Luis Andrés Cisneros.
Al hablar de dictaduras, y ello es un éxito innegable de los partidos comunistas y/o de izquierdas, todo el mundo piensa, inmediatamente en Pinochet, Franco, Hitler o Mussolini, pero nadie lo asocia a Stalin, Lenin, Castro, Kim Jong-un o cualquier dictador de los países que nada tienen que envidiar y superan, con creces, cualquier desmán de los primeros.
Y ello tiene especial vigencia en nuestros días en los que han llegado a considerar dogma de fe que llamar, de forma despectiva, ‘fascista’ a cualquier defensor de las libertades del ser humano sea políticamente correcto y necesario.
Claro, para llegar hasta aquí, han tenido que contar con la inestimable colaboración del PP y del PSOE que han mirado para otro lado mientras se iban produciendo atentados a la libertad de los españoles, con tal de conservar
sus prebendas, principalmente autonómicas. Como diría un dicho popular catalán ‘la pela es la pela’.
De Ciudadanos ni hablamos, ya que su ideología es cambiante según el sitio donde esté, lo que marcan las últimas tendencias y ya le está empezando a tomar gusto a lo del sillón oficial. Vean la diferencia de criterio de los Naranjitos
en Andalucía o Madrid.
Pero, lo verdaderamente preocupante es que entre todos, están contribuyendo a la desaparición de un país, España, que ha llevado a cabo infinidad de gestas y logros a lo largo de su historia. Y con un amplio reconocimiento
mundial, lo cual le es negado, hoy en día en nuestras propias tierras.
En España, se da la paradoja de que pululan por las instituciones, de las cuales todos ellos cobran opíparamente, una legión de politicastros cuyo objetivo principal y único, es la destrucción del país del cual reciben todos los chollos imaginables e inimaginables. Estos dictadores del siglo XXI han colocado a infinidad de socios colaboradores en diversos entes que dominan con mano de hierro la vida pública en nuestro país.
Se les llena la boca de las palabras, libertad, democracia, estado de derecho, y hacen todo lo contrario de lo que dicen realizar. Voy a ponerles un ejemplo reciente.
Esta misma semana, la escritora Alicia V. Rubio iba a pronunciar una conferencia en el Ateneo de Santander.
Después de que la solicitud del local para la citada charla había sido concedida, las presiones de Podemos, han
hecho que los ‘valientes’ miembros del Ateneo santanderino se echaran atrás y le negaran la sala. Claro la conferencia llevaba por título ‘La Dictadura de la Ideología de Género’. Iba contra el espíritu del Pensamiento Único.
Por el contrario, La facultad de Geografía e Historia de la Universidad de Valencia, autoriza, sin ningún problema ni rubor, un acto a favor de la República Valenciana. O sea, un acto que cuenta con el apoyo de la CUP y con un marcado y nada disimulado, movimiento de apoyo a las tesis catalanistas de secesión se celebra con total impunidad.
Claro, estos son de los de la Dictadura del Pensamiento Único.
Todo ello va enmarcado dentro de un objetivo torticero que es, ni más ni menos, que la desaparición de España, de la familia, del cristianismo y del idioma español. A ello dedican todos sus esfuerzos los partidos secesionistas, con la inestimable colaboración del Partido Socialista, antiguamente llamado también Español. Esto es consecuencia de un fallido Estado Autonómico que, además de la ruina económica, lleva consigo una ruina en valores.
Desde el mismo Gobierno, las Instituciones, las Autonomías y, lo que es más triste, desde los propios Ayuntamientos, se ha instalado este objetivo: la doctrina del Pensamiento Único. Veamos dos ejemplos claros de la estulticia y
la mezquindad que nos invade.
La Junta de Andalucía ha promovido dos talleres, uno de Masturbación Femenina y otro de Masaje Erótico entre Hombres, pagados con dinero público, y realizados, bajo pago por parte de la Junta o bien con una subvención acordada, para una ONG, seguro que compuesta por amigos o conocidos. Ahora bien, después de lo de Oxfam o Médicos Sin Fronteras no nos extraña el contenido de los cursos.
Uno de los éxitos, y fueron muchos, del Imperio Romano, fue el conseguir que el idioma oficial en todos sus territorios fuera el latín, así se cohesionaban todos los habitantes con el Imperio. Eso lo han visto bien a las claras los
secesionistas catalanes, de ahí que se afanen en eliminar el español de la vida pública y particular. Esa obsesión está grabada a fuego en los componentes de Compromiso.
Marzá y García, Monta tanto, tanto Monta quieren crear problemas donde no los hay, ya que en Castellón jamás ha existido problema con el valenciano y el español, pero ellos, en su afán de destruir al enemigo hispánico, están haciendo lo que sus jefes han conseguido en Cataluña, dividir a la población.
Por cierto, la Alcalde ¿qué hace? Una de dos o bien les deja el trabajo sucio a los de Compromiso, o bien es ella la que los dirige en la sombra y les encarga el trabajo más conflictivo. O, a lo mejor, es que la dictadura alienante en la que
estamos metidos de lleno, no le deja hacer ningún movimiento distinto al Pensamiento Único.
Lo dicho, las dictaduras no se acaban, se transforman, ahora son Alienantes.
Y, como siempre, y más en los tiempos que corren mi despedida es…….
¡¡VIVA ESPAÑA!!
