reuniones con las ministras de Industria, Reyes Maroto, y de Transición de Ecológica, Teresa Ribera, para abordar soluciones que respondan a las necesidades del empresariado.
El president de la Generalitat ha indicado que "la cuestión energética es fundamental" porque supone un 30% de los costes de industria cerámica, por lo que constituye un "factor esencial" para la competitividad de las empresas que se defina una política energética coherente con la relevancia económica de este sector. Puig ha asegurado en este contexto que, con el nuevo Gobierno de España, se está ante una oportunidad para que exista un cambio de orientación en este ámbito.
"No puede haber una política energética aislada de la política industrial", como ha ocurrido hasta ahora, porque esa situación tiene "graves consecuencias en la industrialización", ha defendido el president.
Por ello, se ha mostrado partidario de trasladar al Ejecutivo central, conjuntamente con los representantes de las asociaciones, la importancia de "un planteamiento común sobre la vigencia de la cogeneración" y, por otra parte, también ha solicitado que, en relación con la repotenciación, se atienda también a las necesidades del sector.
El president ha destacado que existe "un gran problema de falta de energía para desarrollar nuevos proyectos", algo que ha calificado de "muy lamentable teniendo en cuenta que existe capital y capacidad de inversión".
"Un sector que aporta tanto a la economía y a la balanza de pagos tiene que ser tenido en cuenta" a la hora de definir la política energética, ha indicado Puig, quien ha pedido también un "mayor compromiso de las compañías energéticas con el desarrollo industrial del país".